Capítulo 28.
Me encontraba hablando por Skype con Adiel, Rob y Ross, los tres estaban juntos sólo para verme por una laptop.
La verdad, me hacía muy feliz el que ellos se hayan reunido para verme, por lo menos en una cámara.
La sorpresa que hizo mi novio, ya se había acabado y estaba terminado, lo único que quedaba era el Skype.
-No puedo creer que ese idiota te haya pedido matrimonio, Mark me cae mal desde que entró al instituto, se cree la gran cosa como tiene ojos verdes y es rubio- dijo Rob haciendo una mueca de mal gusto, me reí.
La verdad todo eso es mentira.
Mark es un gran chico.
No es nada de lo que dicen los demás.
-Bueno, supe que Ian está ahí- dijo Rob.
-Si, llegó hace una semana- dije con una sonrisa.
-Oh, y como reaccionó?- preguntó Adiel.
Ross estaba arrecostada sobre Adiel, y Rob estaba al lado de Adiel.
-Fue extraño, no pude ver bien, pero solo se fue a mi habitación- dije sin mucha importancia.
Juegas muy sucio.
No.
Sólo hago lo que quiero.
Haces lo que dice tu mente, no lo que dice tu corazón.
¿Mí corazón?
Estupideces.
Mi conciencia me está jugando.
-Yo reaccionaría así, si el novio de la chica que me gusta le pide matrimonio en una fiesta que yo- Ross le tapó la boca a Adiel.
Que yo..?
-¿Cómo?- pregunté confundida.
Ross suspiró.
-Ian fue el que organizó la fiesta, todos lo cubrieron porque sería mal visto, que tú ex haya hecho eso y no tú novio- comento mi amiga.
¿Es que acaso no pueden ser sinceros?
-Chicos, disculpen iré a hacer algo- dije cortando la vídeo llamada.
Miré hacia al lado, estaba la puerta abierta.
Me levanté y ví la puerta del cuarto de Ariana.
La luz estaba apagada.
Supuse que estaba dormida.
Entré en la habitación.
Busqué las llaves de su coche.
-Agarra mi coche, no importa sé que irás con Markus- murmuró lo suficientemente fuerte para que escuchará.
Suspiré de alivio.
Menos mal.
-Gracias- agradecí. Agarré las llaves y salí de allí lo más rápido posible.
Ian es un estúpido.
Había un semáforo en rojo y paré.
Maldita sea.
Ian es un idiota.
Es un Miedoso.
Idiota.
Cuando se colocó la luz en verde salí apurada.
Cuando giré a la izquierda ya estaba a dos cuadras de la casa de Ian.
O más bien.
Del alquiler.
Cuando llegué, salí del coche junto con las llaves del coche, cerré las puertas.
Me dirigí a la puerta del idiota.
Toqué.
Maldito Ian.
Toqué.
Y toqué otra vez.
Miré el picaporte.
Abrí como si fuese mi propia casa.
Estaba abierto.
Sorprendida, cerré la puerta.
-Ian, inútil.- llamé.
-Map, si, tú- llamó él en otra habitación.
Entré a la habitación de Ian.
Como siempre, estaba limpia, acomodada.
Lo único desordenado era la cama y porque Ian se había levantado.
-¿Por qué?- pregunté sin más.
-¿Porque qué?- preguntó el confundido.
-¿Por qué le diste el "crédito" a Mark?- pregunté decidida.
Él se sentó en la cama.
-¿Quién te dijo?- preguntó con leve molestia.
-Eso no importa, lo que importa es porque razón no dijiste que tú preparaste la fiesta.- dije molesta.
-¿No crees que sería feo, el que tú ex te hiciera una fiesta y tu novio te pidiera matrimonio?- resaltó Ian.
-Si, pero más feo el que no te digan la verdad, Ian, sabes que eres importante y el que hayas hecho eso me duele.- replique.
-Tú me dueles- murmuró cabizbajo.
Me acerqué a él.
Me había sentado junto él.
Mierda.
Volvieron.
Ellos volvieron.
Malditos sentimientos.
Los sentimientos volvieron.
-Tú haciendo todas estas clases de cosas, es doloroso para mí, me confundes, es como si me trataras como cuando éramos novios.- susurró.
Él me dice esta clase de cosas y yo sólo quiero besarlo.
-Ian yo..- susurré sin terminar.
-¿Tú qué? Te casaras con él ¿verdad?- dudó.
-No, Ian, yo.. no lo aceptaré, lo haré por ti.- musité.
-Map, tú no puedes hacer eso, si lo amas ve con él, yo estaré feliz por ti, por más que me duelas.- respondió.
-No.. Ian entiende, ¿Por qué mentiste en algo que para mí me significó mucho? Dime ¿Cómo me hubiera pedido matrimonio? Dime Ian.- reclamé. -Gracias a ti, el me pidió matrimonio.
-Pero es que Map.. él es para ti.. son el uno para el otro.- empezó a llorar -tú y el, son la pareja perfecta.. es má..—
Lo calle.
Pero no de una forma normal.
Lo besé.
Mis labios al sentir los de él se unieron de una vez, como si estuvieran esperando ese momento.
Extrañaba sus labios.
El sentimiento que me da él es inigualable.
Mis labios y los de el eran un lío.
Era un beso tímido y lento.
Por fin, nuestros labios se tocaron después de tanto tiempo.
Sabía que esto estaba mal.
Estaba engañando a Mark.
Pero no a tus sentimientos.
¿Enserio?
Al separarse de Ian, ella lo miró atentamente.
-Aún te amo- susurré sobre sus labios.
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Chica Perfecta
Teen FictionMap es una chica estudiosa, muy pegada a los libros, con su actitud arrogante y su uso del sarcasmo, la hacen la chica más "divertida" de su salón. Ian el nuevo, raro, extraño, guapo, sarcástico, idiota y según Map su síndrome de Estúpido, lo hacen...