over again ; zayn y tú ✔✔

Prólogo

______'s POV

Un mes y medio ha pasado desde que Zayn se casó y para ser sincera, no puedo creer lo estúpida que fui al dejárselo a Natalie así como así. Me sentía una estúpida por sacrificar mi felicidad y la de mi hija por la de ella, quien siempre intentó hacerme miserable.

-¿Estás bien? -pregunta Austin interrumpiendo mis pensamientos.

-¿Por qué lo preguntas? -me concentro en su rostro.

-Porque estás pálida -me dice acercándose a tocar mi frente-. ¿Estás enferma o algo así?

-No -contesto en el mismo instante que Maia me da una patada en la costilla. Me quejo.

-¿Qué pasa? -se pone de pie y se acerca a mí.

-Nada -Maia vuelve a golpearme y esta vez un líquido escurre entre mis piernas-. Austin -digo intentando aguantar el dolor que estaba sintiendo-. Creo que ya es hora.

Sin dudarlo Austin me ayudó a llegar al auto, fue en busca de la ropa de Maia y la mía para irnos rápidamente a la clínica. En cuanto llegamos me hicieron entrar a pabellón. Solo quería que sacaran a mi hija de mi vientre, el dolor era algo insoportable, deseaba gritar con todas mis fuerzas, pero no lo haría porque sé que soy más fuerte que esto.
Hace un tiempo Austin y yo hablamos de este momento, aseguró que él estaría conmigo en todo momento, pero le dije que no sería necesario. Que si iba a recibir a mi hija lo haría sola, porque soy lo suficientemente fuerte como para hacerlo.

Estaba ya lista para pujar cuando una enfermera se me acerca y toma una de mis manos.

-Cariño, esto va a doler -dice en mi oído-. Pero puedes hacerlo, naciste para esto. Eres fuerte.

Cuando empecé a pujar sentía como cada uno de los huesos de mi cuerpo se modifican y se acomodaban conforme Maia iba llegando a este mundo, no sé en qué momento ni como ella logró salir. En cuanto escuché su llanto supe que todo había valido la pena, que cada una de las cosas que pasé ya sean buenas o malas habían tenido un motivo y todas ellas me habían dado el mejor regalo en la vida. Mi hija.

Cuando la acercaron a mi, besé su frente y hablé con ella. Estaba aliviada, por fin no estaría nunca más sola.

Luego de unas horas estaba en una habitación en reposo, con Maia a mi lado, durmiendo tranquila y sin ninguna preocupación. Me tomé el tiempo de admirar cada uno de los detalles de su rostro, sin duda era perfecta.

Austin acaba de entrar con un enorme ramo de flores y con una enorme sonrisa en los labios. En cuanto se acercó me besó en la frente y me felicitó. Luego observó a Maia dormir.

-¿Puedo cargarla? -preguntó temeroso.

-Claro que sí -sonreí. Estaba algo agotada y no era para menos.

En cuanto vi a Austin con Maia en sus brazos, recordé a Zayn. No había manera de sacarlo de mi cabeza. Estaba ahí clavado e iba a ser complicado sacarlo de ahí.

-Es preciosa -comenta Austin mientras comienzo a quedarme dormida-. Se le parece.

-Así es -sonrío al saber que Austin al igual que yo ve a Zayn reflejado en Maia.

-Sin duda estaría feliz de estar aquí -comenta-. Deberíamos decírselo.

-Aún no -digo adormilada.

-Pero merece saberlo, ______-dice serio.

-Lo haremos cuando Maia y yo hayamos vuelto a casa.

-¿Lo prometes?

-Lo prometo -respondí.

Y así fue como esos tres días se pasaron volando. Austin y yo acabábamos de llegar a casa, me acompañó hasta mi habitación y recosté a Maia sobre la cama quien se la pasa durmiendo.