Vomitando mariposas [yuri]

Capitulo 4

Todo mi cuerpo se congelo, su mirada era fija y confiada, «¿¡Que le pasa a ella?! No puede hacerme esto... ¡No, no, no!»

-Soy Louise - dijo extendiendo su mano hacia mi

-ah.. sí.. yo.. sí.. amn.. Carry, soy Carry- respondí apretando su mano suavemente -e-es un placer - mentí, sentía mucho rencor, aunque... «Por qué la odio? ella sólo a estado con su novio, no es mi problema ... ». Sólo bastó eso para deprimirme por completo, la única desubicada era yo, celando a alguien que no conocía sí no hasta este preciso momento, ni siquiera tenía agallas suficientes para sonreír, seguro lucía como una auténtica estúpida niña gay, «lo gay se ve en la cara?...», sí... seguro ella ya lo noto.

-Me gusta tú corte - Dijo dejando de sonreír y acomodandose en el asiento.

«Jaja! quién lo diría?! ha sido el corte!», no cualquier corte, sí no, uno que realize en medio de un injustificable despecho alcoholisado, «a lo mejor puedo ser estilista de mujeres con problemas amorosos... ¡Dios que idea!» sí montara una peluquería dedicada sólo al tratado de mujeres furiosas seguro me vuelvo más rica que un condenado papa!, «espera... que boludes estoy pensando?».

-ah.. eh.. gracias... - dije al fin

-sabes, te queda mejor que todo largo

- ah sí... eh?.. - dije confundida «largo?! que quiere decir con eso?! como sabe como lucía con cabello largo?! será.. posible ..» pensé entusiasmada «no, no, paremos el caballo, viajamos en el mismo tren desde que me mude hace dos meses, es natural que alguna vez me haya visto ¿cierto?... aunque..» por que? tomarse la molestia de venir y decírmelo como si fuera algo natural.

-gracias - dije al fin

-ehm... yo.. sabes..- decía ella algo nerviosa.

«Oh Dios, la cague, seguro se quejara de que siempre la estoy observando, debe creer que soy un trasvesti alienigena que quiere violarla y luego vender sus órganos en el mercado de pulgas», ya lo veía venir, no podía soportarlo, no quería escucharla.

Al fin llegó mi parada, aproveché el momento para huir y jamás volver a tomar el tren en mi vida, agarré mis cosas mientras me levantaba del asiento.

-ehm, disculpa, debo irme, está es mi parada - me excusé

-ah.. entiendo - dijo ella

-sí, ehm, adiós

-Carry...

-ah?.. - dije sorprendida, era muy confianzuda.

se levantó lentamente y se acerco a mi hasta el punto en que nuestras narices se tocaron

-pero que..- me besó, un carnaval compuesto por confusión y exitación se formó dentro de mi, podía sentir mi corazón latir tan fuerte que casi parecía que se golpeara contra mi pecho.

Luego me soltó y me miro fijamente, sus ojos me sonrieron y luego me empujó fuera del tren, caí en una columna aún frente a ella pero a una distancia mayor, y las puertas se cerraron.

Estaba petrificada, viendo como el tren se hiba y, seguramente, con mi cara del color de un tomate, aún sentía mi corazón latir como sí tuviera un ataque.

«la amo...»