The Strangest Dark World

The Strangest Dark World: Apocalypse. Fase 2 Capítulo 22: El Profeta.

¿??

-¡el fin de los días está cerca! ¡Oh, hermanos, oren conmigo para que Dios se apiade de nuestras almas! ¡Oren conmigo! ¡Hermanos! – decía el creyente en las calles, esperando que alguien se detuviera y lo ayudara, algunos lo ignoraban, otros se acercaron y rezaron con él. Con todo lo que ha pasado, no me sorprende que la gente crea.

-¡bah! ¿Quién lo diría? Todo resulto ser cierto. – estaba sentado en la azotea de un edificio de la ciudad. – ¿Cómo era...? Primero un demonio de rango debe bajar a la tierra, luego... si un ángel interrumpiera a aquel demonio mientras se alimenta de este humano, este causara un desequilibrio ya que al usar su poder, fusionaría al demonio con el humano elegido. Entonces este hibrido causaría un desequilibrio tanto en el mundo oscuro, como en la tierra y en el mundo de la luz. Esto... causaría el apocalipsis. – puse mis manos en mi cabeza. –ay, pero que complicado. Encima, ese tipo tiene el brazo de Lucifer. - *hace muecas* -ese tipo sí que es más especial de lo que cree. ¿Cómo se llamaba...? Yuhaki... no, ese no... el de ahora... Yuki... Snow... ¡¡bah!! ¡¿Quién rayos tiene tres nombres?! – me recosté en el suelo. –supongo que le queda... considerando todo lo que es.

Creo que ya mataron a ese demonio... el feo... ¿Cómo se llamaba? Belfegor, sí eso. Ya ha pasado dos semanas desde que lo mataron.

Ha pasado dos días desde el último demonio que apareció... el apocalipsis realmente está comenzando.

*explosión* a lo lejos algo se está quemando. Desde aquí puedo oír los gritos, esos demonios sí que son molestos. Creo que es ese tipo de cabello morado de nuevo. Ahora ese grupito se dividió. Todo por la muerte de Kronos... Ja... es gracioso, la historia se repite.

Snow.

Las personas empezaron a correr, dejando sus autos y pertenencias, todo por salvar sus vidas y las de sus hijos. Corrí rápidamente hacia aquel demonio que estaba destruyendo los autos que habían sido dejados atrás. Eleve mi mano e hice aparecer mi espada, con la que me acerque velozmente hacia aquel demonio, con la intención de cortarlo por la mitad.

Una ráfaga de fuego fue disparada justo frente a mí, obligándome a detenerme, mientras que este hizo que los autos que estaban ahí, explotaran haciendo retroceder al demonio.

-¡Yoshiro! – grite su nombre mientras lo veía de pie en aquel edificio. Con su capa negra y sus ojos morados al igual que su cabello.

El me miro fríamente antes de lanzarse del edificio, con la intención de caer sobre aquel demonio, con su puño formo una fuerte llama e impacto contra el demonio, incinerándolo mientras su puño caía, hasta que toco el suelo y levanto las cenizas de este por todo el lugar.

Él estaba de rodillas con su puño en el suelo y su cabeza inclinada.

-Yoshiro...

-vaya, vaya, pero si es el ángel del infierno, es salvador caído del cielo. Es curioso que el infierno tengo una puerta en nuestro cielo. – dijo poniéndose de pie, elevando su mirada hacia mí.

-¡Yoshiro! ¡Debes detenerte! ¡Estas actuando sin razón, debes volver con nosotros!

-has sido una gran molestia desde que bajaste. Solo digo, mira todo lo que ha pasado, hiciste que nos involucráramos con estos anillos, hiciste que la agencia nos tuviera bajo la mira, ¡involucraste a Namine en esto...! e hiciste que mataran a Hiro.

-Yoshiro, debes parar.

-¡¿Qué te da el derecho?! – dijo lanzándome una poderosa ráfaga de fuego, la cual contraataque con una ráfaga de hielo.

Su poderosa llama derretía mi energía helada, acercando su llama cada vez más, sin dudarlo, use todo mi poder para igualar las fuerzas, seguido de un salto, para evitar el impacto y neutralizar las fuerzas, Yoshiro también se elevó y con su espada de llamas empezó a atacarme, respondí de igual forma y bloquee sus ataques esperando las oportunidades para atacarlo también. Ambos intentamos atacar al mismo tiempo, así que nuestras espadas chocaron, causando un gran estruendo que destruyo los cristales de los edificios a nuestro alrededor.