La gran prueba de Charlie

La parte mas dificil

Y bueno... así fue como conseguí el mejor acenso que había tenido hasta el momento, pero no todo es color de rosa, en algún momento empezarían las complicaciones, ahí es en donde se pone fea la historia.

Mi trabajo era "simple", solo tenía que convencer al director de la empresa más importante para que aceptara un contrato que había rechazado ya dos veces al más experimentado de los vendedores de nuestra compañía, ¿ya no parece tan "simple" o si?

Bueno, desperté el día de la cita con el, me bañé, me puse uno de mis nuevos trajes, cortesía de la compañía, bajé del departamento, no desayuné, mi plan era llevarlo a el a desayunar, el plan de la compañía era que lo encantara como pudiera, de ahí la tarjeta de crédito.

Llegue al auto, fue raro, de transportarme en metro a manejar un auto de lujo. Dejé a mi novia en la escuela y me dispuse a llegar a la oficina general de la empresa, había tenido que insistirle demasiado, pero al final accedió a qué pasara por el.

Buenos días- dije al llegar a la recepción- vengo a buscar al Señor Smith-

-Claro, ¿ya lo espera?-asentí con la cabeza- Está bien, un momento, si gusta tomar asiento.

Pasados unos minutos llegó, era un señor de unos 40 o 45 años, con barba, lo que me llamó la atención era su vestimenta, llegó con un short y una guayabera, no le di importancia, a fin de cuentas era el empresario más exitoso de todo el país, se podía vestir como quisiera.

-Charlie, ¿cómo estás?- me saludó amablemente.

-Señor Smith, bien, gracias, ¿usted cómo está?-rayos, estaba nervioso.

-Vamos Charlie, no me hables de usted, me siento más viejo, por favor, dime William- dijo de una forma tan relajada que me sorprendió

-¿Está seguro señor?-dije mientras el asentía con la cabeza- está bien, ¿Quiere que nos vayamos?

-Si... a propósito de eso, hay un problema Charlie- Va a cancelar, pensé- no recordé que tenía un partido de tennis hoy, pero no te preocupes, conseguí a alguien que fuera contigo

-No te molestes, si tienes algo más que hacer, nos vemos otro día.-dije, sin mucho entusiasmo

-No, Charlie, si no tienes inconveniente, me gustaría que la junta que ibas a tener conmigo la tengas con mi hija.

-¿Que?- dije sorprendido.

-Claro que entendería si no quisieras- dijo, algo resignado- algún otro día se podrá

-No, está bien, con gusto- Dije, más a la fuerza

-Está bien, le voy a avisar, ten, esta es la dirección, en una hora pasa por ella.