Entramos en la discoteca y estaba repleta de gente borracha bailando en la pista de baile. Iba a ser fácil conquistar a algún chico en este estado, pero la idea no me hacía mucha gracia, solo había aceptado por orgullo.
Nos adentramos a la barra para empezar a tomar una ronda de chupitos y así se me pasará la vergüenza que sentía al saber que tenía que conquistar a un chico. Termine de beber y mire en dirección de Oliver. Este estaba bailando con una rubia muy pegado, ya me había sacado ventaja, asique me adentre a la pista y no tarde en tener la mirada de varios chicos en mi, incluida la de Oliver que me miraba con desaprobación pero no hizo nada.
Ví a un chico muy guapo que se acercaba a donde estaba bailando, era alto y tenia el pelo rubio pero no se podía comparar con Oliver, este era más atractivo.
El chico empezó ha bailar conmigo y un poco nerviosa me agarré a su cuello para bailar más pegados, bajo la atenta mirada de Oliver.
-Soy Will, ¿y tu?.-Pregunto sobre mi oído por el ruido.
-Soy Taylor.-Este me miró y sonrió mientras bailabamos.
Seguimos bailando durante un rato hasta que me separe de él para ir a la barra a pedir otra cerveza y me quede sentada en la barra tomando hasta que mi mente dejo de hacer caso a mi razón.
Volví a la pista de baile y empecé ha bailar sin ningún control. Encontré a Will y seguí bailando con el hasta que sentía que mis piernas fallaban. Will me cogió de la cintura y salió del cúmulo de gente dirigiéndose a um rincón fuera de la multitud.
Este empezó a besarme por el cuello y yo intentaba separarlo de mi, pero no tenía fuerzas. Entonces, de un momento a otro James apareció y lo separó de un puñetazo.
-¿Que crees que haces gilipollas?.-Pregunto enfadado.
-¿A ti que te importa?.-Dijo Will levantándose del suelo y lanzando un puñetazo que esquivo.
-Es mi chica.-Dijo James enfadado cogiéndome en brazos.
-No lo parecía cuando bailaba conmigo en la pista.-James me soltó y le pegó otro puñetazo en la cara a Will.
Me cargo en brazos y me sacó fuera de la discoteca para sentarme en el césped de un pequeño parque que había cerca. Entonces empecé a reír como una posesa.
-Joder, Taylor, mira la que has hecho.-Me dijo James enfadado.
-No te enfades James.-Dije haciendo pucheros y este me miraba enfadado.
-Nos vamos a casa.-Dijo James.
-No.-Dije enfadada.-Yo quiero bailar más, además todavía no he bailado contigo.-Dije bailando yo sola y mirándolo con una sonrisa amplia. Hasta que me escurrí y me agarró y mis ojos se empezaron a sentir cansados.
-No, Tay, no cierres los ojos, mírame.-Pero yo solo oía su voz a lo lejos.
JAMES
Mierda. Se había dormido. La cargue en brazos y la apoye en un banco para llamar a Helena. Esta vino enseguida.
-¿Donde la has encontrado?¿Cuanto ha bebido?¿Y como es que estas tu aquí?.-Pregunto preocupada.
-Un tío quería llevársela, cuando la ví en sus brazos inconsciente salí corriendo por ella.-Dije con rabia y la verdad no entendía por que no lo había dejado inconsciente hay dentro.-Y estoy aquí por que salí con Emma.
-¿Como dejo Oliver que Taylor llegará a esto?.-Dijo Helena nerviosa.-Lo voy a matar.
-¿Que?.-Dije un poco molesto.
ESTÁS LEYENDO
Estrellas de Cristal
Roman d'amourTaylor es una joven de diecisiete años que se muda a California debido a que ha sido expulsada de su antiguo instituto por malos comportamientos. Esta mudanza supone un nuevo inicio para Taylor, pero no solo la oportunidad de empezar una nueva vida...