Mi abuelo me dejo pensando, y yo sabía que el tenía razón, pero aun así el miedo me detenía... Pero ya no quería tener miedo, tenía que ser inteligente.
En la tarde cuando fui por mi hermana y Francis, Francis estaba muy callado, solo veía por la ventana y se limitaba a asentir a lo que Madie platicaba.
Por lo que me había dicho Madie desde el viernes que Francis fue a la casa ellos se hicieron amigos e incluso a la hora del lonche estaban juntos, Madie lo había integrado a su pequeño grupo de amigos y a Francis le encantaba pero también me dijo que desde que vio el automóvil llegar se quedo muy quieto y serio.
Ese día pensaba pedirle su theglobe pero seria incómodo ante su seriedad.
Esa noche quise llamarle pero también sería incomodo hablar con él y que él me ignorara o fuera cortante.
Al día siguiente viernes 8 de febrero no hice mucho en mi casa, y al igual cuando fui por ellos Francis estaba incluso más serio ¿Qué chingados hice? No sabia si era por qué lo había dejado con la duda, si había sentido rechazo, si simplemente ya no le agradaba ¿Cómo puedes hablar más de 2 horas con alguien por teléfono a media noche y dos días después ignorarlo?
En la noche Laurie y mi mamá irían al casino, yo supuse que Francis iría a la casa puesto que por lo que Madeline me había dicho el seguía castigado.
Cuando llegó Laurie lo hizo sola, yo quería preguntar dónde estaba Francis, si venía en camino o si realmente me odiaba o qué pasaba, más no me atrevería a preguntar.

-¿No viene Fran?-.Cuestiono Madie.

Para mi suerte, no me quería quedar con la duda.

-No Madeline, se fue por el fin de semana con sus abuelos paternos-.Respondió Laurie.
-Okay, nos vemos en la noche-.Se despidio mi madre.

Madie me dijo que Francis le había contado que era muy cercano a su abuela, que era como su mejor amiga, o incluso más que eso, eran tan cercanos como mi hermana y yo a mi abuelo.
Fue un fin de semana común y corriente, Madie salió con mi mamá a pasear pero yo no quise ir, me quede con mi abuelo en el sótano viendo cómo hacía artesanías.
El lunes limpie mi habitación la cual apestaba a tabaco según mi hermana, yo ya me había acostumbrado al olor puesto que casi no salí de el, en el fin de semana me fume 2 cajetillas que para mí era demasiado.
En la tarde cuando fui por ellos pasó lo mismo que el jueves y el viernes, Francis me ignoraba totalmente ¿Enserio soy tan malo haciendo amigos que antes de tener una semana de amistad ya lo jodi todo?
Incluso me atreví a preguntarle a mi hermana si no sabía que pasaba con el o por qué era así conmigo, ella me dijo que lo había notado pero que no sabía que era y que no le había preguntado por miedo a que también fuera así con ella.
El martes Madeline amaneció con una fiebre que no la dejaba ni levantarse de la cama así que no fue a la escuela.
Yo me debatía si debía de ir por Francis o no.
Decidí que lo haría así demostrarle que no había ningún resentimiento de mi parte ante su reciente y extraño comportamiento.
Llegue al lugar donde siempre los encontraba pero él no estaba ahí lo cual era extraño ya que ellos siempre estaban ahí antes de que yo llegara. Voltee alrededor y lo vi avanzando ya camino a su casa, así que encendí el automóvil y empecé a avanzar junto a él y baje la ventana.

-¿Son unas carreras para ver quién llega temprano o tan impuntual soy que no pudiste esperar más?-.

Se veía sorprendido de verme ahí mas no decía nada y dejo de avanzar.

-Sube enano-.Indique abriendo la puerta.

En ese momento esperaba que no se fuera a molestar por mi comentario pero al parecer ni lo noto.

-Pensé que no vendrías, como no vino Madie-.
-Tenía fiebre, pero tú dijiste que odiabas el sol, no te podría dejar caminar-.

El se quedó callado pero se sonrojó un poco lo cual me hizo sonrojarme a mi, tenerlo junto a mí era increíble, por lo regular se subía en la parte trasera ya que mi hermana iba en el asiento del copiloto.
Decidí romper el silencio.

REMEMBER?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora