–Sugawara-San, tranquilo, le aseguro que estoy bien –Intentó sonreír el chico de las pecas, enseñándole a su adverso el interior de su boca ensangrentada.
Mala idea.
–¡Cielo Santo, Yamaguchi! ¿Como puedes decir eso? –Gritó el peliplateado, pasando nuevamente un pedazo de algodón por sobre las heridas de la pierna izquierda, sus ojos estaban algo cristalinos y su nariz roja.
Se sentía la peor persona del mundo al no haber podido evitar aquello.
– ¿Te parece normal esto? ¡Estas hecho un desastre!
–Por favor, ya deje de llorar, ya le dije qu―...
–¡Ya basta, Yamaguchi! ¡No me quieras ver la cara de estúpido! –Gruñó, vendando el sector ya desinfectado y sorbiendo su nariz.– Eso de que te caíste de la escalera no cubre el hecho de que tengas un puño marcado en tu ojo o lo de los dedos en tu cuello, ¡S-Siquiera el hecho de tener tantos moratones!
Yamaguchi bajo la mirada mordiendo su roto labio en un intento de ahogar un jadeo de agonía. Al mismo tiempo, Suga detuvo su accionar, estaban entrando en un ambiente más allá de estudiante a presidente del consejo estudiantil. Algo fuera del protocolo o de lo moral y de lo debido, esto ya era algo más intimo.
–No lo entiendo, ¿Porque no me lo dices? ¿Que te impide hablar con la verdad, Tadashi? –Indagó apretando sus puños.– Tres años... ¡Ya van tres años en que debes soportar esto! ¿Porque no hablar? ¿Porque soportar? ¿Porque no ser valiente y hacerles frente?
No hubo respuesta.
–Siempre es igual, te callas y por eso se aprovechan de ti; Piensas que guardándote todo no causaras problemas a nadie, pero ¿Adivina que? ¡Vives causándome problemas a mí! ¿Es que crees que no me molesta ver como todos abusan de ti? –La voz del mayor se rompió.– Eres mi amigo, Tadashi, no hago esto porque sea mi deber, ¡Lo hago por que me importas!
–Ese es el problema –Murmuró el de pecas.
–¿Huh?
–Ese es el problema, Suga-San –Repitió sollozando de forma leve, para luego transformarse en una desesperado, era como si aquella agua salina que brotaba de sus ojos portara todos sus males y penurias, intentando limpiar su sentir.
–Tadashi...
–¡Eres una de las pocas personas a las que les importo! Mas, siempre estoy causando dolores de cabeza, ¡Y lo peor es que no sé como poder controlarlos! Pero... –Se detuvo, levantando la cabeza y enseñando su magullado rostro, que portaba una corrompida sonrisa.– Pero realmente pensé que todo cambiaría, pensé que desde ahora sería diferente ¡Que absolutamente todos los que habían molestado a Yamaguchi Tadashi ya no lo harían! Me sentí bien conmigo mismo, todo por Luna.
Un suspiro y una risa vacía resonaron. Koushi apretó sus puños.
–No, en verdad, lo que me hizo sentirme bien fue que era necesario para alguien, me sentí querido, ¡S-Se sentía genial tener a alguien de quien depender! Pero... estuvo mal, ¿No? Esa chica... Y-Yo sólo la utilice, ¿No? –Susurró, rompiendo a llorar cubriendo con sus dañadas manos su cara en iguales condiciones.– ¡No fue mi intención! ¡Yo no quise usar sus sentimientos de esa forma, pero lo terminé haciendo! ¡Utilice la excusa de su enamoramiento para poder zafarme de las palizas y de los abusones, Suga-San!
–Tadashi, tú no―...
–¡Yo sí, Suga-San! Eso hice, ¡E-Ellos tienen razón! Soy una basura, me creí solo por sentirme protegido, aun si fue de forma inconsciente...
