¿Yo? hermana de un Dorado.

Amazonas y Estrellas 2/2

Los Soles de la Tarde llevaban a las Estrellas a una zona alejada de los calabozos y cada vez que se acercaban mas al lugar, se escuchaban gritos como de alguien  enfrentándose a algo sumamente peligroso.

Cuando al fin llegaron, fueron lanzadas en distintas celdas que daban a una especie de coliseo, en donde se veían las gradas llenas de Soles viendo a unos guerreros combatir con unos leones que eran dos veces mas grandes de lo normal (como Goldie, el león de Káiser en ND), esas fieras atacaban a los guerreros sin piedad alguna. Cuando el último de ellos callo al suelo muerto, para luego ser devorado por los leones, quienes después de comer volvieron a sus jaulas, solo para ser remplazados por otros que se encontraban descansados.

Una vez que eso ocurrió las celdas en las que se encontraban las Estrella se abrieron y las obligaron a salir a todas al centro del campo de batallas, para que se enfrentaran a las enormes bestias sedientas por comer algo.

Las risas y gritos por parte de los Soles en la gradas no se hicieron esperar, varios eran comentarios lujuriosos sobre las guerreras en la arena de combate, ante eso Akire les enseño el dedo de al medio.

-¡ Metanselo por donde les caiga!- grito furiosa la Estrella de Antares.

- ¡Sean bienvenidos a los juegos del hambre! ... A no, eso no era... ¡A los juegos de la sangre! - se oía la voz de uno de los Soles que hacia de locutor- hoy mis amigos , les presentamos los esfuerzos por sobrevivir de ...¡ Las Estrellas de la Diosa Nix!

Mas gritos y aplausos se hicieron escuchar, haciendo que las jóvenes en la arena apretaron los puños conteniendo las ganas de lanzarse y moler a golpes a cualquier Sol que encontraran en su camino.

-Además hoy contaremos con la presencia de nuestro Dios y la Diosa de la Noche y Madre de los Dioses del Caos, Nix.

Las cinco jóvenes en la arena se sorprendieron ante esas palabras del locutor, era imposible que su Diosa se encontrara ahí, solo para verlas pelear contra esos enormes leones. Miraron hacia un balcón en el cual apareció la figura de un pelinegro y atrás de él acompañada de el Sol de la Media Noche  la supuesta Diosa.

- Esa es Milán- dijo Aria en un susurro para que solo sus compañeras de armas la oyeran- se hizo pasar por la Diosa. Hay que vencer a esas cosas, para poder salir de aquí.

-¡ Que comiencen los juegos del hambre!... Me lleva la que me trajo
... ¡los juegos de la sangre!

Tras eso, los leones fueron liberados de sus celdas, siendo en total 10 leones, dos por cada una, algo que resultaría difícil de sobrellevar. Las Estrellas se separaron seria peor si las acorralaban a todas en un mismo lugar.

Dos perseguían a Lour, quien lo guiaba hacia una pared, cuando estaban a punto de llegar ella cambio la dirección y ambos leones terminaron chocando contra la pared, mientras las bestias se levantaban del suelo, Lour elevaba su cosmos  para invocar uno de sus ataques.

- No seré su comida gatos sobrealimentados - Yolanda era rodeada por dos leones que daban vueltas a su alrededor gruñendo y mostrando sus colmillos, para intimidar a la guerrera, pero eso le daba lo mismo a la chica, no era la primera vez que se enfrentaba a una situación así. Una patada con mucha fuerza le dio al primer león en la cara, que trato de atacarla- si eres valiente acercate gatito.

Aria apuntaba con su arco a uno de los leones que la perseguía, cuando el enorme animal abrió sus fauces, ella disparo la flecha dándole justo en el interior de la boca y por ende el enorme animal dio un ultimo gemido de dolor para luego caer muerto, volvió a cargar su arco con otra flecha, para realizar lo mismo con el otro animal, pero este no seria tan sencillo de vencer.

Para su suerte Akire era seguida por un solo animal, ya que el otro que debería haberla seguido a ella, comenzó a perseguir a Adaviz. La pelinegra dio un salto y una vuelta en el aire para caer sentada en el lomo del enorme animal, para luego hacer aparecer su aguja y con ella comenzar a atacar al león desde arriba, con cada aguja la bestia disminuía la velocidad hasta que al fin, callo como un saco de papas al suelo, Akire se bajo de su lomo para ir a ayudar a la Estrella de Hamal, que se encontraba rodeada por tres leones.

Adaviz pensaba como demonios iba a salir de ahí, por que si lo encontraba alguna manera pronto, terminaría siendo comida para leones, y si eso sucedía, ya no podría volver a ver a Shura ni a sus tres demonios nunca mas. Llego a imaginar la ultima vez que beso los labios de esa Caballero Dorado que le había robado el corazón, y que solo con ella dejaba caer esa careta de frialdad... Frialdad que se iba a la punta del cerro, si se trataba de estar los dos a solas. Con esos pensamientos se lanzo a la batalla, atacando a los leones con suma facilidad, como si no fueran tres veces mas grandes que ella, el primero había caído, ahora iba por el segundo, fue pan comido, cuando iba a atacar al tercero se dio cuenta de que Akire ya había acabado con él.

- Gracias.

Una sola exclamación de asombro se escucho en todo el coliseo al momento en el que el ultimo león callo muerto a manos de Yolanda, que como símbolo de su victoria arrancó una de la garras del león, para luego guardarlo.

- Esto le encantará a Ilias.

En el balcón donde se encontraban los "dos" Dioses, Helios miraba a la supuesta Nix con una sonrisa maliciosa en sus labios, para luego tomar una de sus manos y besarlas.

- Tus guerreras son perfectas para mi harem.

- Eres un maldito asqueroso.

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Hola

¿Como están?  Yo aquí flojiando en la casita xd.

Bueno, bueno el capitulo se me ocurrió de la nada, ni siquiera había pensado que escribir para este cap. Espero que no se haya notado mucho y que les haya gustado.

Chaito

ScorpioNoMilo ✌