Solo tu, Blue.

Capítulo 17

- Ya hemos llegado!-dijo Carlos.

Me bajé la primera del coche y después de estirarme me reuní con las dos enanas. Lydia me estuvo contando lo que habían hecho en el camino emocionada, en fin. Miré a mi alrededor. Era como un camping pero sin recepción, ni piscina ni nada. Sitio para acampar, unos baños con duchas y un lago. A mí me dio buena impresión, sería divertido.

- Donde estamos?-preguntó Jessica-como comprendereis no quiero pisar mierda de vaca.

- Ojalá la pise jaja-dije en un susurro, con tal mala suerte que Dani me escuchó y se empezó a reir.

- Que tonta que eres jaja, te van a oir.

- Me da igual, es la verdad.

- Aquí veníamos yo y mi hermana cuando éramos pequeños, y pensamos que sería un bonito sitio para acampar. Al fondo hay un lago, podremos bañarnos ahí.-dijo David.

Esto sería divertido. Unos dias desconectando de todo, con mis cinco ídolos, con mis mejores amigas y Jessica, pero faltaba Sara, cosa que me fastidiaba bastante. Caminamos hacia la zona de acampada, donde sacamos las tiendas e intentamos montarlas. Leian las instrucciones mientras yo hacía algo productivo como estar sentada en una silla riéndome de la torpeza que tenían. Al fín, las tiendas montadas y todo listo. No se les ocurrió nada mejor que traer tres tiendas de dos personas y una de tres plazas ya que éramos nueve en total.

Yo dormiría con Lydia, y Judith con Jess, pobrecita, me arrepentiré toda mi vida de haberte dejado dormir con ella. Los chicos se repartieron las tiendas, organizaron todo y decidimos ir a dar un paseo por la zona para conocerla mejor. Los pájaros cantaban, el sol brillaba y había buen rollo entre nosotros, la mañana iba bien. Después de un largo paseo por los alrededores, decidimos volver a las tiendas para ponernos el bikini e ir al lago, no nos vendría mal un baño.

Entré a la tienda. Mi corazón empezó a latir con fuerza después de ver eso. No podía soportarlo más, era demasiado asqueroso.

- AAAAHH!-grité

- NAI! ¿Qué pasa?-preguntó David

- Hay un saltamontes enorme dentro de la tienda agg.

- Y para eso gritas? Serás miedica...-dijo Carlos.

- Rubio, si tan valiente eres entra ahí y saca el bicho ese.-dije yo con rabia.

- Pues vale.

Que orgulloso es a veces, se hace el valiente y luego es un miedica impresionante. Entró con la cabeza bien alta pero al cabo de treinta segundos, salió gritando como una niña.

- AAAHH! QUE ASCO JODER.

- Y luego yo soy la miedica, no te jode, imbecil.

Blas cogió el insecticida y entró a la tienda. Mató el saltamontes y salió cantando victorioso. Besé a Blas en la mejilla y Dani frunció el ceño.

- Eso se le podía haber ocurrido a cualquiera, que lo sepas-dijo Dani.

- Pero no se te ha ocurrido rubiales-dije yo mientras me reía.

Me cambié y me puse el bikini rosa de volantes, cogí la toalla, las gafas y después de ponerme las chanclas me dirigí al lago donde Jessica, Lydia y Judith me esperaban. Llegué al lago y las chicas tomaban el sol en la hierba. Coloqué la toalla al lado de las demás y me tumbé en ella. Pasada la media hora, decidimos bajar a bañarnos. Judith se metió de golpe con Jessica pero a mí y a Lydia nos costaba meternos más, ya que el agua estaba helada.

Llegaron los chicos, haciendo el indio como de costumbre, nada nuevo que yo sepa. David le tendió su mano a Lydia y se metieron juntos al agua, romanticamente cursi. Álvaro se sentó en la orilla a mi lado al ver que estaba sola.

- No te bañas?-preguntó.

- Hola a tí tambien, el agua está helada, no quiero acabar muerta de una hipotermia sabes? jajaja-respondí.

- Jajaja, que boba eres, vienes a tomar el sol con Blas, Dani y conmigo? Esque no quiero verte sola.

- Oins, que mono Gango, vale me apunto.

- Sube.

Me subí a caballito con Álvaro y me llevó a la toalla donde estaban estos dos. Estuvimos hablando, riendo y jugando durante más de dos horas hasta que alguien propuso que nos bañáramos. Hoy moriría congelada, estaba claro.