Ángel

Capítulo XIX

Intenta no reírse ante la mirada épica de su amigo.

-No olvidaras, ¿verdad?- Jacob negó, suspira, vuelve hablar- para eso quieres la ayuda de primo, ¿verdad?- Vuelve a sentir, Thomas suspira una vez más- de acuerdo, te ayudare.

Jacob río

-Muchas gracias amigo.

-Pero no te prometo nada-Dice-tu sabes que mi primo es algo...

-Si muy exigente con su trabajo-Lo interrumpe, Thomas asiente, continua- pero realmente necesito saber su vida de ella.

-¿Por qué, Jacob?

Suspira antes de responder.

-Se que ella ocultaba algo, su pasado tiene algo oscuro- dice- además, Ángel me preguntara de ella, cuando sea grande.

Se quedan unos minutos en silencio, la mesera deja sus cafés en la mesa.

-Tengo que encontrar los padres de Elizabeth-Observa la mesera retirarse, vuelve hablar- tengo que informarles que su hija ha muerto-Tomo un poco de su café, continua- debo encontrarlos decirles que tiene un nieto.

-Es raro Jacob, como es posible que una chica de 18 años este sola-Toma la taza de café entre sus dos manos- hay muchas cosas demasiadas extrañas- Dice.

Jacob deja la taza de café en la mesa para poder hablar.

-Por eso necesito investigarla- Saca un pedazo de papel de su chamarra, lo alza- aquí tengo el nombre completo de Elizabeth- Aleja la mano al momento que Thomas intenta tomarlo

-Entonces que estaos esperando.

-Sí, entre más rápido mejor- Alza la mano para llamar a la mesera e ir la comisaria.

En segundos llega la mesera para pedir la cuenta, e irse lo más pronto posible de aquel lugar.

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-¿Cómo que no puedo ver a mi primó?

Thomas pregunta exaltado sus manos están sobre el escritorio molesto, Jacob intenta calmarlo no quiere hacer un escándalo en plena comisaria, algunos oficiales los miran molestos, aquella secretaria comienza a molestarse.

Hace casi 10 minutos que había llegado a la comisaria.

-Ya le dije Joven- La voz de la secretaria se escuchaba fastidiada y molesta- que el comandante Miller, no los atenderá.

-Y yo le dije, que yo soy su primó hijo de su tía Miller.

La secretaria se levanta del escritorio molesta.

-Aunque fuera el hijo del gobernador, no entrara- Esta vez ella alza la voz, Jacob intenta calmar a su amigo- así que le pido por favor, que se retire.

-Necesito ver a mi primó - Le habla del mismo tono.

Jacob le da una tímida sonrisa a la secretaria, toma a su amigo del brazo alejándolo.

-Oye, debes calmarte un poco- Habla en voz baja, evitando que los demás escucharan.

-Pero...

-Así, jamás arreglaremos nada- Dice- permíteme, ahora yo hablare-Thomas asiente camina detrás de él.

Esta vez la secretaria no los mira, solo se concentra en aquella computadora.

-Por favor señorita- Habla Jacob con toda la amabilidad que puede- necesitamos hablar con él comandante Miller...

La escucha maldecir, da unos pasos hacia atrás al ver aquella mirada profunda que le ofrece, la puerta se abre de aquella oficina dejando observa aquel hombre alto, 1.80 para hacer exactos, moreno , un poco de barba , fortachón y musculoso.

Excepción de los ojos, tiene lentes oscuros que evita mirarle los ojos.

-Señor...- Aquella mano la hace callar, vuelve a concentrarse en su trabajo.

Mira unos segundos a aquellos chicos que lo miran nerviosos.

-Por una razón- Comenzó hablar- no me sorprenden que estén aquí.

-Nosotros...

La oración de Jacob queda al aire, al momento que él vuelve a tomar la palabra.

-¡Cómo pueden desafiar la autoridad!- Exclama molesto- cuando se dice que no es no- Los dos chicos bajan la cabeza- no pueden hacer un escándalo en la comisaria-Dice.

Uno segundos de silencio hasta que Thomas se atreve hablar.

-Primó - Alza la mirada verlo- Necesitaos de tú  ayuda por favor.

Aquel señor los observa sin decir ninguna palabra, ahora el ambiente se siente tenso para los dos chicos.