No te amo

552 19 2
                                    

>No te amo<

 El sonido de su voz viajó por cada rincón de la ridículamente vacía habitación, rebotó innumerables veces en mi mente y cayó en picada como un cuchillo, hiriendo mi corazón. Detuve el camino de besos que iba dejando en su espalda y con un suspiro murmuré en su oído.

>Lo sé<

 Claro que lo sabía, pero aún así había sido imposible detener el sentimiento de esperanza que fluía por mis venas con eléctrica excitación cada vez que me llamaba. Él me necesitaba, o al menos eso es lo que yo había creído estúpidamente todo este tiempo. 

>Creo que deberíamos dejar de vernos<

 Se dio la vuelta y me miró a los ojos con expresión grave, triste. ¿Qué era eso? ¿Lástima? 

>Voy a casarme<

  Así que de eso se trataba. El picaflores de Alix Wright por fin había sentado cabeza, y ahora dejaba caer la bomba sobre mí, con la misma lástima con la que alguien abandona a un cachorro en la carretera. ¿Eso había sido yo para él? ¿Una mascota? ¿Un juguete?

>¿Y quién es la afortunada?<

 Volví a darle la vuelta dispuesto a seguir con lo qué hacía, este penoso cachorro no sería tan difícil de olvidar. Él aunque un poco tenso no se alejó de mi abrazo ni negó mis besos.

>Es hija un socio de mi padre, es muy bonita y muy amable<

>Parece la chica perfecta, es una lástima que tú no estés interesado en chicas<

 Mordí su cuello con tal vez más fuerza de la necesaria haciéndole soltar un alarido de dolor.

>¿Qué haces? Ten más cuidado<

>Lo siento, es que me gusta mucho tu cuello< lamí allí donde el mordisco había dejado una rojiza marca >Y me gusta mucho tu piel< Lo recosté sobre el desgastado colchón y empecé a besar y mordisquear su pecho>Eres tan delicioso que se me hace difícil aceptar que ya no te probaré nunca más.

 Él dejó escapar su aliento en un sonoro gemido, llenándose así la habitación de aire caliente, saboreé el sudor de pecho también cálido y me sentí angustiado al pensar en lo frío que se sentiría estar aquí sin él.

>Creo que deberías detenerte, esto no está bien<

 Ya me has negado tu corazón ¿Me negarás también tu cuerpo? No podía soportar más esto, mi pecho dolía con el sentimiento de mi corazón siendo cruelmente pisoteado una y otra vez.

>Ya lo hemos hecho tantas veces, una vez más no hará daño<

 Dirigí mi mano hacia su parte baja empezando a acariciarlo por encima de su ropa interior, él tomó mi mano deteniéndome. 

>Estoy tratando de cambiar, no se suponía que esta noche terminaría de esta manera<

 Me apartó de encima quedando sentado en la cama, aún a pesar de la oscuridad de la habitación pude observar su pálida piel, en ese momento comprendí que jamás me cansaría de mirarlo. 

>¿Por eso vas a casarte?<

>En parte sí<

>¿Cuál es el problema de vivir de esta manera?<

> Tú, ya sabes, esto está mal... entre dos hombres está mal<

>Sigues repitiendo eso ahora, pero no decías eso hace unas semanas, lo único que decías era lo mucho que te gustaba<

>Sabes a lo que me refiero<

>Lo único que entiendo es que a tu papito no le gusta que su hijo este en la cama de otro hombre y tú como siempre haces lo que sea para complacerlo<

>¿Y qué tiene de malo? Él es mi padre y lo estimo mucho, en cambio contigo... no hay nada que nos una<

>Claro que sí<

 Volví a apresarlo entre la cama y mi pecho sujetando sus manos sobre su cabeza.

> Nos une el deseo, soy la única persona en el mundo que puede satisfacerte<

Con mi mano libre bajé bruscamente sus boxers y comencé a frotar su miembro con mi mano, sacando de sus labios un precioso gemido el cual era música para mis oídos.

 >Esa chiquilla jamás podrá hacer lo que yo puedo hacer, jamás te hará sentir de esta forma<

Aceleré mis movimientos, subiendo y bajando, subiendo y bajando, el liquido que salía de la punta de su miembro lo hacía más resbaloso produciendo un sonido obsceno que solo hizo que mi excitación aumentara.

>Ah, pa-para ya<

  El gemido que soltó luego me convenció de que ninguna manera debía parar, así que solo continué aceleradamente haciéndolo correrse en mi mano, lo miré mientras me quitaba los pantalones revelando mi propia erección, sus ojos vidriosos me observaban con aquella expresión lasciva que yo tenía grabada en el alma, tan adorable, tan excitante. Sumergiéndome en él de una estocada susurré en su oído: 

>Ella jamás te hará gemir como lo harás esta noche< 

 Mientras me movía en su interior intenté traspasar mis sentimientos hacia él, hacerle entender que yo lo amaba y que si él se lo permitía podría amarme también, lo abracé fuertemente tratando de decirle que el único sitio en el que él puede estar cómodo son mis brazos, lo besé profundamente para demostrarle que el lugar de sus labios son mis labios. Esa noche dejé mi corazón en su cuerpo. 

 Y en la mañana descubrí con pena que mi corazón había sido devuelto cuando el brillo del sol abrió mis ojos y vi que él ya no estaba a mi lado.

One Shots (yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora