Tutú • Larry Stylinson AU

fifteen.

N/A: ¡Hola! Antes de comenzar el capítulo me gustaría deciros que la nueva portada (sí, la he cambiado de nuevo, estoy loca) es ya la definitiva. No estoy segura de si el último capítulo se publicó correctamente, id y revisad que hayáis leído el final. Disfrutad de este capítulo y dejadme vuestra opinión, siempre me sacáis sonrisas ♥

— Eso es mentira.

Sus palabras fueron como cuchillos que se clavaron directamente en mi corazón, una detrás de otra, sin piedad. Lo miré dolido sin comprender nada, fruncí el ceño e intenté transmitirle con la mirada los miles de pensamientos que habían inundado mi mente en tan sólo unos segundos. Él permaneció en silencio, cerró los ojos con fuerza y los volvió a abrir, las lágrimas se habían acumulado en sus ojos como el rocío en las hojas.

¿Por qué me estaba traicionando?

Quería gritarle y preguntarle qué estaba haciendo pero no era capaz, la confusión que sentía en aquel momento no dejaba lugar a las palabras que querían salir de mi interior. 

— ¿Es mentira?—la conserje preguntó, Harry asintió lentamente, sin dejar de mirarme en ningún momento—. Louis, ¿Podemos hablar fuera un momento?   

Salimos de la habitación dejando dentro a Tim y Harry, sumidos en un glacial silencio que hizo que la tensión creciera en el ambiente. Cerré la puerta y esperé a que ella hablara. Ya tenía una idea aproximada de lo que me iba a decir.

— ¿Me has mentido? Si Harry estuviera siendo acosado no dudaría en decirlo, ¿No crees? Le estamos dando la oportunidad de liberarse de su acosador y no la está cogiendo, eso significa que está bien. No le he visto ninguna herida y va en manga corta, lo cual quiere decir que no tiene nada que ocultar —habló muy rápido, tanto que tuvo que parar durante unos segundos para coger aire de nuevo para poder proseguir—. No entiendo nada, Louis.

Agaché la cabeza, no sabía que decirle. Harry me acababa de dejar como un mentiroso después de todo lo que había pasado y yo no me podía sentir peor. Estaba seguro de que tenía mil razones para lo que acababa de hacer, conocía lo suficiente a Harry para saber que algo importante estaba pasando, o quizás no, quizás lo único que estaba haciendo era engañarme a mí mismo. Sentía como una guerra a dos bandos comenzaba a batallar en mi cabeza.

— ¿Puedo hablar con él? —necesitaba una explicación—. Señora, yo le prometo a usted que yo no le he mentido, no podría mentir sobre algo así, créame.

Ella asintió y entró a la habitación, segundos después Harry apareció en el pasillo, frente a mí. La luz de la Luna iluminaba su rostro, dándole un aspecto suave y delicado. Dí un paso hacia él, estábamos muy cerca el uno del otro, tanto que el olor a frutos del bosque que tanto le caracterizaba llegaba a mí y me envolvía. Carraspeé varias veces antes de comenzar a hablar.

— Dame una buena explicación que justifique lo que acaba de suceder, Harry —lo miré a los ojos y esperé a que respondiera. En el fondo sabía que no me iba a dar ninguna explicación ya que nunca las daba, siempre respondía de manera cortante a mis preguntas y nunca se molestaba en explicarme las cosas que le sucedían. Suspiré pesadamente.

— No tengo nada que explicar —no me sorprendí al escuchar su respuesta—. ¿Sabes lo que pasa, Louis?

Negué.

— No deberías meter las narices donde no debes. Ya te he dicho que este tema no te incumbe y si me tengo que alejar de ti, lo haré. Estás aportando un drama a esta situación que es totalmente innecesario —abrí la boca para responder pero él levantó el dedo indicándome que todavía no había terminado de hablar—. Esto no es una maldita película, tú no eres el protagonista de ningún libro adolescente, aléjate de los problemas de los demás. ¿Te he pedido alguna vez ayuda? Nunca.