Ángel

Capítulo XVI

Llega a la universidad sin ánimos de estar en ella, ignora todos los saludos y lo coqueteos de alguna u otras chicas llega a su casillero lo único que le alegraba que era su ultimo día.

Las vacaciones de invierno empezaban hoy.

-Hola, amigo- Solo siente un leve movimiento pierde el equilibrio cayendo sobre su casillero- ¿Qué pasa?- Pregunta al ver a Jacob tan demacrado.

Lo volteo a ver mostrando una ligera sonrisa desanimada.

-No me digas que ella...- Thomas se imagina lo peor, pasa su mano por su nuca desesperado- Habla chico...

Los sollozos y lágrimas de su amigo de sus ojos le dicen la respuesta.

-Ella ha muerto- Su espalda se desliza al caer al piso, no le importa que lo demás lo vean- se ha ido y no puede hacer nada para evitarlo- Esconde su rostro entre sus piernas y deja sus lagrimas salir.

Thomas solo limita ver a su amigo sin comentar nada más, varios chicos que pasa a su lado mira a esa escena confusos y sorprendidos por lo qué está pasando.

-Largo- Los ahuyenta con la mirada su amigo necesita estar un tiempo a solas, se sienta junto a él lo observa en silencio.

El timbre a sonado indicando que la primera clase a comenzado, pero ellos no se levanta de aquel lugar los pasillos quedan vacios todos los alumnos se han ido a sus aulas, solo quedan ellos dos solos.

-Vete- Le ordena, Thomas negó.

-No te dejare, recuerda: En las buenas y en las malas estaremos juntos.

Más que mejores amigos son hermanos, se conocen desde que tenía 16 años se conocen muy bien eran inseparables un momento como este no lo dejara solo.

-Lo lamento- Fue lo único que puede decir en estos casos- realmente no sé qué decirte amigo.

Jacob alza la cabeza de sus piernas para verlo.

-Me duele mucho su partida, Thomas-Con sus pulgares seca sus mejillas húmedas.

-Entonces, ¿que pasara con él bebé?

-Me quedare con él- Su amigo lo volteo a ver sorprendido, negó.- ¿Por qué esa expresión?

-¡Estás loco!- Exclama, se levantó del suelo, continuo- como se te ocurre.

Río, sabía que su amigo no lo apoyaría con esta decisión, asiente, se levanto del suelo limpia sus pantalones con su la mano camina hasta su aula ignorando a su amigo que grita su nombre llamando.

Mueve bruscamente el hombro al sentir aquella mano, dio la vuelta para mirarlo.

-¿En serio?, En las buenas y en las malas- Más que una pregunta es un reproche.

Baja la mirada es una promesa que no debe romperse, ahora no tiene el valor de verlo.

-Lo lamento, pero me asuste- Escucha la risa de su amigo, alza la mirada confundido- ¿te han dicho estás loco?

Hace una mueca y encoge los hombros.

-Tú eres de eres de esas personas- Sonríen caminan hasta su aula, esperan que el profesor los deje pasar.

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Deja caer una rosa blanca en aquel ataúd sin dejar de sollozar su amigo lo toma del hombro para darle ánimo, ahora los necesita más que nunca sus padres y su hermana se encuentra al otro extremo, sabe que necesita un poco espacio.

Llora sin dejar de ver aquel ataúd bajar poco hasta el fondo de aquel pozo, era imposible localizar a su familia nadie sabía de ¿Dónde venía? O ¿Quién era su familia?, su vida pasada aún era un misterio no por mucho pues Jacob no descansara para localizar a su familia.

He investigar lo que Elizabeth le ocultaba, sin saber que él encontraba una verdad demasiado oscura.