RENDEZVOUS (Nuestro mundo)_

Contrato_por_una_flor_

Contrato_por_una_flor:

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— ¡Hola otra vez! —Florian le dio la bienvenida a gran voz a Asrael que estaba de vuelta en la mansión y la vista de Asrael examino el nuevo cuarto al que se le permitió entrar esa noche.

Florian hacia el mismo teatro y estaba seguro, que ese hombre pronto sedería. Esta vez, estaban en un comedor muy lujoso. Florian le presento un sinfín de los más exquisitos manjares y vinos (que él podía hacer aparecer con facilidad). Asrael comió y bebió hasta que se hartó. Hasta que el tiempo se cumplió, y Asrael se devolvió por la puerta al "mundo real".

Apenas el hombre salía, todo volvía a la normalidad. La ilusión que Florian creo se rompió y volvía a estar parado en el campo de Ilirias. No pasaba mucho cuando Ansa y Foederis se presentaban ante el para quitarle su "forma" y hacerlo trabajar su parte de tiempo como un "missus est mortis", según lo que acordaron.

Cuando Asrael volvía a dormir, Florian era transportado en un abrir y cerrar de ojos "en el mundo" y Florian tenía que empezar a preparar la fachada para atraparlo, antes de que el espíritu de Asrael llegara ahí formalmente.

Asrael volvió a despertar en la mansión.

Florian se encontraba al frente de una gran tela que separaba un cuarto nuevo. Asrael lo vio confundido hasta que Florian desvelo la tela. Adentro, había un harem entero de las mujeres más bellas que el hombre vio en su vida.

—Adelante, disfrútalo —indicó Florian en lo que le daba paso al cuarto con una mano.

Asrael no se dejó esperar y mientras saciaba sus bajos instintos con cada una de esas mujeres. Florian se quedó atrás de la tela sin dejar de pensar en cómo llego hasta ese punto.

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Después de tanto esperar, volvía a ser el hombre más feliz; aunque era en sueños, podía estar con su amada Iliria otra vez y creyó, que eso sería por siempre. Cuando en uno de sus sueños, extrañamente no apareció de lleno con su amada; sino, se encontró con su cuerpo flotando en un plano muy negro. Y una tenue luz comenzó a iluminar ese lugar, delatando a un hombre extraño muy alto, su ropa era tan oscura como su pelo y lo hacía confundirse con la oscuridad del lugar de no ser, por lo blanca que era su piel y este estaba a su frente, observándole.

Ansa no pudo dejar de empuñar sus manos con rabia al ver a Florian; pero ante todo, quería que el sufrimiento de Iliria terminara y mejor si era "por él".

Florian se quedó viendo al desconocido cuando pregunto:

— ¿Quién eres?

—Me llamo Ansa, vengo a decirte algo muy importante que tiene que ver con Iliria y también, sobre el lugar donde se reúnen.

— ¿Qué? —Florian hizo una pausa confundido antes de continuar—: ¿Ese lugar tiene un significado o algo así?

Ansa no impidió verlo con un profundo odio cuando volvió a hablar.

—Yo y mí contra parte siempre vemos el mundo real. Todo es muy aburrido, todos los humanos son ridículamente iguales y no tienen nada de especial —bufo cuando comenzó a adquirir otro semblante—, pero una mortal era diferente a todos juntos. O al menos para mí lo es... A pesar de todo lo que sufría, su corazón se conservó puro e inocente. Además... Tiene la sonrisa más bella que yo haya visto. Los años "favorecieron" a esa pequeña, pero ella era una mortal y nosotros, no podemos interactuar con los mortales; porque somos invisibles para ustedes.