Capitulo 15

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Hanna*

Max es muy agradable, aunque, nunca para de hablar, pero eso no me molesta, si no, que me gusta que sea tan directo.

-Sabes conozco a Meison desde que nació, tengo un año más que el, pero siempre me lleve muy bien con el, es muy sociable aunque no lo demuestre, es un poco molesto y frío a veces, pero eso es porque su novia, con la que llevaba 3 años le dejo hace un mes por otro de la manada de la que soy alpha, su novia... era mi hermana, pero yo nunca la quise como tal.- Dijo con nostalgia en la voz y mirando mientras al espacio entre dos arboles que había al lado de donde habíamos parado a descansar un poco.- Era mi hermana, pero era muy fría, siempre que nos veía a mi y a mis padres nos decía que nos odiaba, que por nuestra culpa ella no podía ser feliz... Entonces conoció a Meison, se hicieron mejores amigos una semana después de conocerse cuando tenían 5 años, tienen la misma edad, eran inseparables y a los 16 años empezaron a salir como novios, pero hace un mes cuando Meison vino a visitarla a casa y subió a su habitación se la encontró en la cama con Eduardo un chico de 20 años, bueno en la lucha, pero arrogante e impulsivo, cuando Meison se recupero del shock le pidió explicaciones a Anais, así es como se llama mi hermana pequeña, ella le dijo que no lo quería, que el nunca la haría mujer, mi hermana y Meison nunca se habían acostado, aunque Meison lo había intentado.- Eso me entristeció bastante, porque Meison había amado a otra chica y aun no sabia si la seguía amando, pero me alegro que no hubiera intimado con ella.- Mi hermana era virgen o eso nos hizo creer. Nos engaño a todos, incluido a mi y a mis padres, esa noche ella se fue con Eduardo y no la he vuelto a ver.- Dijo triste, pero cuando volvió a mirarme sonrió.- Pero Meison esta mas feliz desde que te conoció aunque no hallan pasado muchos días desde eso, no para de hablar de ti y lo perfecta y guapa que le pareces.-Dijo sonriéndome, yo me sonroje y mire al suelo.- Bueno te toca a ti responder; Que hacías en el bosque sola?

Le conté todo lo que me había pasado mientras caminábamos.

-Madre santísima, si que lo tuviste jodido.-Dijo impresionado.- Bueno, ya estamos llegando, no hemos tardado tanto como pensaba, solo han sido 2 horas caminando. Ves aquellos arboles.- Me dijo señalándome unos cerezos en flor que no estaban muy lejos de donde nos encontrábamos.- La casa esta detrás de ellos, sube a mi espalda así llegaremos antes.- Me dijo y se agacho para que pudiera subir fácilmente, ya estaba oscureciendo, pero al tener la vista mas desarrollada que los humanos no era un problema el no tropezarnos con raíces que sobresalían del suelo. Por fin llegamos a una gran casa, desde fuera se podía ver que tendría 3 pisos, estaba pintada de color crema y tenia algunas enredaderas subiendo por las paredes, también tenia muchas flores de todo tipo y colores en la parte delantera de la casa.

-Ya llegamos.- Dijo Max y me ayudo a bajar de su espalda. Fuimos hacia la puerta y Max llamo al timbre, mientras yo intentaba saber que tipo de flor era una que había visto entre todas las demás, de color azul marino, parecida a un tulipán.

-Max?-Pregunto Cristopher al abrir la puerta.- Que haces aquí?- Le pregunto

-Vine a traeros un regalo de bienvenida, me da mucha pena tener que separarme de ella pero supongo estaréis preocupados por ella.- Dijo Max, al parecer Cristopher no me veía desde la posición en la que me encontraba.

-Un regalo? Ella?-Dijo Cristopher extrañado.-Si ella y si un regalo.- Le dijo a Cristopher.- sal de detrás mía pequeña.- Me dijo Max, cuando salí de detrás de la espalda de Max, Cristopher se me quedo mirando asombrado, luego me aplasto en un abrazo y me susurro al oído que estaban muy preocupados por mi, cuando rompimos el abrazo, nos invito a pasar. La casa era impresionante, la entrada estaba pintada de color rojo sangre con algunos decorados dorados como dragones, u otros seres mitológicos, en medio de la entrada se encontraba una escalera enorme en color oro, por esa escalera pasaba una gran alfombra roja. La escalera se dividía en tres partes,hacia la izquierda y derecha había habitaciones de invitados, cada una con baño personal y un gran armario, y siguiendo recto se encontraban las habitaciones principales y otras habitaciones como un gimnasio, una sala de armas, una sala de música, un cinema, y otras, en la habitación del final del pasillo se encontraba una gran piscina climatizada. En el piso de abajo se encontraban, una sala, la gran cocina, un cuarto de baño, una puerta que conducía al garaje, y unas puertas correderas que llevaban al jardín, donde había una piscina y el bosque alrededor.

-Pasar al salón por favor.- Dijo Cristopher, Max y yo nos dirigimos hacia el arco que daba paso a un salón de color crema, con dos sofás también de color crema, y enfrente una chimenea de piedra donde colgada encima se situaba una televisión de plasma, a unos pocos metros del sofá de la izquierda había otro arco que llegaba a el comedor, y hacia la derecha detrás del sofá había un gran ventanal que dejaba ver el bosque.

-Hermano quien llamaba?-Pregunto Thomas, que estaba apoyado en la chimenea encendida. Cristopher no le respondió ya que entramos detrás de él al salón y todos me vieron.

Ian vino corriendo a abrazarme con los ojos llorosos y Alan hizo lo mismo, cuando nos separamos mi hermano me dio un beso en la frente y se fue a sentar en el sofá de la izquierda con Alan y otro chico muy parecido a Max. Max, Cristopher y yo nos sentamos en el sofá de la derecha, y Thomas se quedo en el mismo sitio en el que estaba cuando llegamos, ahí fue cuando empezaron a interrogarme.

-Estábamos muy preocupados Hanna, donde te habías metido?-Me pregunto Alan.

-Estuve en el bosque, en un claro que encontré, allí me quede dormida apoyada en un árbol, me desperté al escuchar ruidos de pasos, Max apareció entre los arbustos y peleamos, yo iba a ganarle pero me mordió.- Dije y señale la parte del brazo en donde me había mordido, ahora solo que daba de esa mordida una cicatriz que seguramente desaparecería con los días. -Después de eso me transforme en humana y el me pregunto que porque estaba en su territorio, así que se lo explique, y me ayudo a llegar asta aquí.- Acaba de contar, Ian estaba mirando mal a Max, Alan estaba pensando en algo y el chico que aun no me habían presentado empezó a hablar.

-Bueno, como nadie me presenta lo haré yo, soy Marcos, el hermano gemelo de Max-Me dijo ese chico que ahora que me fijaba si que tenia muchas cosas en común con Max, ya que tenia el pelo del mismo color y algunas facciones de la cara iguales, lo único que los distinguía eran los ojos ya que los de Marcos eran azules. Marcos empezó a contarme como era Max de pequeño, y Max empezó a pelearse con el, unos minutos después escuchamos ruidos fuera y nos dirigimos todos hacia la puerta para ver que era lo que ocurría.

Solo tuya (Sin Inspiración)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora