RENDEZVOUS (Nuestro mundo)_

Tristeza_por_una_flor_

Tristeza_por_una_flor:

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Muchos en el pueblo comentaban sobre las misteriosas flores amarrillas que nacieron en el prado verde y como no tenían nombre, y como se enteraron de la historia del regalo para la joven. Todos comenzaron a decirles "Ilirias".

Después de lo ocurrido, Florián comenzó a ignorar a Iliria. Él la evitaba cada vez que podía y la joven no entendía el porqué. Varias veces, intento acercársele pero él siempre inventaba una excusa para no hablar con ella. Iliria se sintió muy mal, ambos pasaron tantos años juntos e incluso vivieron bajo el mismo techo durante un tiempo, antes de poder independizarse.

Era la primera vez que él reaccionaba de esa forma y la constante ignorancia de Florian hacia que Iliria no se concentrara en su trabajo y en un día normal, pregunto a las señoras a ver si ellas podían explicarle la reacción del joven.

—Tal vez esta celoso —dijo una de ellas y fue secundada por otras.

Iliria se sorprendió, no es que no lo hubiera pensado, pero ella no podía aceptar esa idea de lleno.

Iliria siempre guardo un aprecio especial por Florián pero jamás dejo que pasara esa línea. Hubo un tiempo en que quiso pensar que Florián gustaba de ella pero descarto esa idea, porque no quería confundir la amabilidad de Florián por otra cosa.

—Yo siempre me imagine a los dos como una pareja —hablo la mujer sacando a Iliria de su meditación.

—Sí, yo también. Siempre se los veía juntos. Incluso pensé que eran novios.

—Iliria... —hablo una mujer mayor—. No ganas nada buscando respuestas aquí. Si en verdad quieres saber que pasa, debes hablar con Florián.

— ¿Pero cómo? él se alejó de mí. No me da oportunidad ni para verle a la cara.

—Ve tú, esto no se resolverá solo y tu falta de decisión no ayudara. A este paso, puede que incluso se rompa tu relación con él.

Iliria se sintió peor con solo pensar en eso y las palabras de la mujer terminaron por despertarla. No ganaba nada con esfuerzos a medias y por primera vez, decidió tomar las riendas de la situación. Ella entendió que la única forma para acercarse a Florián, era engañándolo; por eso pidió la ayuda de su madre para que lo citara en su casa (ya que para esas alturas Florián vivía solo). La mujer acepto ayudar a la muchacha no solo porque le agradara. También porque sabía la situación de su hijo y no le pareció justo que él renunciara por un malentendido.

Cuando la madre llamo a su hijo hasta su casa. El joven se sorprendió al encontrar a su madre a lado de Iliria y luego de una disculpa y una despedida rápida, la mujer salió de la casa dejándolos solos.

Florián se quedó mudo un rato por la incómoda situación, pero antes de que Iliria pudiera hablar. Él se excusó para luego intentar salir, pero Iliria no lo dejaría escapar y lo agarró del brazo evitando que se fuera.

—Iliria ya te dije, estoy ocupado.

—Basta de tonterías. ¡Y deja de evitarme! Investigue, no tienes trabajos pendientes ni nada que entregar. Así que no mientas.

—Vamos no seas así.

— ¡Tú no seas así! No entiendo porque te has vuelto tan frío conmigo.

—Florián dio un suspiro molesto. —No seas terca, ¿quieres? No pasa nada, no estoy enojado contigo, ni nada. ¿Entiendes?

— ¡Mientes! Te comportas muy diferente. Alejándome así... ¡Estas siendo muy cruel! Y eso no es justo.