Entre a la tienda, compre vodka, cervezas y cigarros de clavo.
Al bajar Gregg tenía los ojos cerrados y no se movía.
Corrí al carro y deje las cosas en los asientos de atrás.

-Gregg-.Dije estrujandolo bruscamente.
-¿Que ocurre?-.Respondió el abriendo un ojo.
-¡Mierda me asustaste!, pensé que... que...-.
-¿Que había muerto?-.
-No lo se, simplemente me asustaste-.Termino de decir arrancando el carro.

Llegamos al bosque, ambos sabíamos a donde nos dirigimos caminábamos en silencio.
Al llegar a el lugar los dos tomamos asiento y abriemos las cervezas y empezamos a tomar.

-¿Como te ha ido en New York?-.Pregunte.
-Me acaban de despedir de mi trabajo-.
-¿Que? ¡¿Por que?!-.
-Fue mi culpa, el puto vicio hacia que no estuviera concentrado, que no tuviera rendimiento, que llegará muy tarde o en veces ni si quiera llegara, también están a punto de correrme del departamento-.
-¿Por que dejaste que se apoderara de ti?-.
-Por que... por que soy débil, una ciudad nueva, un trabajo nuevo, lejos de mi familia y mi abuelo que estaba muriendo, lejos de ti...-.

Me quede en silencio analizando la situación, sus palabras y sus grandes sentimientos.

-¿Recuerdas lo que me dijiste aquí hace 4 años?-.
-No lo se Fran, digo muchas cosas-.Respondió encendiendo un cigarrillo.
-La ultima vez que estuvimos aquí... dijiste "Si nuestro amor es tan grande como decimos el destino como fue tan bueno para unir nuestros caminos se encargará de hacerlo de nuevo"... ¿Crees que el destino lo hizo?-.

El solo me vio, y me besó, yo lo seguí.
Pasamos toda la tarde ahí, seguida de la noche.
A la mañana siguiente salimos de ahí, más mi carro no tenía gasolina.

-Tendremos que caminar-.Comente.

Empezamos a caminar y cuando menos me di cuenta el tomo mi mano y así caminamos hacia frío más su mano me daba esa corriente caliente que era suficiente para sentirme bien.

Llegamos a la gasolinera y compramos un galón nos devolvimos por el carro y en el camino Gregg hablo.

-¿Volverás con Hannah a Los Angeles?-.

Yo suspire odiándome tanto.

-Me temo que...-Era tan difícil-Que sería muy injusto para ella ¿Sabes?-.El asintió-Estar con alguien que no la ama tanto como ella a esa persona, así que creo que me quedaré... ¿Y tu?-.
-Me temo que todo lo perdí así que creo que me quedaré también-.
-Sabes... mi papá renta casas, y después de ser independiente no me gustaría volver con mi mamá y me imagino que a ti tampoco entonces...-.
-Si Francis, si quiero vivir contigo-.

Ambos sonreimos, por que todo parecía ir de maravilla.
Deje en su casa a Gregg y yo me fui a la mía, me encontré con mi mamá sentada a un lado de la puerta.

-Francis ¿Donde te metiste?, estaba muy preocupada, incluso mande a Hannah y a su hermano a que te buscarán-.
-Solo recordando los viejos tiempo mamá, no te preocupes-.

Sonó el timbre de la casa y mi mamá fue a abrir, era Michael el hermano de Hannah.

-Hijo, gracias por ayudarme, ya llego-.Le comentó mi madre señalándome.

Salude tímidamente.

-Si, vimos su carro afuera-.
-¿No quieren pasar a comer?-.
-No, Hannah no se siente bien, iremos a casa-.Comento el retirándose.

Mi mamá hizo un puchero.

-Mmm... ¿Ya no le agradó a tu novia?-.
-No, mamá, no es eso... ella está pasando por una faceta-.
-¿Faceta de que?-.
-Extraña a su familia, duda sobre nosotros-.
-Eso sucede, cuando me fui a vivir con tu padre yo era muy joven, claro que fue en una circunstancia diferente, yo me escape y era muy ingenua, ustedes dos estarán bien, no te preocupes-.
-Bien cada quien por su lado-.
-No hijo...-.
-Mamá...-Interrumpí-Hannah y yo... ya... perdimos la chispa, perdimos el fuego, y estoy seguro que nos tenemos mucho cariño, pero...-.
-¿Pero que?-.
-Solo es cuestión de tiempo que alguien abra la boca y diga la verdad para que todo se acabe-.
-No hijo, las cosas no tienen que ser así, no todo siempre es perfecto y...-.
-Mamá-Interrumpí de nuevo-Se acabo, yo quiero a alguien más-.
-¿¡Que!?-.
-Y se lo diré, por que esto la lastima a ella, a el y a mi-.
-¿¡Dijiste "El"!?-.
-Y lo tengo que hacer ya-.Exclame tomando las llaves para alcanzar a Hannah.
-Francis espera explícame...-.

