Capítulo 5

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De: Theron Shan

Tema: Actualización

Nuestro amigo Darok está manteniendo un perfil bajo. Reuniones estratégicas con otros oficiales de Fuerzas Especiales y un montón de tiempo en la terminal de su oficina. Él ha hecho dos peticiones a la SIS:

"Proliferación y despliegue del Isotope-5 en el Imperio" hasta aquí, los Imperiales han principalmente invertido su Iso-5 en la salida de fabricación y mejora de las infraestructuras de energía planetarias. Bastante conservador para los estándares Imperiales. Las bombas usadas en Tython fueron algunos de los indicios que hemos visto de armamentización, por lo que la petición de este archivo tiene sentido.

"Contrabandistas conocidos: Inner Rim" es lo que dice, una lista de contrabandistas cargueros operando en el Inner Rim. Cientos de nombres. No hay conexiones claras a Tython o Korriban. Me es difícil decir por qué él querría esta información.

Él ha arreglado naves para algún viaje en las próximas semanas, así que encontraré una forma de seguirlo. Si veo algo interesante, mi astromecánico te contactará.

PD: espero que consideres conseguir algún medio de comunicación más personal, no es nada fácil contactarte sin llamar la atención.

Erisvel apagó el pequeño datapad y lo tiró al otro lado de la sencilla cama donde se hallaba sentada. Se sentía fastidiada, sobre todo con esa última posdata.

Le irritaba que Theron tuviera toda la razón.

Porque, ¿Cuántos problemas, preocupaciones, se pudo haber ahorrado?

Un par de semanas antes, ella se encontraba en Ilum cuando de improviso el Alto Consejo solicitó su presencia de manera urgente. No habían querido darle más detalles al respecto, por lo que durante todo el viaje de regreso a Tython, la mujer había invertido su tiempo pensado en miles de posibles razones para tal llamado.

Cada una más inquietante que la anterior.

"¿Había hecho algo malo?"

"¿Se habrían enterado de su refugio?"

"¿O acaso...? ¿El Consejo había cambiado de opinión respecto a ella?"

Culpa de dudas como esas, no había sido capaz de dormir decentemente hasta que puso un pie en las casi restauradas Cámaras del Consejo Jedi, donde de las manos de la mismísima Gran Maestra Satele Shan recibió el anónimo paquete.

Si era sincera, no podía ver con los mismos ojos a la líder de la Orden Jedi... Al menos no después de haber conocido a su hijo secreto.

¿Qué otros misterios guardaría?

Además de la Maestra Satele, el resto de los integrantes del Consejo le hicieron toneladas de preguntas sobre el paquete. Algunas preguntas amables, otras... No tanto.

Como ella había prometido responder ante ellos sin titubear, no podía quejarse.

Después de todo, se lo debía a quienes contra todo pronóstico le dieron una segunda oportunidad.

Con sinceridad y educación, Erisvel había contestado de la manera más lógica y franca: que tal vez podía tratarse de un mensaje de de su antiguo Maestro, Syo Bakarn, quien se hallaba en algún lugar aislado de Tython, batallando fervientemente por controlar un mal interno.

Con ese argumento un tanto espinoso para todos los presentes, y no habiendo detectado ningún rastro de mentira en su voz, el Consejo la dejó ir, paquete incluido. Incluso le concedieron una habitación temporal para que pudiera instalarse y estar tranquila.

La Jedi y el EspíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora