No creo que tengas la culpa, eres humano. La de la culpa soy yo por quererte tanto, no debí decir nada, debí callar como acostumbraba hacer.
Tú nunca has sentido que te rechacen, y lo sé porque caminas por los pasillos con la chica que te gusta, y ella no te rechazó. Te felicito. Al menos a uno de los dos, le salieron bien las cosas.
No estoy aquí para reclamarte, la verdad no sé ni para qué estoy aquí. Simplemente no sé qué hacer, no sabes cuantas veces he soñado con que seamos robots para no sentir nada y poder reprogramarnos.
Ya no quiero pensar en ti, ni en tu sonrisa, ni en tu voz. Es cuestión de tiempo para encontrar a alguien más que me rompa el corazón.
Quiero convencerme que no necesito a nadie.
Ayer tomé una copa de la reserva familiar, realmente tomé tres copas, era fuerte, el líquido se sentía caliente cuando corría por mi garganta pero jamás me sentí mejor. Pero tú, no lo oíste de mi.
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Pero tú, no lo oíste de mí
Conto¿Sabes cómo es que el amor no te sea correspondido? ¿Sabes cómo es que te ignoren después de haberte confesado? ¿Sabes cómo es que prefieran a alguien antes que a ti? ¿Sabes cómo es sentir que perdiste tu tiempo? ¿Sabes cómo es sentir que no vales l...