En ese momento no lo notaba pero haciendo memoria iba muy, muy lento, tenía la cabeza en todas partes más no en el tablero del carro, ya que llegue y Hannah estaba saliendo.
Ni si quiera aparque bien, de suerte tenía la ventana abierta por que de no haber sido así hubiera tenido que costearme un cerrajero ya que era tanta mi adrenalina que me causo estar a punto de confesar la verdad por que ni si quiera retire las llaves.

-¡Hannah!-.Exclame y ella me ignoro.

Corrí hacia ella y la tome del brazo.

-Escúchame por favor-.
-No es necesario-.

En eso Michael salió con su maleta.

-¿Ya te vas?-.Interrogue.

Ella se quedó en silencio y una lágrima se asomó.

-Te das cuenta que no eres más bienvenida cuando ves a tu novio de la mano con el que se suponía era su mejor amigo...-.
-Hannah yo...-.
-Te da una patada en el culo cuando los ves besarse-.
-Lamentó que vieras eso, lamento haberte herido, puedo jurar que no era mi intención y sobre todo lamento haberte decepcionado...-.
-Yo también-.Agrego ella tratando de contenerse.
-Mereces a alguien mejor y lo sabes-.
-Francis... detente-ella suspiró- no es necesario que te disculpes, no hay forma de que puedas reparar lo que me hiciste,  avísame cuando vayas por tus cosas por favor-.Ella se dio la vuela en dirección al carro de su hermano.

Yo me quedé atónito por lo que acababa de suceder, acababa de tirar a la basura mi amor de años y mi perfecto futuro por un romance inestable, Hannah era todo para mí y era mi razón. Ella se dio la media vuelta avanzó hacia mi yo hacia ella. Nos dimos un gran abrazo.

-Espero que seas realmente feliz Francis-.
-Igual Hannah, cuídate mucho ¿Si?-.

Ella asentó y siguió su camino, la dejaba para construirme algo nuevo, y sabía dónde comenzar así que fui a mi carro y tome camino a la casa de los Wright.
Cuando llegue fui a la entrada iba a tocar el timbre cuando escuche muchos gritos de toda la familia Wright así que abrí la puerta.

-Por el amor De Dios detente Robert-.Exclamaba ella.

Y Madie intentaba que Robert dejara de golpear a Gregg el cual estaba en un sillón con sangre en la nariz y en el labio.

-¡No mujer! Yo no tendré hijos maricones-.
-Con esto no se lo vas a quitar-.Repuso ella.
-¡Prefiero no tener hijo entonces!-.Dijo esté aumentando la violencia.

No parecía que lo estaba matando, realmente lo estaba matando, y no había nada que podía hacer. Gregg quedó inconsciente y el señor Wright no se detenía. Yo estaba ahí, viendo todo, más parecía un fantasma ya que ellos no parecían notarme y no hacia yo nada.
Llego la policía y una ambulancia, al parecer los vecinos reportaron los gritos. La policía se llevó a Robert. Dian iba con Gregg en la ambulancia mientras que Madeline y yo íbamos al hospital en mi carro, Madeline conducía, yo aún no podía asimilar lo que había pasado.
Cuando llegamos al hospital dijeron que Gregg estaba bien pero la sangre perdida y los golpes lo dejaron inconsciente, lo anestesiaron para cerrarle una herida en la mejilla y hacerle una operación por que tenía una costilla rota.

-Entonces... tú y Gregg...-.Empezó Dian.
-A si es Dian-.
-Oh, que cosas, digo, Gregg siempre ha sido muy femenino pero... pensé que solo era eso y...-.
-Mamá-.Interrumpió Madie y después le hizo una señal de silencio.
-Solo diré que desde que te conocemos has sido como parte de la familia y estoy feliz de que ahora realmente lo seas-.Dijo ella sonriendo.

Al día siguiente cuando despertó lo primero que dijo fue mi nombre así que los doctores me llamaron y pase.

-Mírate, ahora entiendo por qué estabas tan asustado...-.Comente.
-Bueno-.Dijo el tratando de sentarse lo cual fue obviamente fallido y yo lo detuve.
-Te amo, y está no será la última vez que lo diga-.
-Yo te amo a ti Francis y se que esto lo escucharemos a diario de nuevo, y no será a través del teléfono-.
-Supongo que nuestro viejo secreto no será más un secreto-.
-Puedes estar seguro de eso-.Termino de decir el y después nos unimos en un beso.

Un beso que marco el final de las sombras para dar inicio a la luz de nuestro amor.

FIN

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