𝐅𝐎𝐑𝐆𝐎𝐓𝐓𝐄𝐍 𝐁𝐑𝐈𝐃𝐄

06 ✧ Think About You

Luego del día se la sesión donde la verdad de la femenina salió a la luz, Blue y Axl no se habían vuelto a encontrar, por lo que ella no se había enterado que el pelirrojo se encontraba a la fuga, porque el único cercano que se encontraba en Lafayette, Izzy, no había tenido noticia de su amigo desde el encuentro, por lo que no le fue complicado deducir que nuevamente se había tocado un punto sensible.

A este punto a Izzy solo le quedaba ir a buscar al perdido cantante.

Axl miraba el lago sentado en el pasto con las piernas flexionadas con los brazos alrededor de las piernas con un cigarro colgando de entre dos dedos, el cual de vez en cuando llevaba a sus labios con la mirada tildada y perdida sobre la superficie acuosa.

—Sabía que estarías aquí.

Axl levanto la cabeza y se encontró con los ojos verdes de Izzy, o lo que se podía ver de ellos por los finos mechones negros.

—¿Si sabías por que no viniste antes? —pregunto solo por su propio malhumor volviendo la cabeza.

—Esperaba que volvieras solo —respondió sentándose a su lado, imitando la posición del otro—. Aquí veníamos a fumar después de escaparnos de la escuela —recordó viendo el lago.

—Si...

Izzy volteo a verlo y viajo su mirada un poco por su rostro antes de hablar.

—¿Que paso? —pregunto con una leve brisa acariciándolo, mientras el viento fumaba el cigarro enviando el humo en la dirección que quería.

Axl inspiro profundo, llegando al limite de sus pulmones para luego soltar el aire.

—Los padres de Blue murieron —empezó a decir frunciendo un poco el ceño, dándole una expresión seria y conflictuada—. Ella me envió una carta porque ellos querían saber de mi y porque me necesitaba a su lado, pero... nunca volví —negó un poco apretando los labios—. Los abandone, una vez más.

—Espera, ¿que? —se giro un poco mas viéndolo con ojos algo achicados—. ¿Por que no...?

—Nunca me llego la carta —lo corto en seco—. El personal la recibió y le avisaron de aquello, pero a mi nada, nunca me dieron el aviso.

—¿Que? —volvió a preguntar mas confundido—. No tiene sentido el que no te dieran la carta y que encima le avisaran para que supiera que llego, si no querían que la vieras simplemente hubieran hecho como si nada, como si equivoco al enviarla.

—No sé —negó Axl cerrando unos momentos los ojos—. Averiguare cuando vuelva a Los Ángeles, pero ahora no hay nada que pueda hacer, es algo irreversible la muerte de ellos y que yo no estuve allí.

Izzy se le quedo mirando un poco frotando sus algo finos labios entre ellos bajando la vista para unos segundos después volver la vista al frente viendo la superficie del lago brillar con el sol.

—Yo estoy aquí —fue todo lo que el pelinegro dijo.

Axl dejo que su amigo pusiera una mano en su hombro en señal de que su oído y hombro siempre estarían disponibles.

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—Buenos días —saludo un joven chico al ver como un hombre con bandana roja en la cabeza ingresaba en la tienda.

—Buenos días... —respondió viendo alrededor la enorme cantidad de flores, de todos tipos y colores mientras se acercaba con cierta lentitud al mostrador.