En un viaje a París...

Capítulo XLV

Todo se veía borroso a causa de las lágrimas acumuladas en mis ojos. ¡No quería que G fuera acecino! ¿Por qué necesitaba matar a Drake?

-¡Dispara de una maldita vez!-Gritó Drake.

Un ruido sordo resonó en toda la habitación... Mi mente estaba en blanco... Ha disparado.

Miré hacia donde estaba Drake que yacía en el piso sangrando, él dirigió una última mirada hacia G y esbozó una sonrisa en busca de reprimir todo el dolor que sentía en ese instante... Luego, lentamente cerró los ojos... Murió.

Murió porque G le disparó... G lo mató. ¡Lo ha matado! Es un maldito asesino.

G me miró. Yo estaba asustada. Acababa de ver como moría una persona frente a mí y no hice nada.

-Idiota ¡¡¿Por qué lo mataste?!!-Grité. Pensé que G podía cambiar, ser una buena persona, ustedes entienden, pero no. Es un asesino y yo sinceramente no quiero estar relacionada con él.

-Cálmate Cam.- Me tranquilizó Jake.

-¿Tú puedes defenderlo? ¡¡Acaba de matar a alguien!! ¿Me pides que me calme?-.Ya no soportaba esto. Ya no sé en que pensar, mi vida se ha convertido en un hoyo negro sin salida.

G solo miraba perplejo a Drake. No estaba parándole en lo más mínimo a su entorno. Su mirada reflejaba rabia. Luego de unos segundos solo salió de la habitación sin decir una palabra.

...

Cuando por fin logré salir de esa casa con Jake y los chicos, escuchamos unas sirenas a lo lejos.

-¡Oh no! Corran. Viene la policía.-Dijo Will exaltado y empezando a correr.

Jake me tomó de la mano y me jaló tras él mientras huíamos. Ted llegó rápidamente con el carro, y nos metimos antes de ser vistos.

-Tendrán que meterse todos aquí. No hay tiempo de buscar otro carro. Ustedes verán como hacen para caber-.

Todos maldijimos en alto y nos acomodamos como pudimos. La parte buena es que entramos, la mala es que tuve que montarme arriba de Will.

-¿Cómo cuanto pesas?- Preguntó.

-No te importa.- Respondí. El solo me apretó con fuerza y me atrajo hacia él. ¿Por qué hace eso?

-Hey, hey, hey. Cuidado con lo que haces.- Interfirió Jake, quien le lanzó una mirada asesina.

-Me voy contigo hermano.- Dije pidiendo auxilio.

-No. Pesas mucho. Quédate ahí.-Respondió.

En resumen, Odio mi vida.

...

Llegamos a la casa a duras penas, ya que tuvimos un largo recorrido gracias a que la policía nos seguía.

G se bajó y entró a la casa. No habló y ni se sintió en el camino. ¿Ahora qué le pasa?

Entré y en lo primero que pensé fue en tomar un baño. Lavar cada parte de mí y olvidar que todo esto pasó, aunque a decir verdad estoy preocupada. Me gustaría regresar a casa con mi familia pero no puedo.

...

Vi el reloj. Ya eran las doce de la noche. Y pensar que más temprano me encontraba en una fiesta. Vaya día.

Busqué mi paño y mis cosas para preparar el baño. Cuando me dirijo a la puerta, veo algo que hizo que mi miedo emergiera. Es esa sombra otra vez. Quiero gritar... Ya no quiero seguirla, tengo miedo.

Trato de ignorarla y sigo aproximándome hacia el baño. Me detengo al escuchar cosas cayéndose en mi habitación.

-¿Qué sucede? ¿Por qué has tirado todo eso?-Preguntó Jake agitado ya que corrió a mi habitación al escuchar el ruido.