Alerta

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Ya ha pasado una semana desde esa "situación" entre Marinette y mi "amigo".
El estar con Marinette ya no era los mismo, y las imagenes de ese día volvían a mi mente. Quería borralas al verlas, pero era imposible. Ya no era el mismo.

-Plaggi-dijo con sutileza la azabache interrumpiendo mi pensamiento.
-¿Qué pasa?-dije serio.
-Quiero arreglar las cosas contigo-dijo entusiasta y con cierto brillo en sus ojos azulados-. He notado que tu ya no sientes lo mismo cuando estamos juntos, y quiero que todo vuelva a la normalidad- yo no iba a decir nada, pero vi la tristeza contenida en su interior. <<Demonios Plagg, ¿por qué sigues estúpidamente enamorado de una chica que te engaño?>>, me decía casi a diario, y hoy no era la excepción.
-Mari-tome su suave y delagada mano-. ¿Qué piensas hacer?, estoy a tu disposición-dije sonriendo, aunque no estuviera muy seguro. Sus ojos se volvieron a iluminar y su ánimo subió, al decir esas palabras.
-¡Una cena!-dijo gritando y casi saltando, provocando que todas las personasa nuestro alrededor nos miraran-. Va a ser la mejor cena romántica, solo nosotros dos-dijo al momento que se acercó para abrazarme.
-¿Cuándo?-por alguna razón a mi también me entusiasmaba la idea de pasar tiempo a solas, y de algo estaba seguro. Aún la amaba con la misma intensidad que desde al principio.
-Este viernes en mi casa-dijo sorniendo-. Mis papás no van a estar-ya entendía a donde quería llegar la chica. Pero no era alguien fácil. Se tenía que llegar a mis puntos débiles para caer ante los pies de alguien.
-Me parece perfecto-dije sonriendo.

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Después de programar nuestra cita, me tuve que ir a casa. Pero decidí hacer una parada rápida con el maestro Fu.
Entre al local hasta encontrarme con una puerta que estaba entreabierta. Estaba por abrir por completo la puerta, hasta que una voz dentro que la habitación hizo que me detuviera.

-¿Seguiremos con el plan?-preguntó una voz masculina la cual me era familiar.
-Si-dijo la voz que claramente reconocía, la voz de Fu.

Para confirmar al dueño de aquella pregunta, me asomé un poco por el pequeño espacio que había. En dentro de la habitación se encontraban Adrien, Edith, y el maestro.
Pero, ¿qué estaban haciendo ahí?, ¿cuál plan?. Necesitaba explicaciones pero rápido.

Estaba tan concentrado pensando, que nisiquiera me di cuenta que me recargue en la puerta, y ésta se abrió completamente, provocando que me cayera, llamando la atención de los ya mencionados.

-¿Plagg?-dijieron al unísono. Yo no contesté, sólo me límite a pararme y tomar la compostura.
-¿Qué haces aquí?-preguntó Edith ¿asustada?.
-Pasaba a ver al maestro-dije indiferente-. Y, ¿tú que estás haciendo en este lugar?-dije tratando de sacar información.
-V-vine a...-dijo nerviosa y pensativa.
-Vino a una sesión de masajes-interrumpió Adrien.
-¡Sí eso!-afirmo la peli roja.

Yo sentía que algo no andaba bien. ¿Es coincidencia que las dos personas que trataron de destruir mi relación con Marinette estén en este lugar? No, no lo creo. Y, ¿de qué plan estaban hablando?. ¿Por qué todos se pusieron tensos al verme?.
Tal vez llegué en mal momento.

-¿De qué plan hablan?-dije interesado y adopté una postura que demostraba la seguridad que tenía en ese momento.
-Es privado-dijo el oxigenado de forma brusca.
-Adrien-llamó el anciano. Todos fijamos nuestras miradas en él-. Creo que es momento de decirle. Hemos hecho ya mucho daño. Él podría facilitar las cosas-dijo con su típico tono lleno de serenidad.

Adrien y Edith se miraron por un breve momento, como si se pudieran comunicar mentalmente. Después me miraron con ¿tristeza?.

-Plagg-dijo Adrien acercándose a mi. Puso una de sus manos en mi hombro, y yo la retiré. Él solo me miró-. Lo que te vamos a decir...-miró a las otras dos personas presentes en la habitación-. Sólo... Tienes que ser fuerte-dijo cabizbajo.
-Tu sabes que eres una parte fundamental en el equilibrio de las cosas que suceden-comenzó Fu-. Y que si el ying y el yang no son iguales, puede haber consecuencias fatales. Es por eso, que...-paso saliva-. Tienes que volver a tu estado de Kwami- dijo muy serio.

Yo no podía creer lo que este señor me decía.
Guardé silencio para reflexionar sobre los últimos días. En como había estado distante de mi princesa y no había aprovechado el tiempo con ella. Me arrepentí de rechazarla cada que me invitaba a su casa. Y, ¿ahora que sería de nosotros?. Era obvio que ambos nos necesitábamos.

No tardaron las miradas de tristeza y hasta lástima de parte de los presentes en la habitación. Necesitaba estar solo, pero de pronto mi mente comenzó a traer recuerdos de situaciones raras que ignore.

-Ya habían tratado de convertirme en kwami cuando estuve inconciente-dije afirmando-, ¿Mari lo sabía?-Adrien y el maestro Fu solo negaron con la cabeza-. Has caído tan bajo Agreste. Acostarte sólo con Marinette para destrozarme y aceptar volver a ser una criatura mágica-él solo bajó la cabeza asintiendo-. Y tú Edith. Tratarme de seducirme. Jamás lo ibas a lograr, por más tentación que tuviera; siempre le iba a ser fiel a mi novia-ella también bajó la cabeza. Mire al anciano-. Y usted. No se merece ser el cuidador de los prodigios, es una persona miserable. Como se le ocurre semejante cosa. Destruir la vida de todos, y a la vez humillarnos entre nosotros- salí rápido de aquella habitación, ya que dudo que alguno de ellos dijiera algo después de lo que dije.

"No confíes ciegamente en las personas cercanas. Ya que ellas siempre pueden llegar apuñalandote por la espalda. Mantente alerta"

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Hola!! Espero que estén super bien 💜💜💜

Este es otro dibujo de Edith, hecho por Noemi7887.

Muchas gracias por tomarte el tiempo para ilustrarla

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Muchas gracias por tomarte el tiempo para ilustrarla.

Los dos dibujos que me han mandado, estan en mi Instagram. Tal vez deje pequeños spoilers del final 😏. El cual ya se acerca 😭. Si, tal y como lo leyeron; este fanfic 💜 ya casi termina 😱

Bueno, es todo por hoy.
Bye! Hasta la próxima! 😘😘😘😘😘😘

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