The Strangest Dark World

Capítulo 41: La caída.

Taku Warau.

La base era un caos, no paraban las llamadas de la ONU y el pentágono de los Estados Unidos de América, también teníamos comunicación con las demás centrales de la I.E.S. las señales de demonios incrementaron de manera espantosa en tan solo minutos, era demasiado.

-¡Quiero un informe de la situación! ¡Comuníquenme con la Directora Rivers! ¡Quiero una aproximación del nivel de esa cosa!

-¡señor! ¡El ser que salió del portal...! ¡No tiene señal Demonium...!

-¿entonces no tenemos un nivel?

-señor... tiene una señal similar a la de los ángeles... casi igual a la de Miguel...

-no puede ser... - Categoría S.A. Nivel 15.

-comuníquenme de urgencia con el equipo de los portadores...

-¡señor! ¡Hay una falla en el sistema de contención de los demonios...! – un extraño sonido distrajo a todos haciéndolos mirar hacia la puerta de entrada de la sala de mando, se escuchan gritos por toda la base.

Me di vuelta poniéndome frente a todos. Algunos lloraban... otros solo estaban asustados.

-fue un gusto... haber trabajado con todos ustedes... perdón...

Sara.

Estábamos escondidos en un edificio abandonado a kilómetros de la zona 0, Snow estaba con Uriel en un cuarto separado de nosotros.

-eres un imbécil...

-Sara... yo...

-¡Cállate Kingcor! ¡¿Qué no te das cuenta de lo que acabas de hacer?!

-¡lo siento! ¡No tenía idea de que el diablo podría salirse con solo abrir la puerta una vez...! ¡Si los angelitos me hubieran incluido en las reuniones...!

-los portadores sabían... - Gabriel interrumpió a Carlos viéndolo con decepción. –los portadores escucharon cuando dijimos que mi hermano estaba en los bordes de la puerta... claramente no pensaron. – Gabriel miro con odio a Yoshiro quien solo mantenía la cabeza agachada. –espero que estés contento.

-¡¿QUE QUERIAS QUE HICIERA?!! – Yoshiro levanto la cabeza de golpe mostrándonos como lloraba por lo que había hecho.

-¡Gabriel! – Sn... Snow... - déjalo...

-Snow... - Elena también se asustó al verlo de aquella manera.

Snow no tenía el brazo izquierdo...

-el diablo quería recuperar algo que era suyo y lo hizo. – dijo notando nuestras miradas de asombro. – él quería el poder que me daba el brazo del diablo... su brazo... sin ese poder mi brazo vuelve a ser lo último que fue... un trozo de carne arrancado... no puedo regenerarlo.

-tu nivel... es el mismo... Categoría A+, Nivel 11+. – dijo Carlos viéndolo con el casco de su traje.

-sí... pero ese nivel no es suficiente para enfrentarlos... ya no está en nuestras manos... - Snow miro a Yoshiro, quien mantenía su cabeza agachada, y se acercó a él.

Yoshiro se negaba a levantar su cabeza sabiendo que Snow estaba frente a él, hasta que Snow agarro su brazo y lo acerco a él... le dio un abrazo.

-yo no te culpo de nada... así que tú tampoco lo hagas. – los ojos de Yoshiro se abrieron como platos, pues la reacción de Snow no era algo que ninguno de nosotros se esperaba. Puedo ver como Snow realmente se preocupa por estos chicos... y los quiere...

*estruendo*... -¿escucharon eso...? – Carlos miro por una de las ventanas del lugar cuando de la nada su casco empezó a emitir una alerta. –no puede ser...

-¿Qué ocurre? – me acerque a la ventana en la que estaba con confusión, la cual se fue al instante al ver aquella terrible escena... la central de I.E.S. había explotado a lo lejos.

-no... ¡No, no, no, no! ¡No!!

Elena.

-¡tía Sara! – corrí hacia ella para abrazarla mientras que ella caía de rodillas al suelo y partía en lágrimas.

Uriel.

Las cosas se empezaban a salir de control, el apocalipsis ya estaba aquí, y el reinado de mi hermano empezó a expandirse... Snow no es el mismo... puedo ver como mira e lugar donde debería estar su brazo izquierdo, y no veo deseos de seguir peleando... ahora, solo veo a alguien que ya se rindió.

-ya no está en mis manos... - ¿eh...? Snow se voltio para mirarme.

-lo siento... Miguel...