Fire Breather.

Dean había crecido en Ohio. Donde el sol toca pero no calienta las calles frías y duras. Su padre se había ido cuando él era solo era un bebé y su madre se había hecho cargo de él desde entonces.

Su madre se iba en las madrugadas, decía que tenía que trabajar sin cansancio día y noche para poder darle a él todo lo que merecía. Su madre siempre dijo que trabaja en algo que hacía feliz a los hombres, y Dean tardó la mitad de su existencia en entender a que se refería con eso.

A pesar de eso, su relación con su madre era fría, casi inexistente. Cuando ella volvía a casa, Dean ya estaba dormido y cuando él se levantaba, ella ya se había ido. Solo se veían fines de semana, y eran los momentos más incómodos de toda su semana cuando eso pasaba.

Todo eso cambió cuando su madre lo despertó un día en la madrugada, y le dijo que estaba embarazada. Meses después, nació su hermanita. Por primera vez en años, Dean no se sentía solo.

Cuando Melanie cumplió cinco años, las cosas empezaron a ponerse feas. Su madre llegaba con moretones en su cuerpo después del trabajo. Dean era un adolescente en ese momento y no había día en el que no le preguntara que pasaba, a lo que ella solo decía que se había caído en algún momento. Para ese momento, Dean ya sabía a lo que se dedicaba su madre.

Todo cambió rústicamente cuando un día, los dos hermanos del colegio. Dean se quedó en la cocina preparando algo de comer mientras Melanie fue al pequeño cuarto que compartía con su madre. Un grito sonó entonces, y Dean casi sintió como su alma se salía de su cuerpo.

Su madre fue asesinada aquella noche. Dean solo tenía 17 años cuando eso había pasado, y su hermana tenía 8 en ese momento. Ante la escena de su madre muerta, Melanie cayó en un trauma increíblemente grande después.

Trastorno por estrés post-traumático le llamaron los médicos. Depresión exhaustiva le llamó él. Un trastorno que hacía que su hermana no emitiera palabra alguna, cosa que no había hecho desde hace dos años.

Después del fatídico día, Dean ha tenido que ponerse los pantalones y ser el padre correcto que su hermana nunca pudo tener. Lleno de deudas, problemas y prejuicios, Dean está sumergido en una depresión y estrés inmenso.

Por lo tanto, cuando uno de los viejos amigos de su madre se presenta en la casa ofreciéndole un trabajo medianamente fácil y de buena paga, Dean acepta.

Al fin y al cabo, su madre tenía razón: Solo tenía que hacer a los hombres felices ¿verdad?

¡hola! mi nombre es Evelyn y apuesto que tenían mucho sin saber de mí en esta cuenta, pero por fin he vuelto <3 espero que disfruten este proyecto, el cual tiene una temática oscura que estoy segura pueden soportar. Eso es todo, un beso.

Amor eterno, Evelyn.