Capítulo 30 || Melones

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— Tengo una idea, qué les parece si tomamos el teléfono de Kim — dijo Freddy
— Freddy, pero que no has visto que esa niña no deja su celular ni para cagar, literal, el otro día estaba en un WC al lado de ella y se podía escuchar las teclas de su celular — dijo Dori
— La idea de Freddy es buena pero Dori tiene razón, esa chica no respira sin su teléfono — dijo Alonso
— ¿Qué les parece si solamente tomamos su celular y modificamos su agenda a algo así?, no le estamos haciendo daño físico ni psicológico pero si está recibiendo su karma — dijo Jos
— Ey, buena idea Jos, me parece excelente pero, debemos de encontrar el momento exacto para quitárselo sin que ella se dé cuenta — dijo Bryan
— ¡Lo tengo! — dije chasqueando los dedos — siempre deja su bolso en los cambiadores cuando está en práctica de fútbol
— ¡Genial!, Dori y tú pueden pasar a los vestidores de chicas y tomar el teléfono de Kim —dijo Jos
—Jos, no es tan sencillo como se escucha, tenemos que ir, cerciorarnos de que no haya nadie y... —fui interrumpida por Dori
—Eres una gallina ___ —me dijo— lo haremos —dijo girándose hacia los chicos
—¡Perfecto!, ____, ¿a qué hora empieza el entrenamiento —preguntó Jos
—Terminando clases
—Bien —dijo Jos— ahora vayamos a clases, nos vemos a la salida en el salón que está a un costado de la cafetería
—Ok, nos vemos —dijo Bryan agitando su mano y despidiéndose

(...)

—Jos, no puedo —dije a Jos atemorizada mientras caminábamos a el lugar de reunión
— ¡Sí puedes!, tú sólo guiarás a Dori hacia el bolso de Kim, tomarán su teléfono y Dori hará el resto —dijo Jos
—Pero aún así, ni de pequeña hacía travesuras —dije caminando a grandes zancadas tratando de alcanzar a Jos quien daba pasos enormes
— ¿En qué consistió tu infancia entonces? —Preguntó divertido
—Aprendí a leer a los 3 y a escribir a los 4 cuando no leía o escribía ayudaba a mi mamá a hacer las labores de la casa
—Entonces eras esclava de tu madre
—No, yo... Yo me ofrecía
Jos soltó una gran carcajada
— ¿No tenías amigos? —Dijo aún atacado de la risa
—No —Jos seguía riendo — ¡Ey!, no es gracioso —golpeé ligeramente su brazo
—Admítelo, sí lo es
La risa de Jos era tan contagiosa que resumbaba en todo el pasillo cual puerta rechinando, por suerte la escuela estaba vacía, si aún hubiese gente por aquí probablemente los maestros nos hubiesen llevado a detención, no pude evitar el reír con él
—Ves, con tu risa admitiste tú sola que estoy en lo cierto, ahora me debes algo —estábamos a punto de entrar al salón
—Tú te gastaste todo mi dinero esta mañana, si no hubieses bebido esas botellas de agua de la cafetería creyendo que eran gratis, aún conservaría un poco de mi dinero —puse mi mano en la perilla de la puerta
—Tenía mucha sed, además, no decía que costaran
—Pero tampoco decía que fuesen gratis —Jos hizo una mueca, yo sólo agité mi cabeza a manera de negación
—Pero no es dinero lo que quiero —iba a girar la perilla pero la voz de Jos me detuvo
— ¿Entonces qué quieres? ¿Uno de los videojuegos de prueba de mi papá?, ¡ya sé que es lo que quieres!, las cartas de colección de Superman
—No, nada de eso —se acercó un poco
— ¿Entonces?
—Un beso
—JA JA, muy gracioso, ni loca —giré la perilla
—Ahora me debes dos
—Sigue soñando —abrí la puerta y entré al lugar

