Al llegar la mañana me levante, me sentía demasiado cansada, después de lo que había pasado no quería saber nada del mundo, mis sentimientos habían sido pisoteados, nunca me había pasado algo así, me sentía como una estúpida.
Después de darme una ducha me arregle para ir al colegio, tenia que ir después de todo había faltado ayer por culpa de ese estúpido.
Baje a la cocina, me serví un poco de cereal, tome mis cosas y Salí de casa.
Cuando Salí pude ver a alguien esperando por mí, no era nada más ni nada menos que ese idiota.
Era un maldito, como se atrevía a aparecerse así como si nada. Tome un profundo respiro y pase por su lado,
de repente me tomo de la mano.
Sin decir ni una palabra me solté de su agarre y seguí mi camino.
-MEI!!- escuche su voz, no pensé que eso me iba a afectar tanto, el escuchar su voz hizo que lagrimas salieran de mis ojos.
De repente sentí su abrazo, mi cuerpo estaba inmóvil, era como si mi alma hubiera desaparecido.
-¡TE AMO!- cuando dijo eso más lagrimas empezaron a salir de mis ojos, agache mi cabeza, estaba molesta y triste, ¿Acaso el no entendía lo que había hecho? ¿Es que él no comprendía todo el daño que me hizo?
-solo son palabras vacías- dije mientras levantaba mi cabeza
Me abrazo más fuerte, haciendo que mi pecho doliera
-MEI, yo sé cómo te debes estar sintiendo, por favor perdóname- escuchar su voz hacia que mi corazon doliera
Como pude me solté de su agarre, me gire y lo mire
- no puedo- le dije
-MEI- su cara se volvió seria
Me gire y empecé a caminar, era verdad yo realmente lo quería pero lo que él había hecho era demasiado para mí.
-MEI!- grito
-POR FAVOR! MEI!!- empezó a llorar
-NO ME HAGAS SUFRIR MAS!!!- grite
-Ya no quiero sufrir más- Salí corriendo
Cuando llegue a la escuela me dirigí al baño no quería entrar a clases me sentía demasiado mal, estaba pensando en el futuro, acerca de JIMIN de HOPIE, la vida se estaba complicando mucho, odiaba esto, no quiero seguir así.
De repente sonó mi celular
Llamada:
-hola?-
-MEI? Eres tu?-
-si, soy yo ¿Quién habla?-
-mmmm te fuiste y ya te olvidaste de mí?-
-YAMATO-san, eres tú?- YAMATO era mi representante, él se había quedado en JAPON trabajando mientras yo venía a COREA, el no solo era mi representante sino que también era uno de mis mejores amigos
-si, soy yo-
-Me alegra escucharte, ¿Cómo estás?-
- bastante bien, y feliz ahora que puedo escuchar tu voz MEI, me haces mucha falta-
-lo es también me haces falta!-
-adivina!-
-que?-