Capítulo 9

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Lo llevo rápido hacia mi coche. Lo meto en el asiento de copiloto y encierro a Cat en casa, todo en menos de dos segundos, arranco sin mirar atrás, pero con una dirección fija.

Voy a toda velocidad. Como si la vida no importara nada, y en verdad es asi,  la vida es efímera y no importa lo que hagas porque vas a morir igual.

O al menos eso pensaría un humano.

Mi móvil vibra en el bolsillo de mi pantalón, lo descuelgo sin necesidad de preguntar quien es.

—Cat, ahora estoy realmente ocupado—le digo mientras miro al chico que esta a mi lado.

Salgo de la autovía para entrar en un pequeño pueblo que siempre esta de fiesta. Pero tiene lo que necesito.

Cuando llego a mi destino rápidamente bajo del coche y me llevo a mi acompañante conmigo.

Sigue expulsando espuma por la boca, pero ya no tiene convulsiones tan fuertes. En menos de dos minutos la persona a la que esperaba se para frente a mi coche.

—¿Este es el chico?—me pregunta escéptico.

—Es este— le digo sin más preámbulos — tenemos que llevarnoslo ya. O morirá.

Dos velas para el diablo dos : Angelo |REESCRIBIENDO|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora