HopeV MASOQUISTA

Capítulo 8 Un sueño

Taehyung POV

Al llegar a casa me despojé de toda mi ropa y repasé frente a mi espejo mi cuerpo desnudo...Hoseok había tocado lo que había querido esta noche...otra vez, no podía evitar sentirme asqueado conmigo mismo...pero aun así sabía que si él venía en este preciso momento me rendiría a sus pies, odié mi reflejo en el espejo...el Taehyung débil y sin amor propio me devolvía la mirada de manera patética, me odié a mí mismo más que nunca y terminé descargando mi irá contra la pared de mi cuarto reventando mis nudillos.

- Eres un idiota patético Kim Taehyung –dije dejándome caer sobre mi cama, mis manos dolían terriblemente pero lo agradecía porque entonces no pensaba en el dolor de mi pecho.

Mis ojos se mantuvieron abiertos durante toda la noche, a través de mi ventana vi el sol nacer y me levanté de mi cama entrando a la ducha, me sentía sucio y quería escapar de esa horrible sensación, el olor de Hoseok pegado a mi piel me había acompañado durante toda la noche recordándome a cada segundo lo poco que yo valía para mí mismo ¿por qué no podía simplemente decirle que no?, mis manos heridas ardieron ante el contacto con el agua pero me gustó...preferí concentrarme en esa sensación que en otra cosa que rondaba mi cabeza, una vez que estuve listo me dirigí a mi cuarto y me vestí rápidamente utilizando mangas demasiado largas para ocultar mi manos lastimadas...hoy era domingo y era mi día libre y lo pasaría con mi novio.

Caminé a la mansión y entré a la cocina para encontrarla casi vacía...casi. Mi respiración se detuvo y mi corazón comenzó a latir demasiado rápido, mi cuerpo entero temblaba y mi cerebro se negaba a funcionar correctamente.

- Buen día Tae –saludó con una voz ronca que erizó toda mi maldita piel que ya ardía en desesperación con tan solo tenerlo en la misma habitación.

- Bu-buenos días joven Jung –saludé con una reverencia que exageré para esconder mis sonrosadas mejillas...se veía tan jodidamente bien, su jean azul apreto y roto por las rodillas permitían ver a la perfección sus delicioso muslos formados con años de danza...porque sí Jung Hoseok tenía como pasatiempo aparte de joderme la existencia...bailar y vaya que bailaba bien...su polera algo holgada de color negra daban una ligera pero efectiva vista de sus clavículas que hicieron que mordiera mis labios para no soltar un vergonzoso gemido, sus ojos color chocolate me miraban resplandecientes, su cabello negro algo desordenado y esa maldita sonrisa que te derretía en un instante...por favor santa comadreja de la navidad pasada que alguien venga a ayudarme antes de que cometa una locura.

- Te ves fantástico –comentó con coquetería y yo desvié la mirada no pudiendo soportar la lujuria que emanaba de sus ojos.

- Us...usted también se ve bien –dije intentando lucir desinteresado pero por Dios si tan solo mi cuerpo no estuviera temblando así -¿desea que le haga el desayuno?

- Ya tengo mi desayuno gracias –respondió haciendo que girara para verlo confundido ¿él se había servido el desayuno? Esto era algo digno de quedar escrito en los anales de la historia

- Usted...

Mi oración fue cortada cuando sus labios se estrellaron de manera posesiva y ruda contra mis los míos, en menos de un segundo fui estampado contra la pared, sin poder controlarme gemí enroscando mis brazos alrededor de sus hombros mientras él me tomaba posesivamente de la cintura, su lengua penetró en mi boca sin permiso alguno...aunque no es como si lo necesitara en realidad.

Sus dientes atraparon mi labio inferior mordiéndolo con fuerza pero no me quejé eran momentos como este en los que me sentía vivo, sus labios fueron bajando por mi cuello y perdí la cordura por un momento y salté a su cintura enrollando las piernas alrededor de su cintura, su manos automáticamente viajaron a mi trasero y lo apretaron con fuerza haciéndome gemir de placer, adoraba la manera tan posesiva y ruda en la que me trataba, nuestros labios hinchados y enrojecidos de besarnos sin tregua alguna seguían comiéndose uno al otro.