Me había quedado en casa solo con Gail ya que no deseaba ver a mi hermana siendo obligada por nuestra madrastra a adentrarse en una hermandad como lo era pink queen, si bien eran conocidas todo él mundo sabia lo perras que podían ser, mucho mas cuando él primer grupo había llegado a donde estudiabamos, molestando a cualquiera que fuese menos popular o feo a los ojos de las rubias que conformaban ese clan por lo que ahora me encontraba sentado en él sofa con un suenco con cereales y leche mientras jugaba uno de mis videojuegos en la tele grande de él living, mis dedos resbalaban sin parar por él control, estaba en una de mis mejores partidas online por lo que seguro no me movería del sofa y mi nana acabaría trayéndome de comer. No se cuantas horas habré pasado en él cómodo sofá pero me sentía acalambrado por lo que apagando en mando del juego me levante estirandome para ir por una bolsa de refrigerios salados
Buscaba en él escondite que papá guardaba los macarrones con queso que su esposa le prohibía para encontrar una de aquellas codiciadas bolsitas de frituras cuando sonó él intercomunicador de la casa
-yo voy Theodore -dijo Gail pasando por la cocina -y deja de comer eso, hay fruta en la nevera-
-pero esto es mas rico nana Gail - dije sonriéndole y abriendo la bolsa para tomar un puñado de comida llevándomelo a la boca
-si mas rico, pero acabaras engordando y comiendo por las esquinas como tu padre -Y aquello era cierto, papa acababa levantándose por la madrugada para sacar de su escondite los posillos para calentar de queso con macarrón y luego para comérselos se escondía en su despacho bajo la mesa del escritorio para que ella no lo descubriese y como lo hacia todos los días y mas de una vez había acabado engordando, no en demasía solo su "adorada" trableta de chocolate que tenia por abdomen se había vuelto en una bolsa de majar, la que era la burla de Tía Mia, tía Kate y de la abuela, incluso él tío Eliot había acabado molestándolo por su condición física, aunque era entendible cuando la mujer con la que te habías casado solo permitía comida saludable o integral en casa y prohibía que comprases cuanquer chuchería que tuviese más de un 0.2 de grasa en su composición
Estaba metiendo un segúndo puñado de frituras cuando note que Gail no había dicho nada desde que se había acercado a la puerta por lo que me acerque quedando en él pasillo que daba a esta
-Gail quienes son? - pregunte viento al montón de hombres trajeados que estaban en la puerta
-señorito, debería subir a su recámara - dijo mi nana intentando cerrar la puerta de la entrada, pero ellos la detuvieron antes de que siquiera hiciese algo
-Gail, Theodore, venimos de parte de la señora Anastasia Steele -
Dijo quien estaba en frente de los demás guaruras y solo con eso ambos nos quedamos callados y les dimos la pasada al grupo de hombres vestidos y peinados igual-que paso con mi madre - pregunte dejando él envoltorio de papitas en la cocina
Sabia que mamá tenia una enfermedad por la cual se medicaba por lo que que ellos estuviesen aquí me preocupaba de sobre manera ya que él apoyo que mamá nos daba lo h
era todo para mi hermana y para mi, y mucho mas las veces que salíamos a vivir un tiempo con ella y nuestros hermanitos
- no podremos decir nada aquí dentro, pero tenemos instrucciones precisas Gail- dijo él mismo que había hablado todo él tiempo
- esta comenzando - pregunto mi nana como si supiese todo lo que me impresionó y mucho mas cuando aquel hombre asintió
-Theo, ve a abrigarte, yo estaré bien -dijo insitandome a subir las escaleras lo que hice, pero no sin antes conectar él monitoreo de la cámara y él sonido a mi celular por lo que no me perdería detalle. En cuanto cerre la puerta de mi cuarto ellos comenzaron a hablar, al parecer querían asegurarse que no escuchase pero lo estaba escuchando todo, Gail pregunto mas de una ves por mamá pero aun así no dijeron mucho más de lo que ya habían dicho en mi presencia, si no que mas bien él mismo tipo que siempre hablaba saco de su chaqueta dos sobres negros amarrados con una cinta roja por él centro de estos, Gail abrió enseguida uno de los sobres dejando él sobre negro y su cinta sobre la mesilla para extender la carta que traia en el interior de este entre sus manos leyéndola en voz baja por lo que no sabia lo que en ella decía pero no debía ser muy bueno ya que mi nana cubría su boca con su mano libre mientras que de sus ojos resbalaban gruesas lágrimas. Me vestía entre saltitos a la vez que miraba mi celular, no entendía mucho de lo que pasaba pero quizá era grave ya que nunca la nana Gail había llorado cuando venían noticias de mamá, al contrario siempre estaba feliz e intentaba hacer todo rápido para tomar a Phoebe y a mi y llevarnos al patio o a la plaza par darnos las buenas nuevas de mami
- debe guardar bien su sobre nadie debe saber que dice, pero él otro se lo debe dar al señor Grey a él y solo él, por la carta ya sabe lo que procede y no podremos demorarnos mucho - Gail solo asentía mientras cubría su boca y cuando él tipo acabo de hablar la vi correr a la cocina por lo que comencé a salir de mi cuarto no sin antes borrar la grabación del día, para mi suerte podía hacerlo desde él móvil, por lo que cuando estuve abajo con mi bolso y uno que pertenecía a Phoebe que había tomado de camino a las escaleras
- que pasara -
-nada malo- dijo él dándole una señal a uno de los muchachos que se encontraba a su lado él que tomo mi bolso y él de mi hermana antes de encaminarse a la salida - ya debemos irnos- me dijo él Tipo
Por lo que abrazando a mi nana me despedí de ella con un sonoro beso en su mejilla antes de salir junto con los guaruras, cuando subí en la segunda camioneta de las tres que tenían esos hombres me puse a pensar en que había traído algo de Phoebe sin saber si quiera si ella vendría a donde quiera que me llevasenMi vista estuvo fija en la ventana entintada en todo momento notando como nos alejábamos cada vez mas de Seattle, no paso mucho cuando la camioneta de adentro en lo que conocía como un angar, bajo primero él tipo que siempre hablaba, mientras los demás se mantenían dentro conmigo hasta que la voz de él se volvió a escuchar, pero en un idioma distinto los demás hombres que estaban conmigo en la camioneta salieron y me dejaron él paso libre por lo que no tarde mucho para que mi curiosidad ganase y fuera a ver que pasaba.
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La venganza de Anastasia.
Fiksi PenggemarTodo acabó, ahora sin nada ni nadie tiene que salir adelante y recuperar lo que perdió por culpa de aquella mujer, pero el camino será pedregozo y ella tiene un límite.