Todos estaban ahí, listos para el "ataque", Dori tecleaba unos comandos en su computadora mientras que Bryan se encontraba sentado a su lado diciéndole cosas sin sentido, Alonso observaba por la ventana a las chicas de fútbol correr mientras que Freddy le hablaba a Alan y este sólo le hacía muecas. Otra persona que también estaba ahí era Harper, lo cual en verdad me sorprendió ya que estaba "enferma", ¡quién lo diría!, esta chica si que merece un Óscar a la mejor actriz del siglo.
—Llegamos —dije al entrar
— ¡Aleluya!, creímos que no llegarían —dijo Dori
—Sí, las chicas ya llevan media hora entrenando, ¿verdad Alonso? —dijo Freddy a Alonso quien estaba más distraído que nada
— ¡Eh!, oh sí sí sí sí sí, llevan media hora entrenando con sus Melones, digo... ¡balones!, sí, quise decir balones —dijo Alonso cuya baba salía a cántaros por su boca
— ¿Ok?, entonces será mejor que actuemos ya, Harper, ya que estás aquí ¿Nos acompañas? —Dije
— ¡Seguro! —Se paró de su silla
—Sí, me parece buena idea, pero antes, hay que quitar a Alonso de esa ventana si no queremos que salga de aquí con tres piernas, si quieren yo lo cubro vigilando que Kim no salga antes de que ustedes regresen —dijo Jos quitando a Alonso de la ventana con un empujón
—No Jos, no te molestes, tú ideaste la mayor parte de este plan, nosotros casi no hemos hecho nada, déjame cuidar a mí —dijo Bryan quitando a Jos de la ventana
—Yo casi no he contribuido, es mi turno de hacer algo —dijo Freddy quitando a Bryan de la ventana
—Freddy ha ayudado demasiado, es mi turno —Alan empujó a Freddy y este posteriormente lo empujó a él
Los chicos comenzaron a empujarse entre sí peleando el lugar para "vigilar a Kim" (ver a las chicas del equipo de fútbol mientras entrenan)
— ¡Ya! —Gritó Harper calmando a los chicos— Es más, me quedo aquí, yo vigilo a la Kimberly, ustedes bola de calientes, ¡siéntense! Y hagan algo más productivo que babear por piernas largas y pechos saltarines
Los chicos sin más pensarlo obedecieron a Harper y tomaron asiento
—Gracias Harper, bien, pues... En marcha —Dijo Dori parándose de su asiento al pararse pude notar que iba toda vestida de negro, como ladrona de típica película norteamericana
—Emm, Doritos... ¿Por qué usas eso? —Dijo Harper extrañada
— ¿Qué?, vamos robar el celular de Kim por un rato ¿no?
—Sí pero no vamos a asaltar el banco nacional —dije
—Ya ni asaltando el banco nacional los ladrones usan eso —dijo Harper
—Perdonen, es que, por lo regular no hago este tipo de cosas —dijo Dori
—Tampoco ____ y ella no viene vestida como "ladrona de película" —dijo Jos y yo comencé a guardar discretamente el pasamontañas que llevaba en mi bolso — ____, ¿qué es eso que guardas en tu bolso?
—Emm... Nada, ¿por qué crees que escondo algo? —Dije sin tratar de parecer nerviosa
—La bolsa ____ —dijo Jos acercándose a mí y extendiendo la mano para que le pasara mi bolso
—Es de mala educación hurgar el bolso de una señorita —dije en mi defensa
—_____
Me miró fijamente a los ojos, no soporto que la gente me mire a los ojos y mucho menos Jos así que terminé entregándole mi bolso. Jos abrió mi bolso e inmediatamente a sus manos saltó el pasamontañas
— ¿En serio ____? —dijo divertido, todos inmediatamente comenzaron a reír
—Ey, nunca he robado nada, ni siquiera el cambio de las tortillas a mi mamá y es lo que he visto en las películas —dije en mi defensa
—Bien bien —dijo Jos tratando de calmar su risa— ya no las juzgaré, vayan a robar pequeñas ladronas de Hollywood

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