– Goldy – iba persiguiendo al menor, quería decirle algo, era como una sorpresa.
Siguió persiguiendo, intentando atraparlo, aunque el menor corría mucho más rápido que él, logrando que nunca lo alcanzara.
– Jaja – mientras corría se iba riendo del mayor, haciendo que el pelirrojo de enojara un poco, pero al mismo tiempo formándole un leve sonrojo sobre sus mejillas.
– ¡Golden! – corrió más rápido que antes, acercándose más al rubio.
Al estar lo suficientemente cerca, tomó al chico entre sus brazos, alzandolo y logrando que no se pudiera escapar de nuevo.
– Sueltame – comenzó a moverse entre los brazos del mayor, intentando que él lo dejara en paz, aunque no funcionó, sólo logró que lo apretara más entre sus brazos, haciendo un agarre más fuerte.
– Te tengo una sorpresa – lo dio vuelta entre sus brazos, haciendo que se miraran a la cara, viéndose fijamente a los ojos, viendo cada uno el brillo en los ojos del contrario.
– O-ok – Golden desvió su mirada, con sus mejillas adornadas de un leve color rosa, aunque lo suficiente marcado cómo para que el mayor lo viera.
– Vamos – comenzó a caminar con Goldy entre sus brazos, logrando que éste se aferrara a su espalda, por el miedo de caer hacia el suelo y golpearse.
Siguieron caminando, hasta que llegaron a un lugar lleno de hielo, casi se veía como una pista de patinaje, pero la diferencia se notaba, este era hielo hecho naturalmente, no artificial.
Al menor al ver el hielo se le iluminaron los ojos de sobremanera, estaba emocionado, hace mucho no veía hielo real, aunque en verdad, nunca había visto en toda su vida.
– Calma osito, esta no es la sorpresa – siguió caminando, rodeando el lugar que tenía todo ese hielo, para no resbalarse en él, no quería caerse y que después le doliera.
– ¡Apura! Quiero mi sorpresa – para tener siete años, era un niño muy molestoso e infantil.
– Calma, falta poco – apuró un poco más su paso, aunque sólo fue un poco, no quería que el menor se cayera de sus brazos.
Siguieron caminando, con una rapidez moderada en los pasos. Foxy afirmaba fuertemente a su osito, quería que se sintiera seguro de que no se caería.
Al avanzar unos minutos más, habían llegado a un lugar en el que había algunas estructuras que eran como una media esfera, parecidas a una cúpula, vacías por dentro.
– ¿Qué son? – el rubio los quedó mirando con intriga.
– Son Iglús – lo bajó de sus brazos, dejándolo lentamente en el suelo frío.
– Wow, no los imaginé así – se fue acercando a paso lento hacia las "casitas de nieve".
– Sí quieres, entra – lo invitó a entrar al lugar, mientras que él iba detrás suya.
Al llegar a la entrada de uno de los Iglús, fueron entrando, viendo todo a su alrededor, eran bastante grandes por dentro, y muy bonitos.
Tenía unos cuantos cuadros colgados en las paredes, y un pequeño colchón con una cobija encima de él.
– Que genial – se veía emoción en su mirada, nunca había visto algo así en la vida real, solamente en las películas los había visto.
– Lo sé –.
Se quedaron un par de horas dentro del lugar, tocando cada centímetro de éste, mirando todo asombrados. El zorrito ya había ido, pero con la compañía del menor todo era mucho mejor.
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Fin del sexto One-Shoot del GolxyMonth.
Siguiente One-Shoot: Comprando adornos.
Los quiero mucho gatitos~.
- May.
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Una "pequeña" navidad. || ¡GolxyMonth!
FanficLos pequeños Golden y Foxy deciden pasar su Navidad juntos, por primera vez como los "super mejores amigos" que son. Aunque en el transcurso del mes se van dando cuenta que un sentimiento va surgiendo entre ellos, más grande que su amistad. ≥ Comenz...