Fall in love once again // End

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Semana doscientos sesenta / Semana tres

"¿De verdad hay un bebé en tu barriga?"

Julian palmeó el estómago de Charles, sus ojos grises estaban bien abiertos y curiosos. Charles miró a Erik, quien estaba muy ocupado doblando ropa como para escucharlos. Le dejaba esta explicación. Por supuesto. Erik siempre le deja la tarea difícil.

"Algo así," dijo Charles. Julian era muy jóven para la explicación real. "Mis poderes especiales me dan la habilidad de tener bebés, como hacen las mujeres." Oh, Charles nunca se cansaba de decirle a la gente qué tan parecido era él a una chica. "Vas a tener un hermano o hermana."

"Julian, ven aquí," dijo Erik. En sus manos llevaba un par de botas para nieve pequeñas. Julian y él habían decidido que saldrían con el trineo esa tarde, mientras Charles escribía un discurso para una conferencia próxima. Pero Julian estaba muy interesado en el asunto del bebé como para pensar en eso.

"¿Cuál?"

"Todavía no lo sé," dijo Charles. "Papi te pidió que fueras con él," le recordó. El mote de 'Vater' no se quedó en su vocabulario. Desde el momento en que aprendió a hablar, Erik fue 'Pa', después 'papá' y terminó en 'papi'. Charles se quedó atascado con el formal 'padre'. Pero eso no evitaba que amara escuchar a Julian llamarlo así.

"¿Pero, cómo va a salir el bebé?" Julian siguió preguntando.

Por suerte, Erik se hizo cargo. Sin molestarse siquiera en hacer el usual movimiento con las manos, levantó al niño en el aire por medio del metal que había en su ropa y lo hizo flotar hasta el otro lado de la habitación.

Julian se olvidó del bebé instantáneamente. Él amaba cuando Erik usaba su mutación en él. Era una de las razones por las que Julian vestía tanto metal. Otra era que Erik quería una forma rápida de poder encontrarlo en cualquier momento. Erik conocía la forma y cómo se sentía cada pieza de metal que alguna vez estuvo en contacto con su hijo. Charles no podía culparlo, él usaba su propio poder para mantener vigilado al niño durante todo el día.

"Debes obedecerme cuando te pido algo, liebling." Le reprendió suavemente Erik.

"Perdón, papi," dijo Julian, sonando genuinamente arrepentido.

Todos se habían preguntado si Julian se parecería más a Erik o a Charles en cuanto a personalidad. Cuando descubrieron que se las habían arreglado para crear al niño más amable y dulce de todos, se dieron cuenta que no se parecía a ninguno de los dos. Charles se preguntó si eso querría decir que su ADN era diferente también. Pero nunca lo mencionó. Los jovenes mutantes mostraban indicios de su mutación a los tres años. Pero Erik no lo mostró hasta que fue mucho mayor.

Una vez le preguntó a Erik qué haría si Julian resultaba ser cien por ciento humano. La pregunta le consiguió una noche durmiendo en el sillón de su oficina. Jamás volvieron a hablar del asunto.

Erik mantuvo a Julian flotando mientras le ponía sus botas de nieve. "¿Estás seguro de que no quieres venir?" le preguntó a Charles.

"Sí quiero, pero tengo que terminar esto. ¿Por qué no le preguntan a Raven y a Hank?"

"Al tío Hank no le gusta la nieve en su pelaje," dijo Julian con aire confidencial.

"Puedo imaginarme que--"

"¡Owch! Jo-... ohw," Erik se corrigió a sí mismo en el último momento. Julian se deslizó una pulgada hacia abajo antes de que Erik lo bajara gentilmente hasta que ambos de sus pies tocaron el suelo. 

"¿Qué pasó?" le preguntó.

"El estúpido seguro de la bota," gruñó Erik. "Perforó mi maldito dedo."

"Ah, finalmente te traicionan tus amigos de metal," dijo Charles, sacudiendo la cabeza con algo de tristeza por perderse la excursión.

"¿Estás sangrando?" preguntó Julian antes de que Erik fuera capaz de responder algo.

"Sólo un poco. No está tan mal." De molesto a tranquilizador en una respiración. Nada hacía que Erik no pusiera los sentimientos de Julian por encima de todo. "Estará bien."

"¡Pero estás sangrando!" Julian tomó a Erik por la muñeca y revisó la herida. Cubrió todo el dedo con su mano. "Lo siento, papi."

"No es tu culpa, hijo," dijo Erik. Una sombra de confusión llenó sus facciones, pero se fue en cuanto Charles la registró. "¿Por qué no vas a encontrar a tus tíos? Nos preocuparemos de su pelaje más tarde, ¿okay?"

"¡Okay!" Julian abrazó a Erik y corrió a abrazar a Charles, después salió de la habitación emocionado por cumplir su misión. Charles miró a Erik. Obviamente algo pasó.

"¿Qué es?"

"¿Recuerdas cuando me preguntaste qué haría si Julian no fuera un mutante?"

"De hecho estaba pensando justo en eso. ¿Por qué?"

Erik levantó su dedo, ahora sin marca. No sangre, no piel abierta, ni una pistsa de la lesión. La confusión llegó ahora a Charles.

"Pues debes saber que lo amo exactamente de la misma forma en que lo hacía antes de saber que tiene una mutación sanadora."

Había momentos en su vida en que Charles miraba a Erik y veía algo que hacía que su aliento se atorara en sus pulmones. Otra capa de dulzura o un nuevo nivel de feroz lealtad. A veces, un simple gesto. Su almohada recién esponjada o una servilleta perfectamente doblada en su desayuno. Otras veces, Charles veía grandes muestras de su amor por él.

Un ideal sacrificado por llegar a un compromiso o una noche dedicada únicamente a volverlo lentamente loco de placer. Hubo cientos de estos momentos dispersos a lo largo de los últimos cinco años y durante todos y cada uno de ellos, Charles miraría a este hombre, con quien comparte su vida, y se enamoraba de él una vez más.

Este momento, hasta ahora, era su favorito.

"Te amo tanto." Susurró Charles.

Erik se acercó y pasó una mano por su cabello.

"Lo sé. Pude escucharte."


**

Se acabó :(
Amé demasiado esto y odio que haya terminado.
Vota si también quieres que la autora haga segunda parte <\3

Muchas gracias por leer♡♡

A Logical Progression   //  CherikDonde viven las historias. Descúbrelo ahora