Capitulo 28

3 0 0
                                    

Maddie
Me di cuenta de que ya me había alejado bastante y fue ahí que me puse a pensar

¿Qué sucedió?

Frene de golpe, provocando que el auto detrás de mí, me sacara la vuelta accionando el claxon como desquiciado y gritando un par de palabras altisonantes. Me orille.
Ahora mismo tenía un caos en mi interior que necesitaba aplacar.
¿Qué era lo que sentía? ¿Por qué me sentía así? Traicionada, herida, lastimada.
Ashton no era nada más que un amigo y sin embargo verlo besar a Sarah me rompió el corazón.

Al mirar por el retrovisor encontré mi mirada vidriosa, las lágrimas no tardaron en caer. Tenía un nudo en la garganta que prácticamente que hasta me impedía respirar.
Logre tranquilizarme después de unos minutos, pero aun sentía algo enterrado en el pecho.

_______________________________________

-Maddie- me dirige al mostrador donde me entregaron mi orden. Sin duda un buen café, me ayudaría a tranquilizarme. Me hundí en un cómodo sillón, con la mirada perdida en el líquido hirviente.
- ¿Puedo sentarme?- esa pregunta me hizo levantar la cabeza, encontrándome con nadie más y nadie menos que Ashton.
-Claro. - conteste sin muchos ánimos y volví a bajar la mirada a mi bebida.
-Sabes...- rompió el silencio después de un par de minutos -Fui a buscarte a tu casa...- volteé a verlo y se puso serio cortando la oración. - ¿Lloraste?
- ¿Y-Yo?- baje la mirada de nuevo -No, claro que no.
-No me mientas. - tomo mi barbilla para levantar mi rostro. -Te conozco más que bien.
-Bueno, sí. Llore ¿Feliz?- quite su mano, y lleve mi bebida a mi boca, me queme. Pero disimule bien todo gesto de dolor.
- ¿Por qué estaría feliz? - me miro serio.
-No me refiero a eso...
-No me interesa... ¿Por qué lloraste? ¿Estás bien?
-Ashton, no quiero hablar de eso. - no tenía por qué ser así de cortante con él, pero simplemente no quería hablar de eso.
-Está bien.
-Está bien. - repetí.
-Te vi esta mañana...- mierda.
- ¿Ah sí?
-Sí, ¿Fuiste a buscarme?
-Si- no podía negarlo, si no tendría que inventar una mentira enorme y no estaba de humor y por algo no quería mentirle. -Pero estabas algo ocupado, parece...
- ¿Por eso te fuiste?
-No quería interrumpir- afino la mirada como si así pudiera leer mi mente, rogaba por dentro por qué no tuviera ese súper poder. -Hablando de eso...- intente cambiar de tema - ¿Qué haces aquí y no en clase?
-Renuncie- respondió aun mirándome con detenimiento
- ¿Qué? ¿Porque?- me sorprendió.
-Porque Sarah intentaba chantajearme, si no aceptaba estar con ella, le llenaría de humo la cabeza a su padre para que me corriera... No logra comprender que yo solo he amado, amo y amaré a una sola mujer que no es ella...- acaricio mi mejilla haciéndome temblar.
-Ah. - apenas logre pronunciar.
-Pero se me está haciendo tan difícil llegar a ella...- suspiró -Pero sé que vale la pena... a como dé lugar, me ganare su corazón una vez más. - levante mi mirada hasta sus ojos, grandísimo error. Me perdí en ellos.
- ¿Porque la besaste?- se escaparon de mi boca las palabras. Estúpidos celos.
-Necesitaba un motivo para que pudieran correrme...
- ¿No pudiste hacer otra cosa? Golpearla tal vez...
-Ni loco golpearía a una muj... ¿Acaso esos son celos? - su mirada brilló.
-Por supuesto que no- fruncí el ceño. ¿Qué se creía?
- ¿Sabes que me harías el hombre más feliz de la Tierra si me dijeras que si?...
-Pues siento frustrar tu felicidad.
-Oh si- carcajeo -Son celos, puros celos. - rio pero de un momento a otro se volvió serio. -No estoy tranquilo, si no se qué te sucede. - acaricio mi parpado inferior con una delicadeza inexplicable. - ¿Tuve yo la culpa? ¿Por eso estas así conmigo?
-Te dije que no quiero hablar de eso.
-Está bien...- tomo mi mano entrelazando nuestros dedos - ¿Y para que me necesitabas?
-Yo iba a invitarte a almorzar- dije tratando de soltarme un poco.
- ¿Y por qué no lo hiciste?- sonrió.
-Estabas 'ocupado' ¿recuerdas?- rodé los ojos.
-Bueno, pues ya no lo estaré... y ahora que estoy desempleado pasare hambre, así que puedes invitarme cuando quieras- me fue imposible no reír. - ¡Sonreíste!- me abrazo tan fuerte, casi me asfixia.
-Si no me sueltas, no podre ni respirar- aflojo el abrazo.
-Lo siento, es que no puedo verte mal...- me observo con esos profundos ojos. -Madison discúlpame si hice algo que te lastimara...
-Ya, no te disculpes no es culpa tuya. - intente sonreír.
-Te amo Maddie- al sentir su cercanía mis ojos se cerraron por instinto, sus labios capturaron los míos iniciando un parsimonioso beso, trayendo con el miles de sensaciones. Su mano derecha se acomodo en mi mejilla, esta jugueteaba son mi cabello al mismo tiempo, mientras que con la izquierda acariciaba mi cintura.
Un fingido tosido nos hizo separarnos abruptamente, M-I-E-R-D-A, frente a nosotros estaba Lucas con un rostro para nada feliz. Y como estar feliz si su novia se estaba besando cómodamente en un sillón con su ex novio olvidado

Remember MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora