HopeV MASOQUISTA

Capítulo 4 En el infierno

Taehyung POV

Abrí mis hinchados ojos con molestia, mi alarma resonaba en mi habitación, la apagué me duché con excesiva lentitud y me puse el uniforme del colegio, había tenido sueños difusos y ridículos...pero me ayudaron a darme cuenta de lo estúpido que estaba siendo en lo referente al tema Hoseok...si porque era un tema a tratarse con delicadeza...ayer me había utilizado y se había burlado de mí...pero no volvería a suceder.

Ese tipo tenía un corazón de hielo, le fascinaba la idea de verme sangrar hasta no poder respirar...le gustaba humillarme es más lo disfrutaba de una horrible manera, adoraba cuando mi cuerpo temblaba de miedo por lo que podía hacerme y lo más estúpido de todo era que todo era mi culpa...enteramente mía...porque nadie se mete donde no lo dejan entrar...era yo quien le había dado la oportunidad de herirme de es amanera...tropezaba conmigo constantemente engañándome con la idea de que él podría fijarse en mí...de que él podría tal vez enamorarse de mí ¡pero era mentira!...Hoseok no sentía amor por nadie salvo él mismo...estoy seguro que incluso la chica que trajo anoche no es más que su muñeca inflable...casi hasta sentía pena por la perra esa.

Salí de mi casa y caminé hacia la cocina de la mansión con una nueva meta...olvidarme de Jung Hoseok, adentro me encontré con Jin hyung preparando el desayuno, lo saludé y puse la mesa, Jungkook estaba terminando de alistarse según hyung.

- Iré a despertarlos –anuncié sintiendo el corazón oprimido...sabía lo que encontraría al abrir esa puerta y la idea me dolía y me hacía sentir cansado...pero era lo mejor...era una de las maneras en las que mi corazón se convencería de que olvidarlo era lo mejor.

- De acuerdo...Tae –llamó hyung.

- ¿Mhhh? –me detuve en la puerta de la cocina para voltear a verlo.

- Hoseok es un idiota...solo...no dejes que esto te afecte –dijo mirándome comprensivo.

- Tranquilo...no pasa nada –mentí.

Subí las escaleras lentamente pensando en lo que tenía que hacer hoy, no había ropa para lavar...nada que ordenar salvo las habitaciones...la limpieza general de la casa...y nada más...eso era todo así que tendría un día bastante relajado.

- Joven Jung –golpeé la puerta suavemente y la abrí entrando a su cuarto, ambos dormía placenteramente, las sábanas apenas cubrían su desnudez, sus piernas entrelazadas, mordí mi labio intentando controlar los sentimientos de decepción, dolor e ira que me invadían lentamente –Joven Jung –repetí en voz alta y firme –es hora de despertar.

- Mmm...buen día nena –dijo él sonriendo y acariciando la espalda de la muchacha.

- ¿La señorita Kim desea algo? –pregunté desviando la mirada cuando ella se sentó revelando sus pechos desnudos.

- Oh...un baño de rosas estaría genial –dijo sonriendo.

- Enseguida –respondí haciendo una reverencia –joven Jung ¿desea que planche su camisa?

- ¿Eh? –preguntó Hoseok mirándome con el ceño fruncido.

- Ayer usted dijo que hoy yo debía...

- Ah sí...no...solo vete de aquí –ordenó.

Salí de su habitación con el corazón reducido a polvo, respiré profundamente antes de tocar la puerta de Jimin, al igual que el día anterior él despertó rápidamente y se levantó sonriéndome de manera amable.

- Joven Min –metí la cabeza –joven Min...es hora de...

- Por la puta –se quejó rodando en la cama –no te atrevas a ponerme una mano encima Kim.