Eres mi héroe.

Mi peor día.

Me levante sin ganas de nada, de arreglarme, de ir al instituto, de platicar, literalmente de nada.

Tenía que ir al instituto, hoy era un día donde íbamos a escribir mucho, aparte de que nos tocaban clases nuevas y esas cosas.
Por fin, me levante de mi cama y decidí ir a bañarme, no tarde demasiado, solo lave mi cuerpo, ese día no tocaba lavarme el cabello. Me vestí con unos leggings negros, un suéter de gatito, unos adidas rosas con blanco, y até mi cabello con un chongo alto.
Salí de mi habitación para ir a desayunar, no tardaba para que Alice pasara por mi. Era extraño el ambiente de la casa, mi papá nunca estaba, pero a la vez era genial poder estar en mi casa sin ningún tipo de preocupación. Me preparé algo sencillo, un cereal con leche y fruta, perfecto para este día.

Ding-dong, suena el timbre de mi casa, seguro era Alice. -¿Qué quieres?- le pregunte, obviamente sabía a qué venía, solo que era para molestarla, -Te ves como un zombie- respondió, -Cállate- dije. Subimos a su auto y ella se veía súper linda, traía un maxi- vestido negro con rayas blancas, una chaqueta ya que hoy haría frío, unos converse negros y su cabello con ligeras ondas, no traía maquillaje, pero aún así, no se veía nada mal. En cambio yo, parecía un muerto viviente, unas mega ojeras, que ni un corrector de Mac me lo tapa, mis ojos súper chiquitos, se notaba que no me había arreglado, era un desastre.

Llegamos al instituto, a primera hora me tocaba Matemáticas y a Alice Biología. Nos despedimos y fuimos cada quien a su respectivo salón. Las primeras clases pasaron relativamente rápido, solo me tocó Matemáticas, Física, Computación y Lenguaje.
Llego la hora del descanso, aún no se me olvidaba lo de Cameron, lo quería encontrar y fulminarlo con la mirada. Sin embargo, no lo encontré, se escuchaban rumores de que no había venido, lo cual no me importaba en lo absoluto.
Pasaron las siguientes clases, Química, Ciencias Sociales, otra hora de Física, etcétera, materias que la verdad eran súper aburridas.

Llegue a mi casa, pensando en la tarea que había dejado el profesor de Química, los componentes químicos en nuestro cuerpo. Encontré a mi papá en el sillón, borracho y con una botella de tequila en su mano. -¿Por qué está la casa tan sucia?- dijo, -Porque tú no la limpias-, respondí, -Esa no es mi obligación, es tuya, eres mujer-, me daba tanta rabia, -El que sea mujer no significa que tenga que ser ama de la casa, tengo deberes del instituto, y los necesito terminar ya, así que adiós-, respondí subiendo las escaleras. Sentí como alguien me tomaba del brazo, por lo que tome su muñeca con la suficiente fuerza para que no circulara sangre. Abrió la puerta principal, me echó para fuera y dijo, -No entrarás hasta que reflexiones lo que hiciste-, me daban tanto odio sus palabras. Me coloqué debajo de un árbol, tenía demasiado frío, estaba nevando, lo cual no me sorprendía, pero que me dejaran afuera con solo un suéter de gatito, eso si es maldad.

Vi como un coche se estacionó justo enfrente de mi y se bajó alguien muy atractivo, oh no... era... Cameron... NO PODÍA SER POSIBLE. Vi como se acercaba a mi cada vez más, yo estaba llorando y temblando sin consuelo, creo que tenía fiebre.
-¿Por qué estás aquí, está nevando y te puedes enfermar?- dijo, -Son temas que no te incumben en lo absoluto-, voltee mirándolo a los ojos, la verdad si tenía mucho frío, pero me había hecho pasar el ridículo frente a todos, -Oh, vamos solo quiero ayudar-, sus palabras me daban risa, -Claro, primero me haces pasar un ridículo frente a toda la escuela y luego te quieres disculpar haciéndome un favor, eso no funciona-, sonaba firme, y quería que sonara así, no me mostraría débil ante el, -Pues solo quiero ser buena persona- si claro, buena persona Cameron, -¿Tú también me harás menos por lo de mi papá como todos los otros?-, me daba mucha tristeza decir eso, -No, yo no soy así, y enserio lo de ayer fue...- al momento lo interrumpí, -Si no te vas llamaré a la policía- claro que no la iba a llamar, y no quería que se fuera, era tan lindo, -¿Con qué la llamaras?- oh, cierto, -Con mi celular-, dije, sacando el celular de mi bolsa,-¿Acaso traes batería?- cheque mi celular y... 1%, eso era malo, -Realmente no, me rindo- era demasiado extraño que yo me rindiera, -Sube a mi auto, te puedo llevar al doctor, estás ardiendo-, la verdad, me sentía demasiado mal, -Está bien, pero no te perdonare lo que hiciste, Cameron-. Me ayudó a pararme y de una forma caballerosa, abre la puerta del copiloto para que entrara.

Llegamos al hospital y estábamos en la sala de emergencias, esperando al doctor. -Eres muy linda-, ¿¡Estoy sorda o Cameron Mathew me dijo que estaba linda?!, -Gracias-, respondí, me daban unas ganas de decirle que él también lo estaba pero me tuve que contener, no perdería la cordura.

Llego el doctor, nos dijo que pasáramos y luego me checo completa. -Tienes una terrible fiebre Winter, también tienes una bacteria en el estómago, no dudes que esta semana vomitaras demasiado, tú eliges, te pongo una inyección o medicamentos-, la verdad, las jeringas no me daban miedo, pero sabía que iban a ser en el glúteo, y estaba Cameron ahí, no sabía que hacer, -Una inyección-, escucho a Cameron decir, ¿ahora el estaba eligiendo por mi? Genial, -Claro, ya se la pondré-.

Me pusieron la inyección, suerte que no era en el glúteo, era en el brazo.
Cameron me ofreció estancia en su casa, pero la verdad no accedí y le pedí que me llevara directo a casa de Alice, sería mucho mejor que ella me atendiera, la adoro tanto que ella siempre me cuida.

Llegue a casa de Alice y me dejo Cameron.
-Oh, Dios, ¿qué te pasó Sav...-, creo que se dio cuenta que estaba abrazada de Cameron, no tenía fuerzas de absolutamente nada, -Cameron, que sorpresa, bueno, la fiesta de acabo, puedes dejar a Sav en el sillón. Muchas gracias- sabía que lo hacía a propósito, pero daba igual, no tenía ganas de caminar.
-Gracias Cameron- dije y luego el cerro la puerta.

-Me debes de contar todo- decía Alice mientras me daba una taza de té. Le conté absolutamente todo y ella me estaba prestando extra atención.

La verdad, es que cuando estoy con Cameron, siento algo diferente, pero es imposible que me guste. Dije que esto no se quedaría así. Ay, pero es que es tan lindo. Está bien, me tengo que concentrar...