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jealous {l}

Iris' POV:

"Tu puedes hacerlo Iris.", palmee mi mejilla un par de veces mientras me miraba en el espejo.

Estaba siendo muy exagerada con el tema pero me ponía los pelos de punta pensar en que los dos chicos de mis pesadillas me estaban esperando abajo. No quería salir, quería hacerme bolita y llorar.

No sabia como me había metido en esto.

Llené mis pulmones de aire para después soltarlo y salir por la puerta. Inmediatamente me tope contra el ancho pecho de alguien.

"Te tengo.", sus manos rodearon mi cintura. Levante la mirada y me sentí aliviada de que fuera Luke y no Jack.

"Hey... ", me separé un poco de él pero sin embargo no soltó mi cintura.

"Me haz tenido esperándote durante casi una hora, ¿que tanto hacías?"

No entendía por qué pero Luke me ponía mal. No existía la cordura en mi cuando lo tenia así de cerca. Me sentía débil y hasta las piernas me temblaban. Lo odiaba por que antes no me sentía así. Todo empezó cuando el comenzó a ser sumamente lindo conmigo.

"Cosas de chicas.", expliqué rápidamente y él asintió con la cabeza pareciendo entender. "No ese tipo de cosas.", reí al pensar que quizá lo había mal interpretado. "En realidad no quería ver a Jack."

"Traté de hacer que se fuera pero ya sabes como es de testarudo.", rodó los ojos. Sus bonitos ojos azules.

"No quiero bajar si sigue ahí.", hice un puchero. Parecía una niña pequeña y chiflada pero me rehusaba a estar con él otra vez.

"Podemos quedarnos aquí arriba y divertirnos un poco.", me jalo hacia su cuerpo para así quedar completamente pegados. "Me gustaría repetir lo del jueves.", se inclinó para estar a la altura de mis labios y me besó.

Todo en mi interior empezó a dar vueltas de solo pensar en lo que habíamos hecho. Yo también quería que se repitiera.

Me separé para verle el rostro y acariciarlo. "Mejor vamos al cuarto de Darleen.", le di un corto beso sobre los labios.

Luke sonrió y soltó mi cintura solo para tomar mi mano y comenzar su camino hacia cualquier habitación que encontrará. Afortunadamente entró a la correcta y cerró la puerta con seguro detrás de nosotros.

No perdió el tiempo y se desabrocho los pantalones dejándome ver el borde de sus boxers de Calvin Klein. Ambos sabíamos que no tendríamos mucho tiempo antes de que alguien intentará entrar a la habitación. En una fiesta todos buscan una habitación disponible.

Me sorprendía lo fácil que había sido. Solo era cuestión de decir "hay que hacerlo" y ya estaba.

El sexo era cosa de nada para los jóvenes de hoy en día.

Aún recuerdo que cuando era más chica creía que sería virgen hasta el matrimonio y esperaría por mi príncipe azul el cual jamás llegó y en su lugar me encontré con Jack Hemmings. Ahora estaba apunto por hacerlo con su hermano incluso cuando bobamente llegue a pensar que Jack sería el único.