Narra Jane:
Me despertó el llanto de alguien de inmediato pensé en Rose y trate de levantarme pero caí en la cuenta que me encontraba atada de pies y manos, estaba atada a un tubo y Tabatha se encontraba a mi lado y era ella quien se encontraba llorando, entonces todo lo sucedido vino a mi mente.
Estábamos saliendo del auto cuando unos hombres corpulentos se pusieron en nuestro camino, tratamos de rodearlos pero nos agarraron, empezamos a dar patadas y querer gritar pero nos taparon la boca. Recuerdo que mordí a uno, también recuerdo que me golpearon tan fuerte que todo se puso negro.
Estábamos en lo que parecía un sótano, ya era de día y un poco de luz se colaba por una pequeña ventana, quise gritar pero tenía la boca cubierta.
No sé cuánto tiempo había pasado pero tuvo que ser mucho ya que era todavía tarde cuando todo sucedió.
Escuchaba pasos arriba y también se escuchaban unos murmullos, después de eso escuche como los pasos llegaron a donde se encontraba la puerta.
La puerta se abrió y vi a uno de los hombre que nos había ataco la noche anterior.
— ¡Vaya! Parece que las princesas ya despertaron. — se acerco a mí y se agacho justo donde yo me encontraba. — Tú eres la pequeña que me mordió ¿cierto? — después de eso sentí un gran dolor en mi mejilla y un sabor metálico en mi boca que me indico que estaba sangrando.
>> No eres tan ruda ahora cierto, sabes no puedo negar que estas bastante linda, creo que podría divertirme contigo. — dijo empezando a acariciar m perna por encima del pantalón, me dio tanto asco que creí que vomitaría.
— ¡Aléjate, imbécil! Sabes que si alguien va a tener el placer de saborear a ese bombón, ese será el jefe.
— Y ¿Qué hay de su amiga? Ella tampoco está nada mal, es mas podría decir que es bastante sexy. — se acerco a Tabatha y ella empezó a llorar de nuevo.
— Solo lárgate Omar. — el tipo corpulento rechino los dientes y empezó a subir los escalones.
El otro se acerco a mí y sin mucho cuidado me quito la cinta que había en mi boca.
— Debes Saber que estamos en un bosque por mucho que grites nadie te escuchara.
— ¿Qué quieren de nosotras? ¿Esto es por dinero? Porque si es así les daré cada centavo que tengo con tal de que nos dejen ir. — el sonrió y le quito la cinta a Tabatha.
— Tú también tienes que tener en cuenta lo que le dije a tu amiga.
— Por favor déjenos ir, hoy mismo tendrá el dinero que pida, solo déjenos ir.
— Me encantaría hacer eso bonita, pero eso no lo decido yo.
— Dígale a su jefe que le damos el dinero que pida, pero que nos deje ir.
— No se preocupen dejare con llave para que Omar no las moleste. En un momento les traigo algo para que coman, no queremos que mueran antes de cumplir su cometido ¿Cierto?
Después de haberse ido escuchamos la puerta siendo asegurada con llave.
— ¡Tengo mucho miedo Jane! Ni en mis pesadillas creí que llegaría a pasar.
— tranquila, te prometo que saldremos de esta.
Alrededor de una hora después bajo el mismo hombre con una caja.
Saco algo de la caja y se acerco a mí, para mi sorpresa me desato las piernas, la alegría me duro poco porque sentí que pe puso una cadena en una de mis pernas, antes estaba atada al tubo y ahora estaba encadenada a él, me desato las manos e hizo lo mismo con Tabatha.
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Todo Por Ella
Romance¿Que pasaría si la mujer que creías el amor se tu vida, muere y te deja sólo, en depresión y con una bebé a la que no sabes ni cambiarle el pañal? ¿Y si la única persona que te puede ayudar es alguien a quien siempre Lástimas, una de las personas fa...