–¡No hables así de ti mismo! ¡Ellos no saben nada acerca de ti, no deberías siquiera considerar lo que esos imbéciles te dijeron!
-¡Pero tiene razón! ¡Me gustan los hombres, no las mujeres, Suga-San! Y... Y aún así yo no la detuve, le seguí el juego porque mi pecho se inflaba al tener, por primera vez, un afecto más allá de lo maternal o fraternal que tú y mi madre me entregaban... Supongo que me merecía esta paliza, d-de alguna u otra forma, me ayudo a abrir los ojos, –Rió en un acto de pleno nerviosismo.– ¡Que ingenuo! ¡Mira que confiarme demasiado de alguien! Soy tan patético, es una lastima haberlo notado a estas alturas, por mi culpa esa chica lo pasará mal, a causa de mi cobardía ella terminará pagando los platos rotos...
– ¡Eso no es cierto, Tadashi! –Habló al fin el mayor, mordiendo su lengua en un intento de no saltar a contar todo y revelar, de una vez por todas, lo que esa 'chica' tenía entre las piernas.
Soltó un suspiro, y secó con sumo cuidado las lagrimas de su adverso, mientras con su pulgar acariciaba sus partidos labios, sellándolos.
– Ya te he escuchado a ti, es momento en que me oigas a mí. Tadashi, yo... ¡Yo ya no lo soporto! –Gritó, sobresaltando al menor.– Escucha, Tadashi, voy a hacerte unas preguntas, por lo que te pediré que seas honesto conmigo –Otro suspiro, un tanto más pesado, escapo de la boca de Koushi, él lo iba a matar, lo sabía, pero necesitaba hacer algo.– ¿Alguna vez has pensado en que, bueno, tal vez podrías intentar salir con esa chica?
– ¿Eh?
–Espero tu respuesta.
–A-Ah... Yo... Bueno, en un principio llegué a considerar la idea pero... Poco a poco comencé a descartar aquella opción–Expresó.– Digo, Suga-San, eso no funcionaría porque no podría corresponderle, el cuerpo femenino no me llama la atención... No podría corresponderle y hacerle todavía más daño –Murmuró sorbiendo su nariz.– ¿A que va todo esto?
– No desesperes, sólo escucha –Pidió con una sonrisa que pretendía ocultar sus nervios, siquiera él mismo sabía a que quería llegar con todo esto, pero de lo que estaba seguro era que no podía arruinarlo.– Bien, ahora, d-dependiendo de tu respuesta yo... Yo te diré algo, ¡Pero no debes de alterarte o algo por el estilo!
– S-Suga-San, me estas asustando.
– No temas, sólo responde a esto ¿Esas notas que ella te envía se han vuelto importantes para ti? , ¿Te pondrías mal si ella dejara de enviarlas?, ¡No me argumentes! –Se apresuró a decir, cuando el de pecas si ápice de abrir sus labios.– Sólo limitate a rresponder con un 'sí' o un 'no'
Un silencio algo incomodo se hizo presente, siendo sólo audible el palpitar de el chico de tercero, quien moría por la respuesta ajena.
–Y-Yo...
–"Vamos, Tadashi, no te tomes tanto tiempo" –Pensaba al borde un paro cardíaco.
–Yo... ¡Por supuesto que sí! –Declaró volviendo a romper en llanto.– Mas que de Luna... Y-Yo me enamoré de sus notas, ¡S-Sé que es raro, pero así es como me siento!
–...
–¿S-Suga-San?
–Tadashi... ¿Que pasaría si yo te dijiera que 'Luna' no es exactamente una chica?
º~º
Bien, la historia se cancela, bai, ese fue el final, l@s amo ❤
-Fermi
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¡Hey, Pecoso!
Novela JuvenilExisten distintos medios de comunicaciones a día de hoy para poder charlar con distintas personas sin siquiera conocerla en persona; Entre los más destacados están las redes sociales tales como WhatsApp, Facebook, Messenger, etc. No obstante el caso...