Nota de autor

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Querido lector\a, si está leyendo esto significa que llego al final del libro, y eso me alegra mucho.

Quiero decirles que esta historia no fue escrita para incentivarlos a la autolesión, a la ingesta de estupefacientes, ni mucho menos al suicidio, si no que fue escrita con el fin de informarles tanto a los adolescentes como a los adultos que no deben hacer. A los adultos quiero informarles que no deben tratar a sus hijos con violencia, ya sea física, verbal o sexual, en cambio deben apoyarlos, ayudarlos en lo que necesiten, contenerlos, etc. Porque si hacen lo contrario sus hijos pueden tomar malas decisiones, desde la ingesta de sustancias hasta el suicidio mismo, por eso si un padre esta leyendo esto y quiere en verdad a su hijo\a no cometa el mismo error que el padrastro y hermanastro de Sylvia, no le arruinen la vida, haga lo correcto sea el padre o madre comprensivo, atento, dado a su familia. Sus hijos necesitan eso, ellos no necesitan los mejores objetos para ser felices, ellos los necesitan a ustedes. Al fin y al cabo, también son personas, ellos sufren, ríen y viven como ustedes. Sin importar la edad que tengan, el maltrato físico, emocional, psicológico o sexual puede marcarlos de por vida.

Si usted es una persona que está leyendo esto y sufre de violencia, no lo silencie, salga a pedir ayuda porque cuando se atreva puede ser muy tarde.

A los adolescentes quiero informarles que si ustedes se sienten como Sylvia o Dominik y pasaron por algo similar no se rindan, sigan adelante, no están solos. Muchas personas tuvieron situaciones en las que el mundo se les vino abajo, pero lo afrontaron. Miren, la vida puede ser dura, pero siempre va a ver algo o alguien bueno que no te va a dejar caer, que te va a sostener y si, por esas casualidades de la vida, no tienen esa persona, sepan que se tienen a ustedes mismos, ustedes son los únicos dueños de su felicidad. En definitiva, la vida es lo único que es nuestro en este mundo y nosotros decidimos adonde queremos ir, no lo decide ni un padre abusivo, ni una pareja, ni una cicatriz, solo nosotros podemos decidir nuestra vida. Al que le gusta bien y al que no, no importa, si te hace feliz, es por ahí. Como dice el dicho "Después de la tormenta siempre vuelve a salir el sol". No decaigan, no ingieran sustancias toxicas como drogas, no se autolesionen y no recurran al suicidio para olvidar una desgracia, luchen, esfuércense por salir del abismo, lo van a lograr, confíen en ustedes, busquen ayuda, no traten de alcanzar "la perfección" ustedes son perfectos tal cual son.

Ya sé que se están preguntando ¿Quién soy yo para decirles esto?, la respuesta es sencilla: yo fui un ángel caído y lo superé. Como yo lo hice ustedes también pueden, es difícil, lo sé, pero es posible, con esfuerzo, positivismo y confianza en uno mismo lo van a lograr. YO CREO EN USTEDES.

Sin más preámbulos muchas gracias por su atención y hasta la vista.

Atte. Sofia Weiss, autora de este libro.

El EspejismoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora