Capítulo 35: Punto del destino;Sara Vs Snow.

55 5 1
                                    

Snow.

-Sara... Yo... Yo no mate a Nate.

-¡Cállate! ¡No tienes ningún derecho a llamarlo Nate! ¡Tú lo asesinaste! ¡¡Asesinaste a mi hermano y a mi cuñada!! – La Rabia de Sara podía sentirse y verse, de verdad que me sentía de una manera muy extraña en ese momento. –lo que me gustaría saber... es qué hiciste con mi sobrina. – Elena... claro Elena...

-¡Sara! ¡Elena esta...! ¡! –un dolor agudo evito que pudiera continuar, mi mano derecha había sido atravesada por lo que parecía ser una ballesta sujetada por alguien que estaba detrás de mí.

-¡Agh! ¡Sara! ¡No lo entiendes! ¡! – de la misma manera mi mano izquierda también fue atravesada por una fecha sostenida con una soga. Era ploimitio... no sentía un dolor así... desde que el verdadero patrón de la oscuridad mato a mi yo humano.

-¡Sara! ¡Por favor escúchame! – los agentes que me sujetaban evitaban que pudiera mover mis brazos y realmente dolía, el ploimitio me afecta como a cualquier otro demonio.

-primero lo primero, voy a encargarme de hacerte sufrir lo mismo que le hiciste sufrir a mi familia. – dijo dándome un golpe, arrancándome así de las cuerdas y haciéndome caer metros lejos de ella.

Mi cuerpo empezaba a sentir dolor, pues tanto su traje como las armas eran de ploimitio, ese golpe me dolió más que el de un demonio. Es ploimitio puro... ¿de dónde lo saco?

Intente levantarme rápidamente mientras que ella se acercaba lentamente hacia mí.

-¡Sara...! ¡Estas cometiendo un error! ¡Yo...! ¡! – de la nada un extraño proyectil cayó en mi brazo derecho, este tenía una agujas que ardían un poco, debe ser para hacerme débil. Pero...

-¡¿Qué mierda es esto?! ¡GHAA! – mi brazo empezó a arder de una manera espantosa, era como si quemara mi carne directamente desde mis venas hasta el exterior. El dolor era inmenso.

-¿te gusta? Es ploimitio líquido, eso circulara por tu sangre hasta que contamine todo tu cuerpo, haciéndote más débil y... matándote poco a poco... - su mirada reflejaba satisfacción cada vez que me lastimaba. –bueno, matándote si se injiere la dosis correcta. - ¡¿Qué?! ¡!

-¡¡¡AGGHH!!! – el mismo tipo de proyectil fue disparado hacia mi brazo izquierdo, causándome el mismo dolor pero aún más fuerte. Sentía como mi sangre quemaba mi cuerpo, era un dolor que no podía contener, no puedo... ¡Duele!

Sara lanzo un pequeño misil de su traje directo hacia mi rostro, este exploto y libero una extraña sustancia que provoco el mismo dolor en mí, empujándome hacia los muros de una de las casas. Es ploimitio... tienen muchas armas de ploimitio...

Mi brazo izquierdo... arde... no puedo formar el brazo del diablo... el ploimitio me esta... matando... Sara se acercó a mí lentamente.

-dime Snow... ¿Qué se siente? ¿Duele?

-Sara... escúchame... yo no mate a Nate... ¡Por favor! ¡Debes creerme!

-eres un maldito monstruo... ¿qué son esas lagrimas falsas? ¿Crees que tendré compasión de ti? – Sara estaba cegada por la venganza... creo que... ya no hay nada que pueda hacer...

Elena.

El equipo seguía impidiéndome ir hacia donde estaba Snow, no sé qué está pasando, quizás está en problemas...

-¡no me van a impedir pasar! – eleve mi escudo y lo baje rápidamente causando una sonda que lanzo a todo el equipo al suelo. Es mi oportunidad, corrí rápidamente hacia el agujero por el que lanzaron a Snow, pero algo apareció a mi lado lanzándome al otro lado del muro, destruyéndolo y haciéndonos terminar del otro lado de la calle. Mi cabeza me dolía horrible, lo que sea que me haya golpeado... es fuerte...

The Strangest Dark WorldDonde viven las historias. Descúbrelo ahora