El chico anarquista.

Eres como mi libertad.

Mi nombre es William. Soy estudiante de preparatoria, artista callejero que se burla de la sociedad actual, el gobierno, la religión y como empresas televisivas nos controlan de la manera más inmunda posible claro usando un poco de ironía. Además soy anarquista.
Un día estaba en búsqueda de lugares para realizar obras nuevas, y de repente ví a no más de 20 metros de mi a una chica.
Ella era una chica muy hermosa cabello semi largo, chaparra y con una linda sonrisa. Yo no podía parar me y decirle hola porque podría descubrir me. Así que tome mi mochila y salí corriendo hacia mi casa.
Al siguiente día en la preparatoria yo estaba sentado contemplando como se iba llenando lentamente el salón hasta que.. la ví era la chica que había visto el día de ayer yo no tenía idea de que estudiaba en mi preparatoria y mucho menos en mi salón.
Ella se sentó justo en donde nadie se quiere sentar al lado mío.
La miré, miré mi reloj y me dije diez segundos William diez segundos de valor. Así que tome esos diez segundos la volví a mirar sonreí y le dije Hola.
Ella volteó me miro y con una sonrisa maravillosa que parecía ser de perlas me contestó "Hola".
Miré mi reloj y aún quedaban 5 segundos la miré a los ojos y pude ver como un café cálido redondeada sus negras pupilas, la seguí mirando y le dije:
- ¿Porque una persona tan maravillosa como tú hablaría con alguien como yo?-
Ella respondió con una risa un tanto nerviosa: ¿Porque no?
Después de eso le pregunté su nombre y otras cosas más sobre ella.
Su nombre era Charlotte.
Y así seguimos platicando durante las clases y a pesar del constante intento de los profesores por callarnos seguíamos platicando.
Al final de la clase le pregunté su número celular y ella me lo dió.
Dieron el timbre de salida y ví como todos salían corriendo y yo caminando detrás de ellos.
Al llegar a casa como todos los días mi padre viajando en una junta de negocios y mi madre en el salón de belleza claro que ella llegaría como a las 7:00pm
Bah, da igual.
Pase a la cocina y me preparé algo de comer para después subir a mi cuarto.
En mi cuarto tomé una hoja de papel e hice un sketch de mi siguiente trabajo. Este era un hombre encerrado en una jaula con la leyenda que decía: "Somos tan libres como los pájaros".
Después tomé el celular y apunté el número de Charlotte en mi celular le mandé un mensaje con el típico "Hola".
Y ella confundida respondió:
Mmm, ¿Quien eres?
William tu compañero de preparatoria. - respondí -.
Al igual que en el salón platicamos un buen rato y después tomé una hoja de papel y escribí una frase con dedicatoria a ella que decía:
" Eres como mi libertad, te conozco pero no te tengo".