Mi perdición (gmlrs)

Capitulo 3

Cat❤️: nenaa no sabes el chico q vino al club antes, ya me e ido pero me dio tiempo hacerle una foto 😱 era un dios griego 😍
*imagen* -no se le veía parte de la cara, sólo la chaqueta y se le podía notar que tenía buena estructura muscular cosa que me gusto mucho.
Yo: nenaa q antes me choque con el OMG el chico misterioso me a tocado😍
Era tarde, Catina ya se había quedado dormida y yo estaba apunto de hacerlo así que decidí dejar mi teléfono y dormir un poco antes de ir a clases.

~7:30 Am~

Mi despertador sonó como de costumbre y me levanté maldiciendo mi existencia. Me metí en el cuarto de baño que se situaba a la derecha de mi habitación, me lavé la cara para seguidamente volver a mi cuarto y vestirme.
Me puse unos vaqueros un poco rotos por las rodillas, una camiseta corta y por encima una sudadera de Adidas acompañado por mis superstars blancas. Desperté a jeremy para vestirlo y más tarde dejarlo en la casa de mi vecina antes de ir a clase. Me recogí el pelo en una coleta alta y me pase un poco de rímel ya que no me gustaba maquillarme para ir al instituto.
Llegué justo a tiempo antes de que mi profesor entrase y me senté en el único sitio que quedaba libre. A mi lado no había nadie pero pronto lo ocuparía un chico. Dimos clase hasta las 11:00 cuando sonó la sirena que indicaba la hora del recreo, ya no tenía más clases hasta mañana así que salí del instituto y cuando me dirigía a mi moto encontré a dos chicos apoyados en ella...
-perdonad...
Estos me miraron. Eran gemelos, bastante altos, el color de sus cabellos eran castaños, sus ojos marrones como el café, unos labios carnosos y buen físico.
- eh... -perdí el hilo de la conversación observándolos- eh estáis apoyados en mi moto y tengo que irme
X- perdona -esa voz me sonaba mucho pero no pude reconocerla.
Ambos chicos se quitaron y miraron como me subía y la arrancaba, vi como uno de ellos me miraba fijamente y el otro apartaba la vista.
Me dirigí a mi casa pero antes pase por la casa de mis vecinos a recoger a mi hermano. Lo lleve a casa y pasé toda la tarde con el porque esta noche tendría que volver al club y debía dejarlo con algún canguro.
J- tata esta noche trabajas?
-si mi vida pero no te preocupes que pronto lo dejare- le acaricie la cabeza y el siguió haciendo sus cosas
J- y este fin de semana podemos estar juntos todo el rato?
- claro -sonreí- y podremos ir al parque y a por chuches y donde tu quieras bebe
J- ya no soy un bebeee
-uy perdón perdón -le hice cosquillas hasta que el timbre de mi puerta sonó, abrí y lo miré asqueada.
- que haces tu aquí?