Mihane, Usai (Chanbaek)

40. Últimos pensamientos

40. Últimos pensamientos

La última caja de las cosas de Baekhyun fue dejada al lado de la puerta. Los dos hombres estaban sudando, a pesar de que habían contratado la ayuda de gente para cargar, no era una tarea fácil.

Y ahora tenían que desempacar todo, ellos solos.

-¿Cuánto dinero gastas en ropa mensualmente?- quiere saber Chanyeol mientras las piezas de tela siguen saliendo interminablemente de, literalmente, todas partes.

-¿Qué clase de pregunta es esa?- se queja Baekhyun.- Uso ropa todos los días, Chanyeol, no puedo tener un par de camisas para toda la semana.

-¡Nada de esto has usado en el hospital!- nota el más alto y Baekhyun rueda los ojos.

-¡No puedo utilizar este tipo de ropa en el hospital!

Chanyeol abre los ojos al ver lo reveladores que resultan esos pantalones realmente y piensa que tiene razón. Además, si lo hiciera, terminarían en algún lado con esos pantalones en cualquier parte menos en su cuerpo.

-¿Y qué es esto?- Chanyeol saca un mediano estuche negro con un cierre en el centro.

-¡Parte de mis cosas!- Baekhyun lo toma y sale corriendo a dejar todo en un gabinete del baño que será de su uso exclusivo.

-¿Baek? ¿Qué me estás escondiendo?- Chanyeol tenía ganas de fastidiarlo y fue detrás de él. Baek cerró la puerta del baño se negó a abrirla.- ¿Qué puede ser tan malo?- preguntó golpeando suavemente la madera.

-¡No es nada malo! El problema es que te vas a burlar de mi.

Chanyeol estuvo como cinco minutos jurando que no iba a reírse e incluso tuvo que prometer que si lo haría, Baekhyun no tendría compasión y lo golpearía. Cuando por fin cedió y la puerta se abrió, Chanyeol no podía con su curiosidad. Baek simplemente le entregó el estuche con las mejillas rojas y cruzó los brazos, avergonzado.

-¿Qué es esto?- el menor rebuscaba entre paquetes de lápices y estuches redondos, cremas extrañas y otras cosas que no parecían servir para nada.

-Maquillaje, Chanyeol

Baek tomó el estuche de nuevo y acomodó las cosas, todavía con rubor en el rostro, pero evidentemente más aliviado ante la mirada extraña y perdida de Chanyeol, totalmente ignorante sobre el tema.

-¿Y por qué tienes maquillaje?

Esa era una pregunta que definitivamente debía ser respondida de una manera práctica. Baekhyun tomó uno de sus delineadores favoritos y se pintó los ojos con cuidado y evidente maestría. Chanyeol lo miraba impresionado por la forma en la que el chico demostraba saber lo que estaba haciendo y, cuando Baek se mostró ante él, con un maquillaje sencillo, pero intenso, realmente no podía abrir más la boca porque se le caería de la cara.

-B... Baek- el nombrado tenía una expresión de satisfacción única en su rostro, a Chanyeol le había gustado, mucho.

-¿Te gusta?- preguntó de todas formas, para confirmar su teoría.

Chanyeol tomó sus hombros y subió sus manos desde ahí, por su cuello y terminó en su rostro. Lentamente, se acercó y presionó sus labios con ganas, pidiendo permiso y moviéndose de la forma más lenta que podía.

-Me encanta ¿cómo es que no te había visto así antes?- Baekhyun sintió las mariposas en el estómago.

-Porque... es vergonzoso.

El hospital iba mejorando con el tiempo. Jonghyun a penas si tenía tiempo para hacer todas las cosas, de forma que tuvo que abandonar todas sus cirugías mientras todo se estabilizaba y eso significaba más trabajo para Baek. Él y Chanyeol habían hecho bien en ir a vivir juntos, ya que de otra forma no tendrían forma de verse. Muchas veces, sólo llegaban a comer y abrazarse antes de caer rendidos por el cansancio y el sueño. y aún así era hermoso. Habían decidido también mantener su oficina juntos, cosa concedida por el flamante director.