La Prima De Valentino Rossi «Marc Marquez»

Capítulo 10

Mi mañana empieza a las 7:00 de la mañana, si, ya se me a acabado la semana de descanso, vuelta a la rutina. Me preparo muy simple para la facultad, bajo a desayunar y están mis padres y mi hermana desayunando, me uno a ellos.

Charlamos mientras desayunamos; cuando nos damos cuenta de la hora recogemos las cosas del desayuno. Me lavo los dientes y preparo la mochila con los libros de las asignaturas que me tocan hoy.

Filippa coje las llaves del coche y nos disponemos a irnos a la facultad. Filippa me deja en mi facultad, la suya esta a escasos metros de la mía. Me despido de ella y me uno a Julia y Olivia las cuales estudian lo mismo que yo.

[...]

Tras un día largo de logaritmos y ecuaciones varias, espero a Filippa en la entrada de la facultad.

Unos diez minutos a después un coche que desconozco se para delante de mi, baja la ventanilla y es mi primo Valentino. Trago saliva.

-Sube, yo te llevo a casa; Filippa ya lo sabe. -Asiento y entro, me siento en el lado del copiloto. -¿Qué tal? -Arranca.

-Bastante cansada. -Suelto una risa nerviosa, no sé como me dirá lo de Marc. El asiente. -¿Que haces en España? -Lo miro.

-Quería hablar contigo, me han sancionado por la patada que le di a Marquez y no puedo correr en Japón. Y he querido venir aquí. -Apoyo esa sanción, pero no se lo digo.
Por el camino nos quedamos en silencio, con una atmósfera muy incómoda. Unos diez minutos después llegamos a mi casa.

-Quería hablar contigo sobre Marc. -Asiento.

-Ya lo sé. -Digo obvia, sé que estoy siendo un poco borde, pero lo que le hizo a Marc en la carrera fue horrible.

-Supongo que el te habrá contado lo que le dije. -Asiento. -Es lo que pienso sinceramente, para mi eres como una hermana y quiero protegerte de gente como Marquez. -Frunzo el ceño y me sale una carcajada.

-¿Gente como Marc? Marc es un encanto. Que seáis rivales en vuestro trabajo no significa que sea mala persona. -El suspira y yo no tengo ganas de hablar con él, me pienso si bajarme del coche pero prefiero escuchar lo que me tiene que decir.

-Me da igual, yo no quiero que estés con él y tu padre tampoco. -Abro los ojos.

-¿Se lo has dicho a mi padre? -Me altero. El alza una ceja.

-Si, si no quieres hacer lo que yo te digo, tu padre sabrá tomar medidas y si aún así quieres estar con él, yo ya no soy tu primo. -Duras palabras, me duele que me diga eso. Es impresionante el odio que le tiene a Marc, no creo que el le haya hecho nada para que se comporte así y hable así de él, seguro que ni lo conoce.

-No me esperaba esto de ti... -Niego mirándole. -Está bien, ya no somos primos, por que voy a estar con Marc te guste o no. Lo siento, Marc me hace feliz y eso debería ser la prioridad para ti, pero veo que te importa una mierda mi felicidad. -Abro la puerta del coche y cierro de un portazo, el solo me mira y yo ni me digno a mirarle.

Entro en casa muy cabreada y mi padre me llama, lo ignoro completamente y me voy a mi cuarto. De la rabia cierro la puerta de mi habitación de un portazo bastante fuerte, me siento en la cama y apoyo mis codos en mis rodillas. Respiro y me intento relajar.

Mi primo y yo siempre hemos sido inseparables y el nunca ha sido así de duro conmigo, no sé como le puede importar mas la persona con la que estoy; que yo, estoy alucinando.

Decido llamar a Marc cuando ya estoy mas relajada.

-Jimena. -Suspiro aliviada por oír su voz. -Siento haberte hablado así el otro día de verdad, estaba nuy cabreado... Lo siento muchí....