Capítulo 10

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Las horas se nos hicieron cortas por las estupideces que estabamos haciendo. El reloj marcaba que eran las dos de la tarde, así que como Judith no paraba de quejarse diciendo que tenía hambre, decidimos comer. Judith era una de esas chicas que podía comerse un supermercado entero y no engordar ni un mísero gramo. La gente empezó a venir y el "estadio" se llenó en poco tiempo.

Unas chicas se acercaron a nosotras con intención de colarse y quitarnos primera fila. Una de ellas intentó apartarme de la barandilla dandome un codazo pero la detuve antes de que pudiera empujarme.

- Oye bonita, si quieres primera fila te vienes mas pronto si? Ahora te vas hacia atrás.- le dije con un tono irónico.

- Mira guapa, yo me pongo donde me sale de ahí abajo y tú no eres nadie para decirme donde irme así que te callas.- me respondió.

Judith me hizo un gesto indicandome que la dejara pasar y no tuvieramos problemas con nadie, pero yo no me iba a callar ni quedarme de brazos cruzados. Ya me habían tocado la moral durante el día. Me lancé sobre ella y empecé a pegarla. Mis amigas intentaron detenerme pero la rabia que contenía dentro no me dejaba. Derrepente unas manos me agarraron de la cintura y me separaron de esa zorra, os juro que la mataría si no me hubiesen apartado de ella. El que me quitó de encima de esa, era un hombre alto y ancho como un armario empotrado. Me llevó detras del escenario mientras yo gritaba como una loca que me soltara y me dejara en el suelo.

- Sueltame!! Déjame en el suelo yaa!!

- Pero mira lo que os habeis echo, tienes el labio partido y a ella le has abierto la ceja.

- Que se joda, por puta.- solté una carcajada.

Ese hombre me había dicho que tendría que esperar hasta que los médicos viniesen sobre las siete y todavía eran las seis. Tuve que ponerme una gasa en el labio y esperar una hora para que me lo cosieran.

Me entretuve viendo como ponian el decorado, los micrófonos y el vestuario de los chicos. Unos gritos hicieron que mis tímpanos se rompieran en millones de trozos. Me imaginé que era el auryncar y que vendrían para la prueba de sonido. A mí no me dejaban moverme de la silla. Cada vez que intentaba levantarme, el hombre me miraba desafiante. Una chica con una gran sonrisa se acercó a mí, deducí que era una de las chicas de la cruz roja.Me desinfectó el labio y tuvo que darme dos puntos.

Cuando iba a bajar a donde estaban mis amigas, alguien volvio a taparme los ojos.

- Sabes quien soy no?.- reconocería esa voz en cualquier lado.

- Un rubio creido?.- dije entre risas

Me giré para quedar cara a cara con él.

- Que coño te ha pasado en el labio?-preguntó disgustado.

- Me he peleado con una choni hahah.- dije con una sonrisa adorable.

- Luego hablamos de esto.- me besó la frente y me dirigí donde estaban mis amigas.

Yo bajé con una sonrisa de oreja a oreja aunque la gente me miraba mal y hacían comentarios como pobre niña, mira lo que le ha echo y otros como vaya ostia le ha dado.

!¿Como que pobre niña?! Esa puta ha venido provocandome y se la ha llevado por creida, punto.

Los chicos salieron cantando breathe your fire. Todas gritaron, yo incluida. Dani ponía caras raras mirando al público, este es tonto.

Y cuando guiñaba un ojo mirando a primera fila, sabía que era para mí.

Enfin... dando por finalizada la prueba de sonido, volvimos a extender las toallas y nos sentamos mientras hablabamos de lo que había pasado antes entre risas.

Solo tu, Blue.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora