STEPHEN.

capitulo 19

-Blake-

Este idiota de Charlie se volvió un completo egoísta, gracias a Kate. Me arrepiento de haber agendado esa hora.

Voy a su habitación esperando encontrarlo ahí para hablar. Está sentado en su cama, cabizbajo y con la mirada perdida.

-Charlie- lo llamó. Levanta la vista y me mira.

-Quiero disculparme contigo por todo lo de anoche- me disculpé

-Bien- respondió

-No, nada está bien- le recriminé- todos sabemos que no has superado su muerte aún, pero hombre, han pasado cuatro años, dentro de cuatro más cumplirás treinta, debes empezar a pensar que quieres de tu vida, una esposa, quizá hijos...-comencé

-No quiero nada de eso, Blake- me cortó- no quiero responsabilizarse por nadie mas que por mí mismo- soltó

-Eres un idiota egoísta, si Alicia siguiera aquí tu no serías así- solté con rabia

-Esa es la cuestión- me miró girando su cara- ella ya no está- susurró

-Charlie-

Alicia Roberts. La pequeña hermanita de Max. Les contaré una historia. Verán, Alicia vivía con nosotros, después de qué perdieran a sus padres en un tiroteo, su hermano mayor tenia su completa custodia pues aún era menor de edad. La gente de nuestro vecindario creía que algún día ella iba a morir al igual que sus padres. Y no se equivocaban. Un día x, nos hicimos novios, nos costó demasiado el que Max aceptara puesto que yo tenia veintidós años y ella 16. Un día, el idiota de Jayden Morris la invitó a una carrera clandestina, en la cual perdió la vida. El auto se volcó con los dos dentro, pero a Alicia le tocó la peor parte, el auto que venia detrás impactó justo en el lugar donde se encontraba su asiento. Al principio me culpaba por no haber llegado para impedir que se subiera a ese auto, luego, Max y Blake agendaron una hora para mí con la psicóloga Kate Rodwick, ella me ayudó a superar la muerte de Alicia y lo peor, me convirtió en un hombre egoísta. Ella me metió la insana idea en la cabeza de que a Alicia le había pasado por irresponsable, al igual que todo lo que les pasa a las demás personas es por irresponsables o es su karma. Yo me creí todo eso, sin saber o quizás si, solo no quise ver para dejar de sufrir y culparme.

Quizá sea tiempo de cambiar.

-Scatha-

No pude dormir en toda la noche. Me siento enferma y vomité durante toda la noche solo bilis.

Antes de levantarme, entra Charlie con una bandeja repleta de cosas y unas pastillas en mano.

-Te traje esto, no te ilusiones, me obligaron- dijo poniendo con cuidado la bandeja en mi cama

-Muchas gracias...esto...yo...disculpa por lo de anoche, enserio...verás yo- comencé pero me cortó

-No te preocupes, eso no importa, si necesitas algo más, me avisas o a cualquiera de los chicos- dijo saliendo de la habitación.

Huelo todo para comprobar que no tiene veneno, uno nunca sabe. Comienzo a comer y al poco tiempo ya me he devorado todo, wow, tenía demasiada hambre.

Recibo una llamada a mi celular. Es mi jefe. Contesto y me llevo el teléfono a la oreja.

-¿Si?- pregunté

-Los quiero en...- hizo una pausa- cuarenta minutos aquí, ni un minuto menos, ¿entendido?- preguntó

-Claro- colgué 

Me levanté de la cama. Dios, no puedo moverme. Me duele infiernos la cabeza y mis piernas parecen no querer reaccionar.

-¡Charlie!- grité presa del pánico

Abrió la puerta de golpe y yo caí al frío y duro piso.

-¡¿Que te pasa?!- preguntó alarmado tratando de levantarme

-¡No puedo caminar, mis piernas no sé mueven!- contesté alarmada

-Charlie, el jefe nos quiere en media hora en su oficina- dijo Blake entrando con él teléfono en la oreja. Al verme se escandalizó- ¿qué te pasó mujer?- preguntó

-No puede andar- contestó Charlie por mí

-Jefesito hay un problemita- dijo Blake al auricular- nuestra jefesita de la casita no puede caminar- dijo

-Muy bien, en una hora estaremos allá- dijo colgando la llamada- Nos dio una hora primor, mejórate luego- salió de la habitación

-Imbécil- susurró Charlie quien me había dejado sobre la cama de nuevo-¿para que ibas a levantarte?- preguntó

-Debo bañarme- dije

-Pero no puedes ni mantenerte parada- concluyó

-Touché- respondí

-Te ayudaré, no es como si no te hubiese visto ya- rodó los ojos

-Dijiste que no lo habías hecho- pegué un suave puño en su brazo

-Bueno, iré a llenar el jacuzzi- dijo caminando hacia el baño

Tomé mi teléfono y tenia quinientos mensajes de Emmily. Los ignoré y aventé el teléfono a alguna parte de la habitación.

-Ya está el Jacuzzi- dijo saliendo del baño- ¿piensas bañarte así, vestida?- dijo quitando su polera, dejando a la vista sus tatuajes y su abdomen marcado.

-¿Que haces?- pregunté cuando comenzó a sacarse los pantalones

-Pues, ni que fuera a entrar vestido y salga totalmente empapado de ahí- respondió obvio

-Okay...- dije comenzando a desvestirme. Sentía la mirada de Charlie en mi nuca y cierto pudor, pero los ignoré. Traté de pararme de nuevo cuando estuve en ropa interior y enseguida cuando tropecé, Charlie me cargó al estilo nupcial y me llevó al Jacuzzi. Entró a él aún cargándome y me bajó a la caliente agua. 

Luego de bañarnos juntos (no de la forma que creen, pervertidos) Charlie me sacó envuelta en una toalla. Cogió ropa interior y ropa para ponerme de los cajones. Me puse todo lo que me pasó, unos jeans negros y una polera lisa azul marino, conjunto de ropa interior negro y mis Vans negras. Traté de incorporarme con la ayuda de Charlie y logré que mi cuerpo se estabilizara. Comencé a dar pasos lentos hasta que por fin mis piernas reaccionaron. Todavía quedaban veinte minutos para llegar y estábamos todos vestidos y en nuestros respectivos autos. Esta vez, usé mi Jeep.

Llegamos al almacén y nos bajamos de los autos. En la puerta habían dos de nuestros guardias mirándonos con cara de pocos amigos.

-¿A quien vienen a ver?- preguntó uno de los mastodontes

-Al jefe- contesté- el sombrerero está a punto de tomar el té- dije prácticamente susurrando. El guardia asintió e indicó que nos dejaran pasar.

Nos condujeron hacia su "oficina de reuniones" que constaba de una habitación que olía a humedad y en el medio había una gran mesa de roble con sillas alrededor.

-Jimmy, siempre un gusto- saludé estrechando su mano

-Scatha- saludó de igual manera- o...Pamela para los demás- río y reí levemente junto a él. Era una persona agradable.

-Traje a mis chicos, tienes una misión  para nosotros, queremos oírte- dije yendo al punto. 

-Deben entrar a la casa del Alcalde y robar el dinero que tiene presupuestado para hacer su campaña, mañana por la noche- dijo sin rodeos

¿Del Alcalde? Ay no.

Akakwbdndbd capitulo listo. Mil disculpas, no recordaba que ayer fue miércoles, les juro que tenia el capitulo desde hace tiempo, enserio. Mil disculpas nuevamente.

Besos.