Capítulo 9.

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Camila despertó en el suelo. Todavía no se acostumbraba a dormir en una litera, por lo que las caídas de la patosa eran increíbles cada día, lo peor era que ni se enteraba cuando dormía. Su sueño era tan fuerte que incluso a veces Ariana se sobresaltaba en mitad de la noche por el ruido que hacía su cuerpo al impactar con el suelo.

- ¿Otra vez en el suelo? – la castaña se estiraba en su cama, intentando desperezarse.

- Parece que es más cómodo que mi cama.

- Siempre puedes dormir conmigo – sonó coqueta su compañera de celda.

Camila llevaba días notando que la de ojos marrones no paraba de coquetearla. Empezó a darse cuenta desde que sus labios estuvieron a punto de rozarse, pero trataba de ignorarlo, aunque la mayoría del tiempo se hacía imposible. No era muy ducha en el lenguaje del coqueteo, por lo que a veces incluso le seguía el juego.

- ¿Dormir? – bromeó estirándose en el duro y frío suelo.

- Siempre tan elocuente Camila.

Rieron un poco más. Acabaron ambas tumbadas en la misma cama haciéndose cosquillas. Camila mentiría si dijera que la más delgada no era preciosa y que tal vez sentía algo de atracción por ella. Se obligó a si misma a no pensar en su pequeña obsesión con Lauren por que, dentro de su mente, creía que solo ella sentía y que tal vez no era muy conveniente seguir perdiendo el juicio (y dicho sea de paso las bragas) por la Gobernante. Los días pasaban en Reinserción y se estaba empezando a acostumbrar.

Al igual que se acostumbraba a la rutina de ese lugar, se acostumbró a abrazar a la chica de la coleta alta y a mirarla cierto tiempo a los ojos, fijando ambas miradas y creando un silencio lleno de tensión. Pero era una grata sensación la que corría por ambos cuerpos.

Justo en ese preciso momento, una sombra silenciosa apareció en la celda y comenzó a silbar.

- Esto parecería el inicio de una película porno si no fuerais presas reales – miraba a otro lado una divertida Lucy quien sonrió al ver como Camila se sobresaltaba haciendo que se diera con el techo de la litera de abajo.

Ellas se separaron rápido. Ariana tenía cierto rubor en sus mejillas al igual que Camila, pero la diferencia estaba en que, mientras que Camila miraba a Lucy como si fuera otra persona en el mundo más, Ariana se había quedado petrificada en cuanto se dio cuenta de la eminencia que estaba delante de ella.

Camila se levantó para quedar a la altura de la mano derecha de su ojiverde preferida y en cuanto se acercó, la de piel tostada le abrazó como si no le hubiera visto en siglos. La castaña se sentó en la cama observando cuidadosamente toda la escena.

La morena le había contado su situación, pero no que la mismísima Lucy Vives y (lo que supuso después) Lauren Jauregui fueran las personas importantes que le ayudaban en su ardua tarea de obtener justicia.

- Hace solo días que no te veo y ya estás dando amor a otra persona que no sea...

- ¡Lucy! – cortó Camila avergonzada – Lo que has visto... bueno... yo...

- Era dulce amor de presa, lo sé Cabello. Las noches son frías y ella está como quiere de caliente – miró de arriba abajo a la castaña que se estremeció y ruborizó más si eso fuera posible aún – ¿No me vas a presentar?

Camila se acercó a Ariana y le llevó hasta Lucy.

- Lucy, ella es Ariana Grande – Ariana, ella es...

- Lucy Vives – dijo fascinada y con un tembleque en sus piernas digno de un niño pequeño frente a un auditorio lleno de gente

- Me encanta causar eso – susurró la de piel tostada a la morena – Bueno, tendrás que disculparnos querida, pero me llevo a 270712 un ratito que puede que sea largo – mostró unas esposas y con su rostro pronunció un silencioso "perdón" a Camila quien ya sabía lo que había que hacer en el protocolo de actuación cuando se quería sacar a un preso de algún sector de las cárceles.

Juicio Justo [Camren AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora