Cuteness in his Darkness || Wisplay

Sólo un beso

**Al día siguiente**

Me encontraba en la pequeña terraza que había en la institución bebiendo un café, cuando veo a Isma acercarse a mí de la mano de una enfermera.

-¿Puedo quedarme a solas con el doctor, por favor?- le pregunta a la enfermera

- Déjelo, y no se preocupe yo me encargo luego de que vuelva a su habitación sano y salvo- La joven agradece y nos deja solos.- ¿Que sucede Isma?- sonrío- ¿Para qué me buscabas?

- ¿Recuerdas que me dijiste que si recordaba algo más acerca de Raúl, te lo dijera?- juega con sus manos

-Sí, me acuerdo 

-Bueno... -sonríe- ayer me acordé de una caja que tengo con cartas de él, las enfermeras me la trajeron una vez y desde entonces las leo cuando pienso en él o cuando estoy triste. Pasa que... Raúl no era sólo mi mejor amigo- se sonroja- Raúl era mi novio.- mira hacia abajo y sonríe- No sabes cómo quisiera que estuviera aquí conmigo...

-Créeme, él está más cerca de lo que te imaginas

-¿En serio?- Sonríe ilusionado

-Sí 

Tomo notas en mi libreta de todo lo que me dice, las comparo con su expediente anterior, ha hecho un progreso impresionante, ni siquiera parece que sufre de amnesia. Había que trabajar un poco en aquello de recordar y reconocer caras, pero ahora que recordaba hechos y nombres, eso sería mucho más fácil. 

-Ismael

-¿Dime?

-Hay algo en mi oficina que quiero mostrarte, ¿me acompañas?

-Claro- nos levantamos y nos encaminamos a mi oficina- ¿Qué vas a mostrarme? ¿No serán excusas para darme medicamentos, o sí?- frunce el ceño

-No, no, no hay medicamentos. Te lo prometo.- niego con la cabeza y abro la puerta.- Siéntate por favor.- Me siento a un lado suyo y saco los álbumes de fotos.

-¿Qué es todo eso?- Señala los álbumes

-Son fotos de cuando era pequeño

-¿Puedo verlas?- se muestra entusiasta y me mira con esos ojos a los que nunca pude decirles que no.

-Claro- sonrío. Abrimos el primer álbum y las primeras fotos muestran a un Raúl de 5 años y a un Isma bebé.

-Tú eres el mayor, ¿no?- asiento con la cabeza- ¿Y quién es el pequeño?

-Es mi mejor amigo, se llama Ismael.

-¡Igual que yo!- se emociona y suelta una risilla- Es gracioso, mi mejor amigo se llama Raúl, como tú; y tu mejor amigo se llama Ismael, como yo- sonrío- Pero, venga, muéstrame más fotos- mira atentamente cada una de éstas- ¿Aquí qué edad tenías?

-Unos diecisiete años, vaya cara de tontaco que tenía, ¿no? - río

-No- golpea mi hombro levemente- No digas idioteces, que te ves muy guapo- sonríe- 

-Bueno... gracias- río

-¿Y que hay en esas cajas?- se acerca a ellas, dejo el álbum sobre la mesa y voy con él

-Son... sólo pósters y figuras y tal- abre la primera caja y saca una figurilla

-¡Son increíbles! ¿Para qué tienes todo esto? ¿Es tuyo? ¿Puedo jugar con ellas?

-En realidad, son para ti. Podemos ponerlas en tu habitación, si...

-¡Sí! Si quiero ¿Podemos hacerlo ya? ¡Por favor!- salta de la emoción

-Tranquilo chaval- río leve- ¡Que te me vas a desmayar de tanta emoción! Además aún tengo que comprar repisas para que las podamos acomodar.

-¿Puedo ir a comprarlas contigo?- Ahí estaba de nuevo esa mirada... 

-Tengo que preguntarle a mi jefe si me deja, ¿vale?- vuelve a mirarme de la misma manera- Vale, vale... está bien vamos. Ya me encargaré después de explicarle. 

***Ya en la tienda***

Narra Wismichu

Salir de ese lugar horrendo era la hostia, llevaba tanto sin ver "el mundo exterior" que todo me parecía asombroso y digno de admirarse; en especial mi doctor, a quien le había cogido confianza muy rápidamente. Sentía que lo conocía de toda la vida, sentía que ya lo había visto antes, me recordaba en muchas cosas a Raúl, incluso comenzaba a sentir cosas por él... 

Pero... ¿y si tenía razón, y Raúl realmente estaba tan cerca de mí? ¿Después de tantos años, seguiría siendo mi novio? ¿Seguiría amándome? Si ni siquiera recuerdo por qué de la nada dejé de verlo... No me dejó, él no lo haría...

¿Por cuál Raúl se supone que debo permitirme sentir cosas?

-Isma- la voz de mi doctor me saca de mis pensamientos- ¿Te gustan estas estanterías?

-Si, molan.

-¿Qué más te gustaría tener en tu habitación?- me sonríe

-Un televisor, pero sé que es muy caro...

-No te preocupes por el precio, Ismael. ¿Lo quieres?- me sonrojo y asiento con la cabeza

Estuvimos un rato en la tienda y otro paseando por la ciudad, lo pasábamos de maravilla. Al punto que nos cayó la noche y sentíamos que no llevábamos ni una hora afuera. Así pasa en las películas, ¿no? Y generalmente pasa entre dos enamorados... Y los enamorados se besan ¿no? ¿Tenía que besarlo?  Quizás no tenía que, pero quería hacerlo... ¿Qué más da si es mi doctor? ¿Qué más da todo? Si quizás mañana yo no lo recuerde. 

Nos detuvimos en una luz roja, volteé a verlo hasta que conseguí que ambos estuviéramos mirándonos a los ojos; parecía que quería decir algo, pero antes de que lo hiciera, me acerqué a él y lo besé...

Hola gente hermosa de internet! Tendrán que disculpar a mi cerebro que ha estado algo distraído el día de hoy xD si hay alguna parte que no tenga mucho sentido por favor díganmelo. (Yo espero que no la haya y que sólo sea mi mente jugándome una broma)

En fin, mucho lof para ustedes y un besazo fuerte fuerte  <3