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Íbamos en la carretera rumbo a la casa, Mario no me dio la oportunidad de despedirme, pero tuve tiempo de escribirle una carta, espero que la lea ella fue la que me ayudo a soportar a Mario, lo que me alegraba de regreso a casa era que Mario iba a estar trabajando todo el día así que no lo vería diario como "nuestra luna de miel" que fue un fracaso y tortura.

Durante el transcurso de todo el viaje no nos dirijimos ni una sola palabra.

Entre a la casa para darme un baño, entro al baño duro una hora y media en el ya que de seguro Mario estaría ahí y la verdad no lo quiero ver nunca, salgo del baño porque se me puso las yemas de los dedos arrugados, me visto y voy a la habitacion, esta anocheciendo y me preparo para ir a dormir, no desayune ni comi ni me entraba apetito en realidad todo me daba asco, fui al baño a lavarme los dientes para dormirme pero no pude evitar vomitar por el olor de la y sabor de la pasta dental, le baje al baño para que se fuera todo lo que vomite, me recargo en la pared y me vuelve a dar asco y vomito.

Salgo del baño con dolor de cabeza y para mi mala suerte Mario estaba en la habitacion con la pijama puesta, lo ignoro y me siento en el otro lado de la cama, paso unos minutos sentada y cuando estoy apunto de acostarme me vuelven a entrar las ganas de vomitar, corro y vuelvo a desechar otra cosa menos alimentos, estaba preocupada por si tenia alguna enfermedad o algo, me siento débil y me recargo en la pared.

Estas bien —dijo Mario.

Lo miro y me vuelvo a concentrar en mi misma, intente levantarme pero me sentía muy mal que me caí al momento de tratar de levantarme.

Sam te encuentras bien —dijo Mario acercandose a mi y preocupado.

No te me acerques Mario —dije débil.

Mario me ignoro y me cargo en sus brazos.

Bajame Mario —dije muy débil.

Estas muy débil y no puedes caminar —dijo.

Me recosto en la cama y se inco a mi lado.

Desde cuando te has sentido mal —dijo tocandome la frente.

Eso a ti no te interesa —dije.

Mucho, ademas tienes fiebre —dijo.

Solo dejame descansar —dije.

No te puedo dejar así —dijo.

Solo dejame descansar —dije en tono autoritario.

Mario se fue de la habitacion y a los cuantos minutos regreso con un botiquín y agua, me acerco unas pastillas y el agua.

Tomatelo te sentiras mejor —dijo.

No quiero nada que me desde tu —dije.

Tomalo es por tu propio bien —dijo.

Lo acepte y en unos cuantos minutos cai rendida en un sueño profundo.

Despierto y me dirijo al baño a darme una ducha y vestirme.

Salgo del baño y veo a Mario recostado con su traje.

Hoy te llevare a ver a tu familia —dijo sentandose en
La cama.

Queeeeeeee —dije confundida.

Como lo escuchaste —dijo.

No pude emocionarme e irme ante sus brazos.

Gracias, gracias, gracias, gracias —dije abrazandolo con alegría.

Sentí como el me correspondido el abrazo  e inmediatamente me aleje de el.

Lo siento —dije.

No importa me ale... —dijo.

Lo interrumpi.

FORZADA (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora