Capítulo 16

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Mientras cenaban, llegó una carta para lady Bath de parte de la Marquesa de Winchester, la misiva fue leída de inmediato.

— Alexa nos invita a ver la obra en su palco mañana.

— No podré ir querida, hay un caso que es bastante complicado. — Expuso su esposo, pero al ver que su querida Anelis se entristecía, agregó — pero no hay problema en que vayan ustedes.

— ¿Qué te parece Brooke? — Preguntó animada.

— Parece una gran idea. — Sería bueno distraerse.

-o-

Al otro día en la residencia Landsdowne, Tessa estaba en compañía de su hermano.

— Madre quiere que vayas con nosotros al teatro.

— Prefiero ir al dentista.

— Qué lástima — suspiró dramáticamente — Brooke está encantada de ir con nosotros.

— ¿Asistirá? —intentó que su voz no saliera muy emocionada.

— Claro, madre acaba de decirme que serán invitadas, pero como no te interesa...

— Creo que la obra que van a estrenar es bastante interesante.

— Mmh... seguramente — Tessa intentaba ocultar su alegría.

-o-

Al caer la noche, cuando se presentaron para el estreno de la obra, Brooke no esperaba encontrárselo. Se suponía que no le gustaba el teatro o al menos, es lo que había dicho él mismo.

— Qué agradable sorpresa.

— Milord —no creía que fuera una sorpresa para él.

— Lady Bath, cada vez está más radiante — depositó un beso en su mano.

— Es usted muy amable milord, pero no es necesario su halago —miró a su hija, para ver cómo reaccionaba.

— Sólo admito lo que mis ojos aprecian— contempló significativamente a Brooke cuando besó su mano y la retuvo por más tiempo del debido. Al soltarla, esquivó sus ojos, encontrándose con la sonrisa felina de su amiga. Inmediatamente se acercó a ella.

— ¿Tú sabías que él vendría? —preguntó en un susurro.

— Digamos que mi madre me pidió que insistiera.

— Tessa — elevó la voz.

— Ssht, ya va a empezar la función.

— Te odio.

—Me quieres, admítelo. — La miró con los ojos entrecerrados, provocando la risa de su amiga.

No pudo concentrarse en la obra, sentía que alguien la observaba y sabía perfectamente quién era, por lo que intentó guardar la compostura.

En el intermedio lady Alexa, junto a su madre fueron a saludar a unos conocidos. Charls fue por unos refrigerios para su esposa y Tessa...

— Debo ir al tocador, si me disculpan —Brooke la contempló mientras modulaba un "¿Tessa?", ella sólo sonrió.

— Se ve usted encantadora, señorita Brooke.

— No le he dado permiso para que me llame por mi nombre.

— Me he tomado esa liberta. Sepa usted, que es libre de llamarme por mi nombre cuando guste – se sentó a su lado.

— Nunca lo haré, ¿Qué...?— preguntó al notar que tomaba su mano y la acariciaba — suélteme, las personas pueden murmuran si está tan cerca de mí.

— No lo harían si me permitiera poner este anillo en su mano — le mostró una caja de terciopelo, que en su interior contenía un enorme diamante de color café— ¿sabes cuánto tiempo me llevó encontrar uno que se pareciera a tus ojos? Aun así, no tienen el brillo de tu mirada. — Se arrodilló.

— ¿Qué está haciendo? Levántese— urgió al ver cómo muchas personas miraban hacia ellos.

— Pensé que era obvio. Quiero que seas mi esposa, Brooke.

— No lo puedo creer. — Con lágrimas en los ojos se levantó y salió de allí.

— ¡Brooke! — Corrió tras ella.

El intermedio pronto llegaría a su fin, y muchos de los presentes regresaban a sus asientos.

Al encontrarla, la detuvo.

— ¿Qué ocurre?

— ¿No lo entiendes? No quiero casarme contigo para que después deseches mi corazón como ya lo hiciste.

— Brooke, mi Book — sus manos acariciaron tiernamente su rostro, como si tuviera miedo de perderla para siempre. Se acercó más, y tomando una de sus manos la apoyó en su pecho.

Brooke intentaba apartarse, no quería creer lo que estaba sintiendo

— ¿Lo sientes?, así es cómo reacciona cada vez que te veo y es peor cuando te añoro. Cada día me despierto frustrado al saber que no estás a mi lado y no sé si algún día lo estarás, las estupideces que dije... —en su mirada plateada se veía el arrepentimiento que transmitían sus palabras — me retracto de todas ellas, porque día tras día me he condenado a escuchar milord y señor Jefferson, transformándose en una pesadilla de la cual no puedo despertar—suspiró cansado — pero eso no se compara a imaginarte en los brazos de otro hombre. Junto a ti no me es difícil imaginar el resto de mi vida llena de dicha, aunque algunas veces habrá peleas y me merezca un buen gancho— se rieron ante eso, fue un sonido tembloroso. —Esperare con ansias nuestras reconciliaciones — los ojos de la señorita Henderson brillaron por las lágrimas no derramadas — no quiero hacerte sufrir Brooke, nadie tiene el derecho de hacerte llorar — los párpados de ella se cerraron, liberando esas lágrimas— si soy yo quien te hace sufrir, solamente dilo y me apartaré de tu lado si eso te hace feliz — Brooke lo miró con tristeza, mientras imperceptiblemente se aferraba más al chaleco de él —si no es así, debes saber que... te amo. Anhelo el día en que tus labios vuelvan a llamarme por mi nombre, sin embargo, hay algo más relevante que ese anhelo... ¿Te casarías conmigo? — para Lord Standford fue eterno ver cómo la mujer que amaba derramaba lágrimas, pocas, pero significativas. — Lamento hacerle perder su tiempo. — Musitó con voz apagada, dispuesto a irse, tal como había prometido.

— Steve... —Brooke se aferró fuertemente a su chaleco, deteniéndolo — yo — sus labios fueron rápidamente sellados por los de él. No era necesario decir nada más.

FIN.

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Muchas gracias por llegar hasta el final :D , espero que les haya gustado y tengo curiosidad ¿como conocieron o llegaron a esta historia?

¿Te casarías conmigo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora