Capítulo 18

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- Vamos a bañarnos venga.-dijo Dani

Dios mio Daniel, lo haces por provocarme o porque narices, no lo entiendo. Llevaba un bañador azul y blanco de la marca quicksilver, muy pijo el niño.

- Nai, no dejas de mirarme, se que te encanto, pero no me desgastes jajaja-dijo Dani

- Pero vamos a ver, tu eres tonto o te caiste de un manzano? Te crees el ombligo del mundo? Porque te puedo asegurar que no lo eres.-le dije con desprecio.

Le empujé para que cayera al agua, pero el fue mas rápido y me agarró del pie haciendo que cayera con él, definitivamente, este tio es imbécil.

- DANIEEL! TE PUEDES IR A LA MIERDA!

- No sin ti-dijo riéndose a carcajadas.

- A mí no me hace ninguna gracia sabes?

Salí de agua enfadada, él ya sabía que no quería mojarme, que ganas me daban de darle un tortazo. Me senté en la toalla de brazos cruzados con las gafas puestas a secarme.

Dani se sentó a mi lado poniendo pucheros, si se creía que eso le iba a funcionar estaba muy pero que muy equivocado.

- Hola fea-dijo

- Piérdete.

- Oh, vamos no te enfades jaja

- Te hace gracia?

Me levanté con intención de irme. Lo único que me apetecía era cruzarle la cara, me había dado mucha rabia lo del agua y no se lo perdonaría tan fácilmente. Me agarró de la mano y me solté inmediatamente.

- Los dos sabemos que ha sido una broma, no te enfades anda.

- Adiós.

- Me perdonas?

No respondí y decidí divertirme un rato. Puse mi mano en su nuca y comencé a acariciarle el pelo, sabía que le gustaba por el simple hecho de que se le empezaba a erizar la piel. Él sonreía como un estúpido mientras me miraba con esos ojos brillantes y relucientes. Me acerqué a su oído, un punto débil para muchos, incluída yo. Dani cerraba los ojos, le encantaba, entonces, al estar a escasos centímetros de su oreja..

- Ni de coña, viene Jessica, os dejo solos mi vida.

Dicho eso me fui riéndome dejando a Dani tumbado en la toalla con una mirada vengativa. Sabía que Dani era capaz de hacer cualquier estupidez, como imitar a la gente en Londres. Si yo les viese hacer eso les daría con el paraguas en la cabeza, por estúpidos. Fui donde estaba Blas y me senté a su lado.

- Hola rubia-dijo él

- Hola Blasito.

- Tenemos que hablar.

- Y eso?-dije preocupada.

- Sé lo del labio, lo de la ceja y todo lo que pasó en el concierto. Sé que ella no te pedirá perdón es demasiado orgullosa para eso, pero se que se arrepiente y que hará todo lo posible para que os lleveis bien y demostrarte que lo siente.

- Jo Blas, no se que decirte la verdad. La dos nos pasamos bastante en el concierto, yo también haré todo lo posible para llevarme bien con ella, ya verás.

- Gracias, de verdad.

Me abrazó con ternura, era adorable. David, Álvaro y los demás nos llamaron para que fúesemos recogiendo. Empezaba a oscurecer pues se nos había ido la tarde entre juegos y bromas, un día perfecto resumiendo. Volvimos al campamento, y nos cambiamos de ropa para cenar y jugar a en busca del tesoro, sí en busca del tesoro como leéis, porque a los listos de turno, me refiero a Carlos y Dani, les apetecía usar las linternas. Preparámos la hoguera y nos sentamos alrededor de ella mientras cenábamos.Nos dividimos en tres equipos: Blas, Judith y David. Dani y yo, Carlos y Lydia y Álvaro y Jessica. El juego comenzaba en 3,2,1...

Solo tu, Blue.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora